El me observa...
Siempre lo hace, llegue a este pueblo en busca de inspiración y tranquilidad.
Sus ojos estan en todas partes, hasta cuando estoy por dormirme siento esa presencia extraña.
Tampoco le puedo ver el rostro ya que usa capucha todo el ti...
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20 de septiembre 10 am.
Lili:
El sonido de la alarma me despertó del sueño que estaba teniendo, en él había un hombre, no podía verle la cara ya que traía una capucha, sentía sus caricias en mi rostro pero lo más raro es que aun siento sus dedos en mi piel y su aroma a menta.
Sentía ese aroma impregnado por toda la habitación, mis sueños con esa persona comenzaron desde el momento en el que me mude acá.
Dejé de lado esos pensamientos y me levante de la cama para comenzar el día, tenía muchas cosas para desempacar aun y Sam mi mejor amiga va a venir en dos horas a ayudarme así que mejor me apuro.
Fui al baño a cepillarme los dientes, mire mi reflejo en el espejo, tenía las ojeras un poco marcadas por desvelarme escribiendo a la noche, tengo un bloqueo de escritor y no sé qué escribir, todavía ni comencé. Vine a este pueblo con mi mejor amiga, necesitaba mas inspiración y salir de mi zona de confort, mi padre al principio no estuvo de acuerdo ya que le resultaba complicado el que su única hija mujer se fuera de casa, ahora vive solo con mi hermano Gabriel.
Con la única condición que mi padre pudo quedarse tranquilo de que me fuera fue que debería llamarlo todos los días para decirle como estoy, me parece muy exagerado de su parte pero por una parte lo entendía, desde la muerte de mamá se volvió más protector conmigo y mi hermano.
Esa es una de las razones por las que me mude acá, esa casa me trae tantos recuerdos que no podía seguir ahí.
Me desate el pelo para meterme a bañar, abrí el grifo del agua fría ya que estos días estaba haciendo demasiado calor. Al terminar de bañarme fui a la habitación para cambiarme, opte por una remera grande y un short. Mientras me vestía sentía una sensación extraña, como si me estuvieran observando, al mirar hacia la ventana que estaba en frente de mi casa, la ventana de la casa de en frente estaba medio abierta, por un momento creí ver una sombra pero al instante desapareció.
Varias veces pensé que nadie vivía ahí hasta fui a tocar la puerta para presentarme, espere varios minutos y nadie abrió, fui dos veces y pasó lo mismo pero anoche una de las luces estaba encendida, me preguntaba si simplemente era algún señor viejo el cual no le gustaba interactuar con sus vecinos.
Cerré la ventana que al parecer se me olvidó cerrarla anoche, baje las escaleras para ordenar algunas cosas mientras esperaba a Sam.
Estuve dos horas limpiando la cocina y me detuve al escuchar el timbre.
<<Seguro Sam ya llegó>>.
Al abrir la puerta me encontré con una carta, pensé que sería de mi padre aunque es raro ya que siempre hablamos por teléfono.
Cerré la puerta y me fui directo a la sala para acomodarme en el sillón. Abrí la carta y al comenzar a leerlo me comenzó a temblar la mano.
<<Tus ojos me atormentan todas las noches, hasta en mis sueños, no hay día, horario ni momento el cual no piense en vos, el aroma a cerezas que desprende tu cuerpo y las pecas salpicando tu rostro como si fueran pequeñas estrellas, la inocencia que desprendes hace que algo oscuro crezca dentro mío, algo que no es sano, quiero protegerte, que solo seas mía.
