[I hope your life is ruined before you ruin someone's life. Just like you ruined mine.] - [Espero que tu vida esté arruinada antes de que arruines la vida de alguien. Al igual que tú arruinaste la mía.]
Pedri.
Me sentía algo frustrado por el partido de hoy, el hecho de que me hayan cambiado por él y encima haya tenido la suerte de meter gol y dar una asistencia me ponía enfermo. Terminé de guardar todo en la taquilla de los vestuarios y fui directo a la puerta, donde me estaba esperando Ferran con los brazos cruzados.
– Entonces qué, ¿vas a ir a la cena de hoy o no? Porque como primero dices una cosa y luego otra, me tienes como un pato mareado hermano.
– Sí, sí voy a ir, no te preocupes. ¿Ya el capi dijo donde íbamos a cenar? – comenté mientras encendía mi teléfono para comentarle a mi hermano que iba a llegar algo tarde a casa. – Menos mal que no va, tampoco pintaría mucho ahí.
– Bueno, de hecho, el capi organizó esta cena por el hecho de que debutó, metió gol y dió una asistencia. – escuché la voz de João detrás nuestro y yo rodé los ojos. – Pedri tío, admite que lo que hizo en el partido fue una absoluta locura. Más bien, deberías mirar por el bien del club, necesitábamos muchísimo un fichaje como él.
No quise añadir nada más a la conversación así que nos dirigimos en silencio hasta los aparcamientos, mientras me acercaba a mi auto, pude ver como se despedía de Lewandowski y luego iba directo hasta sus padres, que se encontraban esperándolo con los brazos abiertos. Una sonrisa amplia se formaba en su rostro mientras su madre le daba varios besos en la mejilla, desvié mi mirada y suspiré entrando al coche. Cerré los ojos por unos segundos mientras dejaba caer todo mi cuerpo en el asiento, ha sido un día largo y algo duro, solamente esperaba y deseaba que la cena fuera tranquila y sin que lo nombraran.
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Sergi había reservado mesa en uno de los restaurantes más escondidos de Barcelona, podríamos estar tranquilos sin necesidad de que un aficionado nos moleste. No nos molestaba para nada los aficionados, pero a veces no puedes hacer vida normal debido a que siempre te graban, hagas lo que hagas al ojo público será grabado, subido a las redes sociales y comentado por un montón de gente que ni conoces ni te conoces, así es la vida de un futbolista, bueno mejor dicho, de cualquier famoso. Nunca había estado en ese restaurante, la verdad es que no solía salir mucho de mi casa, yo soy más de quedarme en mi hogar y disfrutar de la comida casera que me preparaba mi hermano y a veces mi madre. Pero a veces siempre viene bien salir un rato de tu zona de confort.
Saludé a un señor que vigilaba la entrada al parking de aquel lugar y luego intenté buscar un sitio, por lo visto ya había gente del equipo aquí, reconocía tanto el coche de Marc como el de Rapha. Encontré un sitio cerca de la puerta así que ahí fue donde dejé mi famoso mini cooper verde, en vez de salir ya, decidí quedarme unos minutos más dentro del coche. Encendí mi teléfono y busqué la aplicación de Twitter, sé que la mayoría de veces los profesionales que nos tratan en el club nos dicen que no deberíamos entrar tanto a las redes sociales, porque eso aunque no lo pensemos, afecta demasiado a nuestra salud mental. Pero aún así es como esa curiosidad que te entra por dentro queriendo saber que opinan de ti, que comentan del club. La mayoría de comentarios que he leído siempre han sido buenos, aunque ahora que el nuevo fichaje se incorporó al equipo se dicen diferentes opiniones respecto a mi persona, y eso es algo que me arde en el interior. Le di a la 'lupa' y escribí mi nombre para comenzar a leer los nuevos comentarios.
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