𝙊𝙗𝙨𝙚𝙨𝙨𝙞𝙤𝙣; Diego Moguel

: ̗̀➛Cabello

15 de Noviembre 2019; Cancún

- ¿Cuándo van a ser amigos por fin?.- Mar miraba fijamente a Diego y Nata mientras peleaban.

- El día que el COVID llegue a México, tal vez.- retroalimentó Anastasia.

- Te aseguro que ni así.

10 minutos antes todo era paz y tranquilidad en el salón, cosa que terminó cuando Diego tuvo la genial idea de cortar el cabello de Renata por simple diversión, tomó unas tijeras y le hizo un nudo a Nata que después cortó, la chica al escuchar tan de cerca el sonido de las tijeras se giró atrapando a Diego en plena maldad.

- ¡Me cortaste el cabello!.- Nata miraba el mechón de cabello castaño en la mano de Diego.

- Me estorbaba.

- Tú me estorbas y no te corto nada.

- Es cabello y ya, vuelve a crecer.

- ¿A sí? Órale va.

Nata sacó de su boca el chicle que estaba masticando y lo enredó en el cabello semi largo de Diego.

- Maldita sea Renacuajo.- Diego intentaba salvar su cabello pero no sirvió de mucho.

- Es cabello y ya.- Nata repitió las palabras dichas por el chico momentos antes.

- Te voy a dejar pelona.

Diego tomó otro mechón del cabello de la chica y volvió a cortarlo, Nata no se dejó y también tomó el cabello ajeno que cada vez se volvía más enredado en el dulce. Estuvieron forcejeando por segundos que les pareció horas hasta que dos profesores los separaron.

- ¡Suficiente! Los dos a la dirección. ¡Ahora!

- Te odio.- exclamaron ambos chicos al mismo tiempo.

- Del odio a la amistad solo hay un paso, sé paciente Mar.- Anastasia volvió a opinar mientras veía como su amiga era llevada a la dirección, otra vez.

Ambos chicos se sentaron en espera de la directora para explicar el altercado de esa semana.

- Es la quinta vez en el mes que los mandan aquí.- explicó la secretaria en voz media-alta.

- Déjame adivinar, Dávalos y Moguel otra vez.- respondió la directora a lo que la otra mujer asintió.- ¿Qué voy a hacer con ellos?

Hicieron pasar a los dos problemáticos y la directora los miró sin saber que hacer ahora, ya los habían castigado, reportado, suspendido, darles trabajos comunitarios, cambiado de salón, cambiado de turno e incluso mandado a llamar a sus padres y al parecer nada servía.

Cuando creía tener una semana perfecta ellos dos aparecían en su despacho, nadie, maestro o alumno sabía la razón del porque tanto odio en chicos de tan solo 15 años.

- ¿Quién empezó esta vez?

Nata señaló a Diego y Diego señaló a Nata, la misma rutina.

- ¿Cuándo será el día que se lleven bien?

- Cuando el infierno se congele.- respondió Nata

- Cuando Batman tenga padres.- respondió a su vez Diego.

- Castigados después de clases, Diego ve a la cafetería a buscar un hielo a ver si te pueden sacar eso del cabello.

La directora programó sus respectivos castigos y luego los dejó ir, al salir de la dirección Nata le puso el pie a Diego causando que se cayera directo de boca al piso.

- Ups.- exclamó la chica antes de intentar irse.

- ¡Renata Vanessa Dávalos Martínez!.- gritó la directora al ver su acción.- Vuelve aquí ahora

- Ay.

- Que bueno.- el chico río mientras lamía la sangre de su labio roto.

- Castigada el lunes también.- dicho eso dejó a la chica libre.

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Nata estaba con sus dos mejores amigas, Marlene y Anastasia. Las tres son amigas desde la secundaria y nunca han tenido discusiones tan fuertes, la única vez que medio pelearon de gravedad fue cuando Mar comenzó a ser novia de Diego.

En ese momento las tres estaban viendo al mencionado en un partido de americano al que Nata fue obligada a ir.

- No entiendo como sales con ese pendejo.

- Es guapo y cuando lo conoces bien es un amor.- Mar miró a su novio con aires de enamorada.

- Es una patada en los ovarios, te lo aseguro.- Nata se sentó en las gradas.

- Pero si es guapo, si no fuera de Mar si me lo ligaba.- bromeó a medias Tasia.

Tasia y Mar siempre han sentido cierta atracción por Diego aunque Anastasia nunca lo expresó libremente, no como Mar que prácticamente lo gritaba cada que podía, la única que sabía de los sentimientos de Tasia a Diego era Renata.

- Gracias a él me tuve que cortar el cabello.

- ¿Por qué se odian tanto? Es difícil que mi mejor amiga odie a mi novio y viceversa.

- Mar tiene razón, nunca nos has dicho por que se quieren matar mutuamente.

Nata se quedó en silencio pues no siempre se han odiado si no todo lo contrario, sus familias son muy unidas y ellos también lo son, o lo eran hasta que comenzaron la secundaria.

- Eso no es relevante.

- Al menos intenten no pelear en mi presencia.

Renata se encogió de hombros, eso era algo que siempre le molestó de su amiga ya que aún sabiendo que ninguno de los dos se toleraban no le importó y siguió con su capricho de estar con él.

El partido terminó y Diego fue con su novia pero no pudo evitar hacer un comentario al nuevo look de Renata.

- Pareces Dora.

- Tú pareces pendejo, ¿Qué te pasó en el labio?

- Jodete. 

- Uh ya se enojó, pónganle una falda a la niña.

- Vanessa.- Mar intervino

- Al diablo.

Nata tomó el suero que le había traído a Diego y se lo aventó al pecho, Mar la miró llena de celos, Tasia sorprendida y Diego enarcó una ceja.

- Ni me veas así, te lo manda Mateo.- le echó la culpa a su hermano.

No les dio el tiempo de reaccionar y simplemente se fue a su casa de nuevo, estar cerca de Diego por un minuto más le iba a hacer daño y pensar que cada fin de semana tenía que verlo por al menos 5 horas ya que sus familias se reúnen desde que tiene uso de razón.

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