Odio

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Se sentía completamente en las nubes , casi podía sentir como su alma flotaba por fin libremente , sin la presión constante a la que se había acostumbrado después de la terrible traición . Esa gigantesca cicatriz que había permanecido por semanas en su corazón ya casi no existía , cada día en las que Hyunjin le susurraba palabras de amor , las infinidades de miradas cargadas de una veneración ilimitada , las suaves caricias que le daba e incluso las veces en las que le hacia el amor con una delicadeza que lo hacia sentir como lo mas valioso que puede existir en el mundo , cada una de las sensaciones y emociones que su esposo le brindaba hacían colmar su corazón de amor.

No había nada que se pudiera comparar a poder despertar envuelto entre esos brazos que se estaban encargando de hacerlo sentir nuevamente protegido y seguro , regalándole la oportunidad de nuevamente sentirse pleno. Un mes desde que se habían dado el sí , un mes desde que él casi había cometido el error mas grande del mundo cuando por unos segundos se le pasó por la cabeza abandonar todo en el altar por irse con alguien que no valía la pena. Si pudiera retroceder el tiempo daría el sí pero gritando a los cuatro vientos .

Hace dos semanas que se había dado la oportunidad de abrir de nuevo su corazón para que su esposo pudiera entrar en él , y sin dudas fue la mejor decisión que pudiera haber tomado.

Cuando abrió los ojos esta mañana lo primero que vio fue a Hyunjin observándolo fijamente con esa hermosa sonrisa que le derretía el alma , para luego besarlo suavemente . Era el ser mas irresistible que existía en la tierra , se había vuelto completamente adicto a cada parte que conformaba el hombre maravilloso que tenía en este momento adorándolo una vez mas.

- mmm...Hyunjin - estaba con sus manos firmemente sujeto a la poderosa espalda de su esposo , mientras él continuaba meciéndose en un tortuoso vaivén. Sus bocas se encontraban cada tanto , ayudando a amortiguar los gemidos que escapaban de ambos. Comenzaron a sentir como esa gran ola de placer se formaba en el centro de su ser y se expandía hacia todos los rincones de sus cuerpos - no pares , por favor sigue - el calor intenso acumulándose en sus vientres se sentía como una cuerda que se estira llevándola a su limite hasta que con un último gemido se rompe , dejándoles la increíble sensación de satisfacción . Aún con sus respiraciones agitadas se besaron una última vez antes de que Hyunjin se saliera con delicadeza de su interior para luego eliminar el preservativo .

- Feliz primer mes mi amor - lo besó en la frente para acurrucarse un momento a su lado - podríamos salir a celebrar esta noche ¿ Qué te parece?

- Me parece perfecto - levanta una mano para acariciarle el rostro - apenas termine todo en la oficina me vengo a preparar .

- Bien . Mueve tu hermoso trasero a la ducha , después iré yo o no terminaremos nunca - una sonrisa seductora se formó en su rostro.

- Eres un pervertido Hyunjin - se levantó envuelto en una de las sabanas - por cierto la semana que sigue tengo mi cita con mi ginecóloga , para comenzar con los anticonceptivos.

- Por fin - dijo levantando los brazos al aire - me muero de ganas de sentirte sin nada - le recorrió el cuerpo con la mirada antes de mirarlo a los ojos - vete Lix , si no desapareces de mis vista en cinco segundo no me haré responsable si no llegamos a trabajar - a penas terminó de hablar Felix entró al baño. Se dejó caer nuevamente de espaldas a la cama pensando en lo maravillosa que se sentían sus mañanas ahora que por fin eran un matrimonio de verdad. Aún Felix no le decía que lo amaba pero para él bastaba con que haya dejado en el pasado esa actitud frívola . Después de que los dos estuvieron listos y desayunados se fue cada quien a su trabajo , habiendo quedado de acuerdo nuevamente en la cita para celebrar su primer mes de matrimonio.

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