The Story of Us {George Russell}

Close To You

Habíamos llegado a Londres después de semana y media, George tenía que ir a Brackley  a entrenamientos y yo aún podía quedarme hasta el fin de semana.  Londres era un lugar que me gustaba, conocía a muchas personas de aquí, por ejemplo el gran Harry Styles.

Llegamos a su departamento y sonreí al mirarlo a fondo, era bastante bonito y cómodo. Se notaba la esencia de George en cada rincón, desde algunos de sus trofeos así como diferentes playeras de equipos.
— ¿Te gusta? — dice mientras deja nuestras maletas y asiento — me gusta que todo combine -dice y puedo verlo porque sus muebles son negros junto con casi todos sus accesorios con algunas cosas blancas pero sin perder lo clásico.
— Se nota que eres británico — digo y él ríe
— Y se nota que tú eres americana —
— No sé si intentas ofenderme así que te ignoraré
— ¿Quieres salir a comer? —
— Si, se me antoja como una pasta —
— Comiste pasta casi toda la semana—
— Es mi comida favorita — digo alzando mis hombros y él me sonríe — Bueno llévame a un lugar lindo
— Tengo el lugar perfecto — dice y toma las llaves de su auto y toma mi mano para bajar e irnos.

Llegamos a un restaurante bastante lujoso pero con un ambiente relajado afortunadamente venía venía arreglada. Nos acomodaron en un mesa algo apartada y le agradecí al mesero.
— ¿Vienes seguido? — digo al notar que los meseros lo saludaban y la atención fue rápida
— Algo así, la comida es deliciosa y es bastante privado - dice y jala la silla para que me siente y lo hago. Lo miro mover la silla que estaba en frente y acomodarse más cerca de mí y como si fuera una costumbre de años entrelazó nuestras manos y dejó un beso sobre la mía.
Debí haberme quedado atónita a tal muestra de cariño que su mirada se fijó en mí y soltó su mano
— ¿Qué haces? -susurro mirando nuestras manos que anteriormente estaban unidas
— Creí que te había incomodado — dice algo apenado y niego, ahora yo soy la apenada y entrelazó nuestras manos
— Jamás me incomodarías es solo que me tomaste por sorpresa y se me hizo algo tierno -susurro esto último un poco apenada, no quiero que piense que me acostumbro a lo mínimo, aunque así fuese el no tiene porque saberlo.
— ¿Quieres mi recomendación del menú? — dice cambiando de tema y lo agradezco tanto
— Pide por mi, veamos qué tan buen paladar tiene George Russell, sorpréndeme — sonríe y llama al mesero para pedir ambas órdenes y un poco de vino.
— Solo te digo que tengo un paladar fino, por algo me encantan tus besos - dice y mis mejillas se ponen color escarlata.
— Ya veremos Russell — digo y él comienza a contarme su rutina cada que está en Londres, mientras deja pequeños besos en el dorso de mi mano y es que su lenguaje de amor definitivamente era contacto físico y eso me encantaba

La comida llegó y cada cosa que George había pedido había sido deliciosa, sobre todo el postre
— Bueno admito que tienes buen gusto aunque eso ya lo sabía — digo claramente refiriéndome a mí misma y lo veo reír
— También eres comediante? — dice y asiento. Pide la cuenta y después de que paga salimos con los brazos entrelazados, mis mejillas están sonrojadas por tres cosas, por el vino, el frío y por George Russell.

El auto llegó y subimos para recorrer un poco la ciudad, George me hablaba un poco de varios lugares por los que pasábamos y aunque claramente ya conocía Londres, no quise matar el momento de él mostrándomelo, tal vez Russell me mostraría un Londres que jamás había conocido. Llegamos al London Eye y nos formamos para subir.
Las miradas curiosas comenzaron a llegar a nosotros y con eso algunos fans deseosos por fotos pero nada que pudiera matar el momento.
Subimos y sonreí apenas comenzó a girar mostrándome lo más hermoso de la ciudad.
— Supongo que ya te habías subido—
— Hace años — digo mirando todo — después del video de One Thing de One Direction — lo escucho reír
— Así que Directioner— murmura y asiento
— Harry Styles es muy buen amigo mío igual que Zayn Malik incluso tenemos una canción juntos
— Pero claro yo siempre seré tu británico favorito
— A partir de ahora ten por seguro que lo eres — digo y paso mis manos rodeando su espalda y lo abrazo. Deja besos en mi frente y sonrió.
— He subido miles de veces a este lugar y jamás me aburre — dice George mirando el paisaje — suelo venir a relajarme, a veces corro entonces es una parada obligatoria para descansar un poco
— Deberíamos salir a correr mañana, aunque no tengo ropa para correr, ¿hay alguna tienda deportiva cerca ?
— Solo comprarás ropa deportiva para correr mañana? -dice alzando la ceja y asiento
— Claro — digo y él ríe un poco.  Nos toca bajar y  caminamos un poco hacia las tiendas, veo Alo y compro un set que llevaba tiempo buscando pero siempre estaba agotado y luego un par de tenis, hicimos un poco más de shopping y unos flashes comenzaron a llegar.
George tomó mi mano y sin detenernos llegamos al auto mientras flashes y miradas curiosas comenzaban a seguirnos.