🥂Capítulo 9🥂

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La tensión en la oficina podía cortarse casi casi con un cuchillo. Sentados en la pequeña sala blanca se encontraban Jungkook, Jimin y Fransesca. Los tres comían comida tailandesa en silencio, tanto silencio provocó que la medusa de ojos púrpura se aburriera así que decidió ponerle más sazón al momento.

—¿Van a asistir a la cena con Adib?

—La respuesta es obvia. —Fransesca rodó los ojos al contestar.

—No puedo ser descortés con él, me ha dejado piedras a un precio inigualable. ¿Tú irás? —preguntó Jungkook.

—No.

—¿A qué se debe? Creí que estabas agradecido de que te haya invitado —dijo Fransesca.

—El tipo no tiene intenciones de hacer negocios conmigo y yo no me vinculo con hombres a no ser que hablemos de dinero. —Encorvó los hombros.

—¿Seguro? —preguntó Jungkook y Jimin esbozó una sonrisa pícara.

—Cien por ciento —dijo mirándolo a los ojos.

—Me retiro, creo que aquí estoy sobrando. —Fransesca se puso de pie al sentirse ofendida ante el "¿Seguro?" De Jungkook.

Jungkook se paró al mismo tiempo que ella, ilusionándola porque creyó que iba a detenerla. Sin embargo la acompañó a la salida cerrando la puerta con seguro. Jimin seguía comiendo divirtiéndose con la situación, pero se detuvo cuando Jungkook lo tomó de la mano jalándolo para que se pusiera de pie. Él lo tomó con una mano por la cintura y con la otra acarició sutilmente su cuello.

—¿Entonces solo te vinculas con los hombres para hacer negocios? —dijo a su oído.

—Así es...

—¿Y anoche qué hicimos? ¿Puedes recordarme?

—Como dije antes; lo qué pasa en las sábanas se queda en las sábanas.

Jungkook no se resistió y besó los labios de Jimin, él respondió de una manera voraz. Luego el más alto enpujó al más bajito contra la pared de la oficina, pero cuando sintió que las manos del pulpo Jeon se estaban queriendo pasar de la raya lo empujó apartándose de él.

—Estamos en tu oficina Jungkook, no voy a coger contigo en el mismo lugar donde coges con tu asistente.

—¿Celoso de Fransesca? Creí que éramos libres y sin ataduras.

—Celosa jamás. Simplemente quiero que te quede algo bien claro; yo no soy tu puta. —Lo señaló con el dedo índice—. Y vamos a hacerlo cuando ambos estemos de acuerdo y de preferencia en un lugar pulcro.

—Comprendo. Ve al Jek"e esta noche, tengo una propuesta fuera de lo laboral para ti.

—¿Qué clase de propuesta?

—Ve y lo sabrás.

Jimin sonrió, pero no dijo nada. Él avanzó a la sala blanca sentándose nuevamente para terminarse la comida, mientras que el señor Jeon lo veía devorándoselo con la mirada. La noche anterior lo dejó hipnotizado y le encantaba el hecho de que no fuera intenso con él. Se sentía libre de seguir con su vida disfrutando al máximo, pero lo que no sabía era que todo se trataba de un plan de manipulación para tenerlo comiendo de su mano.

La medusa de ojos púrpura nunca fallaba cuando soltaba el veneno a su víctima, él lograba electrizarlos, congelarlos, doblegarlos para que llegado el momento le suplicaran por su amor o por una pizca de piedad.

La medusa de ojos púrpura nunca fallaba cuando soltaba el veneno a su víctima, él lograba electrizarlos, congelarlos, doblegarlos para que llegado el momento le suplicaran por su amor o por una pizca de piedad

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Estafa a Jeon || Kookmin🔞||Finalizada✔️Where stories live. Discover now