Día 19: Caricias en el pelo

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Gakushuu se había dado cuenta de algo, Karma había tomado una nueva manía, por alguna razón a su novio le gusta acariciar su cabello en momentos aleatorios del día sin motivo alguno.

No recuerda cuando comenzó hacer eso solo recuerda haberse dado cuenta hace dos semanas mientras estudiaban en la casa del pelirrojo, Karma habia empezado acariciar su cabeza mientras revisaban unos temas de historia, se tentó en preguntarle a su novio que estaba haciendo de no ser porque le había ganado en una respuesta de matemáticas de su hora de estudio olvidando ese tema.

Así sin darse cuenta se había acostumbrado a que su novio acariciara sus cabellos, normalmente lo hacía cuando estaban solos en la comdidad de uno de sus hogares.

Tumbaria su cabeza en el regazo de Karma, el pelirrojo felizmente empezaría acariciar sus cabellos soltando algunas risas de vez en cuando.

El toque de Karma es preciso, sabe atacar los puntos débiles qué lo hacían relajar, como si asesinada el estrés que escondía mediante esas caricias tan íntimas.

Una sonrisa se formó en el rostro de Karma observando la figura tan relajada de su novio, Gakushuu se había quedado dormido soltando suaves ronquidos, se inclino besando su frente con sumo cariño.

Su novio merecía descansar después de horas estresantes de estudio sin parar, no recuerda como inicio las caricias en el cabello pero si recordaba que aquello lograba relajarlo hasta el punto de lograr dormirlo, tiene un arma metáforica muy poderosa en sus manos.

Y a él le encanta usar armas.

Gakushuu desperto después de unas horas, miro con duda su entorno notando qué había sido trasladado a la habitación de Karma.

Asano dejo pasar ese incidente para buscar a su novio, otro momento donde la nueva manía de Karma se presentó fue en una sesión de estudio, una sesión de estudio en la biblioteca con los virtuosos.

Gakushuu estaba repasando unos ejercicios de Ética (su materia menos preferida) cuando se empezó a sentir relajado por alguna razón....

El puso los ojos en blanco girando su mirada hacia su novio que estaba concentrado en su libro a diferencia de una de sus manos qué se encontraba acariciando su cabeza.

Los ojos violetas volvieron a girar viendo a los virtuosos, soltó un siseo en seña que no dijeran nada por su bien.

Seo puso los ojos en blanco, Koyama mantuvo silencio como Araki pero los dos tenían sonrisas burlonas por lo blando qué se había puesto.

Ren le sonrió con burla descarada sacando su teléfono para sacar una foto, soltó otro siseo y Karma frunció el ceño dándole más caricias en el cabello, Sakakibara logro tomarle la foto que terminaría yendo al álbum del anuario de ese año.

"Sucede algo?" El pelirrojo pregunto levantando su mirada sin dejar de acariciar la cabeza de su novio rofonfuñante.

"No, para nada" Ren le respondió guardado la foto.

"Tienes suerte de ser mi mejor amigo" Gakushuu le murmuró sin quejarse de la muestra de afecto de su pareja que parecía ajena a la situación o muy bien lo sabia y solo quería burlarse de él.

Cualquiera de las dos respuesta es válida si estas hablando de Akabane Karma.

Esa mani se quedo y el tiempo lo dijo, incluso ahora con un año de casados Karma seguia haciendo eso pero en menor medida.

Las caricias en el cabello de su esposo son parte esencial de su día a día, si Karma tenía que salir temprano primero pasaría detrás suyos dándole unas suaves caricias en el cabello mientras él terminaba el desayuno.

Si él salia primero Karma lo detendria en la puerta dándole rápidamente sus características caricias junto a un beso en la mejilla deseándole un buen día.

Las caricias también estaban presentes antes que se fueran a dormir, mientras el se recostaba en la cama las manos de Karma estarían dándoles suaves caricias en su cabello para que pudiera dormir de manera más rápida y pudiera afrontar mejor su vida como jefe de su propia empresa.

En las pocas ocasiones en las que se podían dar el lujo de bañarse juntos, Karma insistía en lavarle el cabello sin aceptar un no por respuesta, cuando termina cediendo su esposo enjuagaba sus cabellos de una manera tan suave que lo podía hacer caer dormido de no ser por la regadera de agua fría qué le echaba a la espalda.

Es un precio que acepto pagar cuando Karma le puso el anillo en su dedo anular y el le puso el suyo, ama a su esposo como aquellos detalles peculiares que lo hacían bailar de felicidad.

Es un precio que acepto pagar cuando Karma le puso el anillo en su dedo anular y el le puso el suyo, ama a su esposo como aquellos detalles peculiares que lo hacían bailar de felicidad

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Gakushuu estabalizaba su respiración mientras tenía su cabeza en el hombro de su esposo, había colapsado encima de él.

Su cuerpo se sentía tan cansado, un gemido bajo escapó de sus labios cuando las manos de sus esposo empezaron acariciar su espalda mientras le daba un suave beso en el hombro.

Las manos de Karma empezaron a subir hasta llegar a la parte que quería, tarareo al sentir como el cuerpo de su marido empezaba a relajarse.

Gakushuu cerró sus ojos cuando empezó a sentir la familiar sensación de caricias suaves en su cabello, incluso con el pasar de los años Karma no había perdido su toque que lo hacía ver estrells y lo mandaba a dormir en una nube de algodón.

"Lo hiciste muy bien Shuu, comí siempre lo haces" Karma le susurro besando su cabeza para seguir con sus suaves caricias que relajaban a su esposo.

"Tú también lo hiciste bien, me gusta que me acaricies el cabello" Gakushuu murmuró cansado, debe ser el efecto post sexo apoderadose de él.

"Me haces sentir muy bien" El siguió murmurando acomodando su cabeza en su hombro.

"Muy bien, demasiado bien, te amo" El rubio fresa murmuró antes de cerrar sus ojos dejándose abrazar por el calor corporal de su marido.

"Gracias, también te amo" Karma le devolvió el susurro besando con cariño su mejilla.

Los ojos violetas se habían cerrado completamente, siguió acariciando su cabello hasta que su esposo cayó dormido en su hombro soltado ligeros ronquidos.

Karma tarareo suavemente mientras lo acomodaba para limpiarlo y poder dormir a su lado, cerró sus ojos para unirse a él en el mundo de los sueños.

Karma tarareo suavemente mientras lo acomodaba para limpiarlo y poder dormir a su lado, cerró sus ojos para unirse a él en el mundo de los sueños

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Flufftober (Karushuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora