SOL Y LUNA

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Danzamos sobre las llamas de lo prohibido,
sin temer al qué dirán o qué pasará.
Y terminamos en un hoyo del cual jamás saldremos.
Ahora somos prisioneros de nuestros recuerdos,
malditos por amar sin siquiera saber cómo hacerlo,
malditos porque la luna no desea ver felicidad.

El sol siempre tratará de matarla,
pero la luna aún puede con esto:
contar las estrellas y llevarte junto a ellas,
mientras yo me uniré al sol,
para ser aquel resplandor
que ilumine tus noches estrelladas.

SOMBRAS ETERNASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora