—No quiero ir.
—Vamos Jungkook. Vamos amigo, tu fuiste quien organizo la fiesta en mi casa en primer lugar. —Se quejó Baek.
—Si. —Murmuró Jungkook sobre la almohada —. Porque pensé que Kim Namjoon iría. Pero si no va, no tiene sentido para mi ir tampoco.
—Jungkook, literalmente estás en mi casa. En mi cama. La fiesta es abajo, no inventes.
—Dejame dormir. —Jungkook se quejó, mientras era jalado por el brazo para sacarlo de la cama —. Suéltame, vas a romper mi brazo.
—Ah, enserió. —Baek suspiró con fastidio y lo soltó —. Para alguien que dice no tener sentimientos reales por Kim Namjoon, estas demostrando todo lo contrario.
Jungkook trago saliva y fingió demencia mientras ignoraba a Baek aun con la cabeza enterrada sobre la almohada.
—Deja de ignorarme. Estoy hablando contigo.
—Ya te dije que no estoy enamorado de ese idiota. Solo me lo quiero coger. —Murmuró, aun sobre la almohada.
—Entonces demuéstralo y sal de la cama. Pase mucho tiempo organizando todo para que ahora me salgas con la idiotez de que no vas a ir.
—Si voy, ¿dejaras de fastidiarme?
—Por supuesto que no. Pero ya no te molestare por lo menos en unas cuatro horas.
—Peor es nada. —Habló Jungkook, sentándose en la cama —. Préstame tu ropa.
—Te traje la tuya porque sabía que querrías quitarme la mía. —Habló Baek, entregándole el cambio de ropa.
Jungkook la tomó, no del todo convencido y comenzó a vestirse.
—Deberías estar feliz. Invite a pura mujer hermosa, con cuerpos de infarto qué estarán muy dispuestas a ser folladas.
—Esa es la cuestión, son demasiado fáciles.
—Vamos amigo, olvida esa obsesión que tienes por Kim Namjoon. Ni siquiera es tan guapo. Por lo menos yo no le veo el encanto por ningún lado.
Jungkook reprimio el impulso por decir lo contrario. Pues a sus ojos, Kim Namjoon era simplemente perfecto.
—Como sea. Solo vamos a tomar hasta que no recuerde ni mi nombre.
—Ese es el Jungkook que conozco. —Le animo Baek, bajando con entusiasmo para seguir atendiendo a los invitados y asegurarse de que no se roben o rompan algo.
Mientras Jungkook daba los últimos ajustes a su arreglo y se veía en el espejo.
"Ese es el Jungkook que conozco". Recordó las palabras de Baek.
—Yo me desconozco por completo. —Admitió Jungkook es voz baja para posteriormente bajar de igual manera.
.
.
.
.La música era demasiado ruidosa. Al igual que la gente molesta que no hacía más que bailar y tirar cosas como si estuvieran en un establecimiento público y no en una casa ajena. Iba a decirles que se largaran a la gente irrespetuosa cuando su atención se desvío a cierto chico alto de piel canela, quien venía acompañado por...
—¿Kim Taehyung? —Murmuró Jungkook, frunciendo el ceño. No se suponía que ese idiota estuviera ahí después de todo.
Miró como Taehyung le decía a algo a Namjoon en el oído y él le sonrió en respuesta, dejando una leve caricia amistosa sobre su cabeza. Y aquello hizo hervir la sangre de Jungkook, así como provocar una enorme pesadez en la boca de su estómago. Sin darse cuenta, ya se encontraba caminando en dirección a ellos.
—Así que, ¿ahora estas con Namjoon, Kim? —Dijo Jungkook cruzandose de brazos una vez estuvo frente a ambos.
—No es de tu incumbencia. —Dijo Namjoon, sujetando a Taehyung por los hombros y pasándolo de largo.
Jungkook los siguió, deteniéndose de nuevo frente a ellos.
—¿Qué hay de YoonGi?, tanto amor que decías tenerle y ahora andas detrás de otro como si nada. ¿Qué es?, te propusiste a andar con todos los chicos que me interesan?
—Ya callate. —Habló Namjoon.
Jungkook sorpresivamente obedeció, sintiéndose algo intimidado por la fuerte voz de Namjoon.
Al ver que Namjoon seguia su camino junto a Taehyung para comenzar a conversar con otras personas y beber un poco, Jungkook se dirigió hacia la cocina. Buscó en la alacena, y se encontró con una botella de whisky escondida. La abrió y le dio un gran trago, decidido a que se divertiría en esa fiesta, sin importarle un carajo que tuviera que obligarse a hacerlo.
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Seven || JK. NJ
LosoweEn donde Jungkook queda flechado por el lindo chico nuevo y quiere f**larlo tan bien los siete días de la semana.