Capítulo 1.

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Tras varios minutos intentandolo, consigo abrir los ojos. El frío baña mi cuerpo y hace que tiemble dando ligeros espasmos. Me duelen los brazos, las piernas y ante todo la espalda, cuando trato de incorporarme me descubro a mi misma tendida en una especie de "cama" a base de piedras. Consigo quedar sentanda pero mi cabeza me juega una mala pasada y me mareo, me apoyo sobre las rocas y mis manos se resbalan haciendo que pierda el poco equilibrio que poseo. La sustancia que las cubre es pegajosa, de un intenso color  rojo y con un cierto aroma metálico. Sangre. Me asusto y miro a mi alrededor viendome rodeada de una espesa manta de árboles. ¿Donde estoy? ¿Como he llegado hasta aquí?. Varias preguntas nadan por mi mente donde un espacio en blanco las recibe. Me levanto tratando de no resbalarme de nuevo y cuando quiero ser consciente de lo que estoy haciendo, me veo a mi misma corriendo por un bosque que desconozco.


Tras varios minutos corriendo donde el aliento empieza a fallarme, salgo precipitada hacia una carretera comarcal, me tropiezo y caigo de rodillas sobre el asfalto. Aquello hace que mire de nuevo mis manos, en ella no hay ni una sola uña sana, todas están rotas. Me levanto aún más desorientada y veo que el jersey que llevo, junto con la falda están desgarrados, me levanto las mangas para ver como en mis brazos los arañazos surcan la piel blanquecina. ¿Que demonios me a pasado? pienso de nuevo. Me toco la frente y junto al inicio del pelo palpo una brecha donde la sangre está reseca. Comienzo a andar dando tumbos, no llevo zapatos por lo que andar es más complicado y más cuando todo está lleno de piedras, el cielo es grisaceo y la amenaza de lluvia es constante. Aprieto el paso y de repente escucho como un coche se acerca por detrás. Me giro y de éste baja un policía joven, me mira y enarca una ceja al ver mi aspecto. Se aproxima de forma cautelosa y estira un brazo, de forma instintiva doy un paso hacia atrás.


-¿Que te a pasado?.-Murmura al verme llena de sangre y al ver como mis rodillas a causa del asfalto sangran.

-No lo sé.-Es lo único que soy capaz de articular. Me mira y sonríe de forma apacible.

-Esta bien... ¿Como te llamas cielo?.-La garganta me escuece y mi voz es demasiado irregular cuando pronuncio lo mismo.

-No... no lo sé.-El agente me mira con cara de preocupación y tras varias palabras alentadoras hace que me suba con él en el coche policial, me sienta en el asiento trasero y tapa con una manta.

-Todo va a estar bien cielo.-Vuelve a murmurar, pero yo sé que nada está bien. El camino es largo, demasiado. No sé en que zona estoy, ni donde voy, ni de donde vengo pero cuando pasa el tiempo veo como nuestro viaje finaliza en un hospital. El hombre me saca del asiento y me hace pasar dentro mientras me agarra de los hombros de forma protectora. Al entrar el calor que emana el edificio hace que mis huesos vuelvan a la vida. Respiro de forma lenta y entonces veo como un hombre vestido con un mono verde se dirije hacia a mi de forma sutil sosteniendo un telefono movil. Me pongo rigida y entonces el policia al darse cuenta, me oculta tras su cuerpo.-Suelte eso ahora mismo y entreguemelo.

-¡Es ella! ¡Es la chica!.-Las voces del hombre hacen que el aire se me quede atascado en el pecho y sea incapaz de respirar, me ahogo y una enfermera se da cuenta. Entonces, mientrs el policia se queda con aquel hombre y su telefono, la chica me saca de la sala para internarme en otra. Hay una cama y junto a ella una silla, o eso creo ver justo antes de perder el conocimiento.

Cuando me despierto lo hago con una enfermera diferente a mi lado. Sostiene una gasa y al parecer está curandome las heridas de la rodilla izquierda.

-¿Que me a pasado?.-Consigo articular.

-Has sufrido un desmayo y un ataque de ansiedad.-Responde de forma seca.-¿Recuerdas algo de lo que te a sucedido?.-Me limito a negar mientras trago saliva de forma brusca.-Entiendo...-Deja colgando la palabra hasta que retoma la conversación.-....tengo que hacerte una revisión por si has sufrido algún tipo de abuso.-La forma en la que lo suelta hace que mi estomago se descomponga. Vuelvo a asentir y entonces veo como sale de la habitación, para volver a entrar al rato con un carrito donde tiene varios artilugios.-Desnudate querida.-Dice sin más, y entiendo que solo refiere de cintura para abajo. Aquello es tan desagradable y tan violento, que cuando me quedo sola en la cama rompo a llorar. Lloro tanto y tan fuerte que me hago daño en las cuerdas vocales. Me tumbo mirando hacia arriba y mis ojos se pasean por la habitación donde descubro toda una pared de espejo en la que no había reparado antes. Me levanto con dificultad y camino hasta ella, me miro en el espejo y una chica que ni si quiera reconozco me devuelve la mirada.

Be as famous V || [Katherine McNamara + Dominic Sherwood]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora