bufe frustrado y me agarre la cabeza. —amigo, ¿podes dejar de repetir eso? es la única frase que me dijiste en los treinta minutos de lo que llevamos hablando.
Nicolas alzó los brazos inocente. —¡pero amigo! posta que es un embole, ¿qué querés que haga?— me miró alzando las cejas, y cerré brevemente los ojos contando hasta diez en mi mente.
sí, era todo un embole.
—ayer quedé como un pelotudo en el churrito por su culpa. los rumores van a seguir, y Bianca nunca me va a tomar en serio.— me quejé.
—es que, amigo. tampoco es que vos le das las señales más claras.— dijo acomodándose en su asiento. estacionados en una estación de servicio habíamos hecho las compras para el bajón de la noche, y hablábamos de mi desastre amoroso. —son mujeres, quieren que le hables con la posta y sin dar mil vueltas. y eso es justamente lo que estás haciendo.
—es que- simplemente no sé que hacer y que no cuando la tengo enfrente, me pongo como un estúpido.— confieso.
no sabía porqué, pero estaba absurdamente obsesionado con Bianca. llevaba toda mi vida odiándola y sintiendo que nunca nos llevaríamos bien, en realidad, ella sigue odiándome. era yo el que en el viaje a Las Vegas había comenzado a desarrollar un sentimiento confuso, que persistía de forma intensa en mi cabeza e intentaba evitar a toda costa, pero simplemente no podía. cada vez que la veía, algo en mi interior se removía. no era el odio habitual que había sentido por años, ni la molestia que me provocaba verla e intentar bancarme su presencia. era algo más inquietante.
me molestaba cómo su sonrisa me desarmaba por completo, cómo su risa, que siempre había encontrado infumable, ahora resonaba en mi mente incluso cuando no estaba cerca. era casi como si mis pensamientos giraran en torno a ella de manera involuntaria. desde ese primer encuentro en otro país donde la encaré con las manos temblando, hasta el momento donde mandé todo al carajo y casi nos besamos dos noches atrás. trataba de convencerme de que todo era una ilusión pasajera, que fue producto del alcohol en mis venas o de la cercanía forzada gracias a nuestros amigos, pero cuando la veía, cuando nuestras miradas se cruzaban por breves segundos para que luego ella la apartara rápidamente, no podía negar la verdad. estaba empezando a sentir algo más por Bianca.
algo que me asustaba admitir incluso a mí mismo.
—dejame darte un consejo, amigo.— comenzó a hablar el vegano. —primero, tenés que resolver el conflicto interno que tenés con vos mismo. no da que lastimes a Bian por no saber qué es lo que querés con ella. es muy sentimental y vos muy prepotente, lo sabes.— recordó y asentí. —¿te acordás cuando aún seguía llorando por uno de tus compañeros que fue su novio por dos semanas?— preguntó y solté una risita. la morocha se había enamorado perdidamente de un pibe de mi clase, donde la llenó de ilusiones durante ese tiempo. y lo único que queda por decir, es que el tiempo que pasó de luto por su relación, fue más largo que lo que realmente duró su relación. —segundo, Marti te va a matar si le haces algo. después, lo hago yo.
alcé las manos demostrando inocencia y alzó las cejas amenazante. nadie dijo nada por un par de segundos, ambos sumidos en nuestros propios pensamientos, hasta que tuve que preguntar en voz baja.
—¿cómo sé cuando realmente me gusta?
—realmente no lo sabes pero, ¿qué sentís cuando estás con ella?— preguntó y solté un suspiro.
—todo. desde un cariño que no sé de dónde salió, hasta celos inexistentes.— admití con un poco de vergüenza. yo era el toro, el pibe que no creía en relaciones y no buscaba novia. y la vida me pegó la vuelta tirándome ideas de que me comenzaba a gustar mi mayor enemiga. —Bianca es una odiosa, es una cheta malcriada y sentimental, totalmente lo opuesto a mis gustos, pero nunca pude evitar ver lo linda que es, como cuando deja su cabello sin planchar y deja sus rulos libres. tiene el mismo humor de mierda que yo, en los programas nos reímos del mismo estúpido chiste.— reí brevemente.
» y lo peor — continué— es que cada vez que estamos cerca, mi cuerpo reacciona de maneras que no entiendo. es como si, a pesar de todo lo que nos dijimos, de todo lo que juré no sentir, mi corazón decidiera ignorarlo. odio cómo su risa resuena en mi cabeza, o cómo me fijo en detalles tan tontos, como la forma en que dice mi nombre completo o cómo sus ojos brillan cuando me putea.— suspiré. —me desespera, pero al mismo tiempo... no puedo dejar de pensar en ella.— finalicé y miré a Nico, quien estaba con una sonrisa en el rostro y negaba levemente. —estoy jodido, ¿verdad?
—estás hasta el palo, Giani.
tapé mi rostro rendido. —¿y qué mierda hago ahora?
☀
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gianiodoguardi 3m
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primero q todo ns porque la imagen de la story sale tan chica (?? dejenme arreglarlo
yo quedé ustedes quedaron todes quedamos QUÉ OPINAMOS DE LA PERSPECTIVA DE GIANFRANCO? 👀👀 se aceptan críticas constructivas y mensajes amenazadores ah
simplemente cheff kiss para mí, siento q narré bien la mente de un hombre boludo q sabe q le gusta una mina, no lo quiere aceptar y actúa como un pelotudo
no se olviden que tenemos un canal en whatsapp y son libres de unirse 🫶🫶 se van a enterar de spoilers, cosas randoms y stickers q pueden robarme de forma gratuita estoy planeando en hacer dinámicas!!! idea con total crédito a la pixelita de allangels <333 el link lo pueden encontrar en mi carrd de mi bio
