Entre el Caos y el Corazón: El Secreto de Twilight y Pinkie

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El sol de la mañana iluminaba el patio de la escuela mientras Twilight Sparkle y su amigo Flash Sentry se sentaban en una esquina tranquila, conversando. Twilight, con su corazón todavía agitado por los recientes acontecimientos, se sentía un poco aliviada al estar con alguien en quien confiaba. Sin embargo, no podía dejar de pensar en el beso que le había dado a Pinkie Pie y en las dolorosas consecuencias que eso había traído.

Flash Sentry: (Observando a Twilight con preocupación) ¿Te sientes mejor? Sabes que puedes hablarme de cualquier cosa.

Twilight: (Con un suspiro) Gracias, Flash. Estoy tratando de entender lo que pasó. No quería lastimar a Pinkie. Fue un impulso y ahora no sé qué hacer.

Mientras Twilight hablaba, Pinkie Pie se dirigía hacia el gimnasio con pasos decididos, susurrando a su novio, Cheese Sandwich, sobre lo que había sucedido. Pinkie había encontrado a Cheese en el patio y, al contarle los eventos, su enojo se desató. Ella sabía que necesitaba enfrentar la situación antes de que las cosas se pusieran peores.

Pinkie Pie: (Con voz preocupada) Cheese, tenemos que hablar. Twilight está aquí y no puedo encontrarla. La situación es complicada y tú tienes que calmarte.

Cheese Sandwich: (Visiblemente molesto) ¿Cómo que calmarnos? ¿Por qué está escondiéndose? ¡No me gusta cómo está manejando esto!

Cheese, sin esperar una respuesta, se dirigió hacia el gimnasio con una mezcla de furia y preocupación. Pinkie lo siguió, intentando mantener la calma. Cuando llegaron, encontraron a Twilight sentada en un banco, hablando con Flash.

Cheese Sandwich: (Gritando desde la puerta del gimnasio) ¡Twilight Sparkle! ¡Sal de aquí y enfréntame!

Twilight, al escuchar la voz de Cheese, se puso tensa. Flash Sentry también notó la tensión y se puso de pie, preparándose para intervenir si fuera necesario.

Pinkie Pie: (Intentando calmar a Cheese) ¡Cheese, por favor! Esto no ayudará a nadie. Twilight no ha hecho nada malo.

Cheese Sandwich: (Enojado) ¡Ella te lastimó y ahora está escondiéndose! ¡No puedo quedarme de brazos cruzados!

Pinkie, viendo la situación volverse más tensa, decidió intervenir de inmediato. Se acercó a Cheese para razonar con él, mientras Flash se colocaba entre Cheese y Twilight, dispuesto a proteger a su amiga. La discusión se tornó más intensa, y Cheese, sin poder contener su enojo, empujó a Pinkie Pie, lo que solo incrementó la tensión en el lugar.

Flash Sentry: (Enojado) ¡Eso es suficiente, Cheese! No tienes derecho a tratar a Twilight y Pinkie así.

Cheese Sandwich: (Desafiando a Flash) ¡Ellas son las que están creando el caos aquí!

En ese momento, Rainbow Dash, que había estado en el gimnasio para practicar, apareció y vio la escena. Sin pensarlo, se interpuso entre Cheese y Twilight.

Rainbow Dash: (Con determinación) ¡No vas a hacerle daño a nadie aquí, Cheese! Si sigues con esta actitud, no dudaré en detenerte.

Cheese, viendo la firmeza en los ojos de Rainbow Dash, decidió que no podía hacer mucho más en ese momento y, con una última mirada furiosa, se alejó del gimnasio, murmurando su frustración.

Pinkie Pie, aliviada pero aún preocupada, se acercó a Twilight, quien estaba visiblemente nerviosa. Twilight había estado observando la confrontación con una mezcla de miedo y vergüenza.

Pinkie Pie: (Con voz suave y alentadora) Twilight, ven conmigo. Necesitamos hablar.

Twilight: (Sonrojándose levemente) ¿A dónde vamos?

Pinkie Pie: (Tomando la mano de Twilight) Al gimnasio. No te preocupes, todo estará bien. Solo quiero hablar contigo en un lugar tranquilo.

El contacto de las manos de Pinkie hizo que Twilight se sonrojara aún más, su corazón latiendo con fuerza. Aunque estaba agradecida por el apoyo de Pinkie, no podía evitar sentirse incómoda al enfrentar a la chica a la que había besado sin querer. Pinkie la guió hacia un rincón del gimnasio, lejos del bullicio y de las miradas curiosas.

Twilight: (Nerviosa) Pinkie, siento mucho lo que pasó ayer. No sé por qué lo hice. Fue un impulso, y ahora me siento terrible por cómo reaccionaste y por cómo Cheese está actuando.

Pinkie Pie: (Con una expresión seria pero amable) Twilight, entiendo cómo te sientes. Y yo también tengo sentimientos por ti, pero mi situación es complicada. Mi novio, Cheese, puede ser muy impulsivo. No quiero que te haga daño, y tampoco quiero que nuestra relación cause más problemas.

Twilight: (Mirando a Pinkie con sorpresa y confusión) ¿Entonces, qué hacemos ahora?

Pinkie Pie: (Respirando profundamente) Quiero que sepas que me importas, pero necesitamos mantener esto en secreto por ahora. No podemos dejar que mi relación con Cheese nos cause más problemas. Quiero que estemos juntas, pero debemos manejar esto con cuidado.

Twilight: (Asintiendo lentamente) Entiendo. No quiero que nadie salga lastimado por esto. Solo quiero que podamos resolverlo de la mejor manera posible.

Pinkie, aliviada por la comprensión de Twilight, se acercó y la abrazó con ternura. Twilight correspondió al abrazo, sintiendo un consuelo reconfortante en la cercanía de Pinkie.

Pinkie Pie: (Susurrando) Prometamos que mantendremos esto en secreto y que enfrentaremos cualquier desafío juntas.

Twilight: (Sonriendo débilmente) Lo prometo. Haremos lo mejor que podamos.

Mientras ambas se abrazaban, un sentimiento de complicidad y apoyo mutuo se estableció entre ellas. La tensión de la confrontación se fue desvaneciendo, y aunque los problemas no estaban completamente resueltos, Twilight y Pinkie sabían que podían contar la una con la otra.

De repente, la puerta del gimnasio se abrió nuevamente y Rainbow Dash apareció, mirando a Pinkie y Twilight con una mezcla de curiosidad y preocupación.

Rainbow Dash: (Con una sonrisa ligera) ¿Todo está bien por aquí?

Pinkie Pie: (Asintiendo) Sí, Rainbow. Gracias por intervenir. Realmente lo necesitamos.

Rainbow Dash: (Sonriendo) No hay de qué. Sabía que las cosas se estaban poniendo difíciles. Si necesitan algo más, ya saben dónde encontrarme.

Con un último saludo, Rainbow Dash se alejó, dejando a Pinkie y Twilight en su rincón tranquilo del gimnasio, preparadas para enfrentar los desafíos que se avecinaban, sabiendo que, a pesar de las dificultades, se tenían la una a la otra

Twilight y Pinkie se miraron a lo ojos viendo a esos ojos hermosos sin duda estaban enamoradas



UHHHH 971 Palabras uhhhhh que feo mi mano me duele nah mentira

que les Parecio jeje bueno nos e que mas decir osea es bien x Pero bueno es mi cosa x

ADIOS

𝔘𝔫𝔞 ℌ𝔦𝔰𝔱𝔬𝔯𝔦𝔞 𝔅𝔞𝔰𝔱𝔞𝔫𝔱𝔢 𝔐𝔞𝔤𝔦𝔠𝔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora