La marca falsa (Chuuya x Dazai)

Capítulo 13

Fyodor se despertó muy temprano por la mañana. El sonido de la ducha fue lo que despertó a Nikolai que se levantó a revisar a su pequeña hija Lena que dormía de manera tranquila en su cuna. Observó a su bebé y acaricio su mejilla con su dedo índice. Durante esos nueve meses había imaginado como sería y era igual de perfecta como la había imaginado, tenía sus mismos cabellos blancos y los hermosos ojos carmesí de Fyodor; era simplemente perfecta.

Su vida sería un sueño hecho realidad si la presencia de Osamu Dazai no estuviera ahí como un inconveniente constante en su matrimonio con Fyodor.

Sin querer (o tal vez de manera intencional) había escuchado toda la conversación entre Fyodor y Dazai. Fingió dormir para no alertar a su esposo, pero lo que escuchó le dejo un mal sabor de boca porque se dio cuenta que Fyodor no quería ni podía soltar a Dazai; aún lo amaba profundamente. Nikolai no entendía porque él se aferraba al castaño, era obvio que él ya no lo quería e incluso lo había cambiado.

Si alguien pusiera en un medidor los sentimientos que él y Dazai tenían por ese Alfa, él resultaría vencedor porque amaba a Fyodor sobre toda las cosas. Lo amo desde que le dijeron que se casaría con él y sería su alfa. Toda su vida se preparó para ser su esposo y aunque estaban ahora casados y con una hija, Fyodor ni siquiera lo consideraba una potencial pareja, seguía encasquillándolo en la etiqueta de "querido amigo".

Fyodor no tenía idea lo mucho que le dolía verlo alterado por ese omega bastardo. Tema aparte también estaba la cuestión sobre la paternidad del bebé de Dazai ¿Fyodor era realmente el padre de ese bebé o de verdad era ese pelirrojo que acompañaba a Dazai? ¿Si Fyodor estaba tan seguro debía ser por la marca y a que tuvieron sexo durante su celo? ¿Acaso Dazai lo había provocado para amarrarlo con un hijo? Aquellas preguntas lo carcomían y le dejaban una sola conclusión: Odiaba a Osamu Dazai. Odiaba que tuviera la marca y el amor de Fyodor y odiaba sentirse inferior a él.

Él era un omega dominante, lo mejor entre la casta de los omegas. Además era guapo, exitoso y rico ¿Por qué no podía tener al único alfa que realmente le interesaba y amaba?

Fyodor salió del baño y comenzó a cambiarse en silencio, como si fuera a salir a algún lado.

— ¿Vas a alguna parte Fedya?— preguntó Nikolai teniendo un mal presentimiento.

—Sí, voy a buscar a Dazai y tratar de recuperarlo pero antes debo ver a alguien primero—Le dijo de manera sobria mientras se arreglaba. —

Al escuchar sus palabras Nikolai supo que Fyodor no iba a dejar ir a Dazai sin importar que éste tuviera otro alfa. Aún así decidió intentar de detenerlo aunque sabía que era imposible porque una vez que Fyodor decidía hacer algo no había poder humano que lo hiciera detenerse.

—Fedya, lo viste ayer, él ya está con otro Alfa. Te dejo...— le señaló acercándose a él para intentar convencerlo.

Fyodor le dirigió una fría mirada y continuó vistiéndose.

—No me importa, Osamu es MI OMEGA. —Dijo acentuando la última palabra. — Yo lo marqué y mientras tenga mi marca nos pertenecemos. Él no podrá entrar en celo con otro alfa que no sea yo— explicó abotonándose su camisa.

—Además está esperando a mi hijo y no pienso renunciar a ninguno de los dos...—agregó haciendo que el corazón de Nikolai se estrujara dentro de su pecho.

— ¿Entonces es cierto? ¿De verdad espera a tu hijo?— repitió Nikolai sin creerlo, iba a decir algo más cuando Lena comenzó a llorar en su cuna. Fue a atenderla y la colocó entre sus brazos.

—Ya hermosa, no llores, aquí está papá...— le dijo a su bebé intentando calmarla.

Fyodor los miró a lo lejos y continuo con lo suyo, cuando terminó se aproximó a la puerta.