092 - Vacaciones

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─Despierta a Ni-Ki para comer ─le dice su madre a Kia que había salido a tomar agua, ella asiente y sube nuevamente. Cuando entra a la habitación observa con una sonrisa a Ni-Ki dormir profundamente. Va y ordena su escritorio y guarda los cuadernos del mencionado junto al ensayo ya terminado en su mochila, y finalmente va y se acerca para despertarlo.

─Oye dormilón, ¿no vas a querer cenar? Ya es tarde y mi madre ya nos llamó para que vayamos ─acaricia su cabello delicadamente─. Ya dormiste suficiente ─lo último que quería era perturbar su sueño, pero no podía dejarlo ahí, también debía comer.

─Cinco minutos más ─responde éste aun con sus ojos cerrados.

─Lo siento, pero debes cenar; puedes seguir durmiendo cuando vayas a casa.

─Duerme conmigo ─la hala haciéndola quedar acostada junto a él y la abraza fuerte.

─No podemos quedarnos a dormir, estas loco ─se ríe Kia.

─Quedémonos así solo cinco minutos, solo necesito eso para recobrar energías ─responde él.

─Esta bien, pero no te tardes, mi mamá se enoja si no bajo de inmediato, no quiero obligarla a venir por nosotros ─Ni-Ki asiente y besa la frente de la chica, Kia también lo abraza apoyando su cabeza en su pecho─. ¿Ya te recargaste?

─No ha pasado más de 2 minutos ─hace puchero él menor.

─¿Me obligaras a hacerte cosquillas? ─él niega.

─No quiero ¡ya estoy despierto, ya desperté! ─Kia sonríe y mueve sus dedos amenazando con hacerle cosquillas, Ni-Ki la toma de la muñeca para evitar que lo haga─. No me gustan las cosquillas.

─Entonces quieres un beso ─se acerca a su rostro─. Acércate, no seas tímido; ay suéltame la mano.

─Me asustas ─se aparta de ella.

─Solo quiero darte un beso, te acercas o te muerdo.

─Estas loca, ya dejame ─ríe él.

─Ya levántate.

─Pero quiero abrazarte un poco más ─frunce su labio inferior y hace ojitos de cachorro para convencerla.

─Te lo buscaste ─se incorpora y con su mano libre le hace cosquillas en la barriga.

─¡Ya, para! Dije que me levantaría ─le pide.

─¿Vas a soltarme? ─él asiente.

─Si prometes que nada de cosquillas.

─Okay ─ella asiente.

─Quiero ver tus mano ─la señala, Kia alza su mano libre y luego él la suelta─. Tu otra mano, quiero ver ambas ─ella le muestra ambas manos y éste abrovecha para hacerle cosquillas también.

─¡Eres un tramposo! ─intenta safarse de las cosquillas.

─Chicos la comida esta lista ─la madre de Kia entra a la habitación, lo que hace que Ni-Ki se apresure a incorporarse provocando que choque su frente con la de Kia con mucha fuerza.

─¡Ahg! ─Kia cae de la cama.

─¡Ay Dios, Kia! ─la señora va rápidamente a recogerla del suelo.

─¿Estás bien? ─pregunta Ni-Ki.

─Tú que crees... ─ambos se soban la frente─. Eres peor que una roca al dormir... Ya bajemos a comer ─dice para disimular frente a su madre. Ni-Ki se ríe un poco y todos bajan.

─¿Qué te ríes? ─Kia lo empuja.

─Porque te dejaste caer así ─se ríe más fuerte.

─Por qué me dolía, tonto, ¿por qué te levastaste así de golpe? ─lo mira mal.

La Conquista | NI-KI | [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora