Una Potter en Slytherin y hablante de parsel, fue maravilloso, pero solo para algunos...
¡Eres una deshonra para la familia! ¡No mereces el título de heredera! ¿¡Y ahora te juntas con esos...!? ¡YO FLEAMONT POTTER, LORD DE LA CASA POTTER, TE REPUDIO...
Mis queridos lectores, es raro que yo ponga advertencias en los caps, pero les voy a confesar que lloré mientras escribía la última parte de este ¡Carajo estoy hormonal!
Advertencia: conversación sobre el suicidio.
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Nueva escena.
Mientras caminaban la noche anterior, Aslan ya le había dado algo que meditar "Deberás aprender a manejar esas espadas, por esto dejaré que elijas a tu maestro" había comentado el León, por lo que desde la mañana Polaris observo a cada Narniano, desde el que hacía pan hasta a los que protegían el lugar.
Aslan.- Ya has decidido.- más que una pregunta, fue una afirmación. El León observaba con curiosidad cómo la pelirroja miraba a un Narniano en particular.
Polaris.- ¿Por qué entrena solo? He notado lo reacios que se ven los demás a su lado...-
Aslan.- Dime, cuando lo ves, qué notas de diferente?.- Polaris desvía la mirada hacia el Minotauro, que practica con una espada a un costado del campamento.
Tavros.- ¡AHHH! ¡Es mi Abuelo! ¡Es mi Abuelo!- sus fuertes aplausos y gritos casi rompen los tímpanos a más de uno.- Oh mi Señor, Reepicheep, vean.- chilla.
Caspian.- Lo vemos Tavros, lo vemos.- ríe, aunque el también estaba emocionadísimo por lo que verían.
¿Su Abuelo?*.- los magos y brujas observaron la escena con mayor interés.
Polaris.- Es el único Minotauro que he visto. Todas las criaturas que he conocido van en pares o grupos, pero él... él es el único de su especie aquí en el campamento.- noto.
Aslan.- Es porque la mayoría de su raza ha decidido pelear junto a Jadis. Han sido seducidos por su promesa de poder y dominación, aun que otros también están capturados bajo su mano.- suspira profundamente, en lo que su melena dorada se mueve con el viento.
Polaris.- Entonces he encontrado a mi próximo maestro.-confirmó después de un breve silencio. Decisión que le sacó un risa ronca al animal, risa llena de aprobación.
Aslan.- Tus decisiones siempre me asombran, y a veces me toman desprevenido.- con su hocico dejo una caricia en la mejilla de la adolescente.
Polaris.- ¿Eso es malo?.- sonrió de manera traviesa.
Aslan.- Todo lo contrario, Pequeña serpiente. Tu espíritu indomable es lo que te hace especial.- la empuja levemente de manera divertida, antes de dar un paso al frente, y con sus garras marcando la tierra, ruge con autoridad.
