One Shots Feederims ( VOL. 2)

Mai Mai ( 2022 )

Mai Mai estaba más que cansado no lo podía creer, llamaba más de media hora intentando entrar en sus pantalones, los malditos nisiquera pasaban sus muslos

- Esto es imposible~ me quedaban ~ hace una semana~ - exclamó entre jadeos, cansado se dejó caer en la cama, miro hacia abajo divisando su enorme panza, la acarició suavemente, siempre había querido ser enorme, pero no imaginó que le costaría tanto trabajo, con dificultad intento sentarse en la orilla de la cama, solamente para aventar los jeans y ver qué se podía poner, fue entonces que pensó en su única prenda restante, PERO NO QUERÍA PONERSE ESA, sería muy vergonzoso salir a comer en ella, quizá solamente debía pedir algo a casa, como siempre lo hacía, sin embargo, tenía ganas de salir, quería sentir el sol chocando junto a su piel, por lo que suspiró y con nerviosismo se acercó al clóset, busco y busco y por fin encontró lo que buscaba, unos shorts, trató de ponérselos y como pensó, estos habían logrado subir hasta la cintura, se sintió algo nervioso, esos shorts le solían quedar algo huangos, pero ahora le estaban ajustando, decidió ignorar aquel detalle y trató de cerrar el short, y con un poco de trabajo lo logró, se puso la camiseta más grande que tenía, siendo está una gris, su gorrito gris, para que combinara y una chamarra, nervioso se miró al espejo, se sorprendió al verse tierno, los shorts remarcaban sus hermosas y grandes piernas, su trasero se veía más grande de lo que de verdad era, su panza también se veía bien en aquella camiseta, mínimo la cubría del todo, y aún así se veía gordo, era la ropa perfecta, feliz salió de la casa buscando un lugar cercano a dónde ir, en el camino iba caminando lo más sensual que podía, se sentía sexy y no iba a pasar esa oportunidad, grande fue su sorpresa cuando le dieron una fuerte nalgada que hizo retumbar todo su trasero derecho, avergonzado volteó viendo a unos chavos que se alejaban mientras reían y le gritaban cosas como que lo llevarían a su cama o que ojalá y los aplastada, se sintió infinitamente avergonzado, no sabía cómo reaccionar, después de todo no esperaba que enserio le hicieran algo, miro un poco su trasero, le dió una suave nalgada e igual que antes, se movió como gelatina, dió una risita suave y siguió caminando, la había gustado a esos tipos, ¿A quien más podría hacérsele rico?.

Jajajajaja este fue un capítulo de hace muchos años que escribí pero jamás publique, y como no los quiero aburrir, acá traigo este breve y corto capítulo, rememorando mis inicios como escritor, ¿creen que mi escritura a mejorado? Por que yo siento que sí, hasta en la cantidad de palabras que uso. Jajajajaja como pasa el tiempo