En el mundo que lo quería ver caer, un chico rubio llamado Hiroki está en busca de venganza y superación.
En esta travesía este chico encontrará sentimientos y emociones que nunca se esperó experimentar...
Habían pasado ya más de 1 semana desde el momento en que abrí los ojos y contemplé mi situación. Cada vez que veo a alguna de esas "mujeres", me dan ganas de vomitar. No puedo evitar pensar en todo lo que hicieron a mis espaldas, realmente, me siento totalmente asqueado al verlas. Su traición afectó tanto mi salud mental, como sin habilidades sociales, las cuales eran bajas de por sí.
Me encuentro preparándome para ir a la secundaria. La verdad, no tenía ganas de ir, pero lo hice por el simple hecho de no tener que ver a mi supuesta madre por el mayor tiempo posible.
Cuando terminé de alistarme, me preparé un sándwich rápidamente antes de que las mujeres despierten. En esta última semana estuve levantándome más temprano para no verles la cara, y ah estado funcionando. Solo con dejar una nota están tranquilas, al final, no les importo en realidad.
Cuando salí de mi casa, vi pasar a Sayuri, la cual estaba caminando al lado de su hermana. Iba a saludarla, pero al ver a Ayumu a su lado, preferí saludarla cuando me la cruzara en la escuela.
Sin darle mucha importancia, dejé que pasarán para no ser visto. Al ver que funcionó, solté un pequeño suspiro antes de seguir mi camino hacia la secundaria.
El trayecto fue tranquilo, sin ningún inconveniente. Lo único que se le podría considerar así, es el encontrarme con Nao y Kokujin juntos, yendo a la escuela, Nao abrazando el brazo derecho del n#gro. Mantuve mi paso tranquilo, hasta encontrar una forma de salir del escenario tan asqueroso que estaba presenciando.
Al ver una calle a la que cambiar de dirección, la utilicé, así encontrándome con alguien que no esperaba ver allí.
Hiroki: ¡Hey! Hola Kurumi-Chan.
La mujer volteó, viéndome a la cara, y sonriendo en el proceso.
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Kurumi: Hola Hiroki-Kun, ¿como te va?.
Dijo la mujer con una leve sonrisa.
Hiroki: Todo bien Kurumi, ¿y a ti?.
La chica me miró tranquila, mientras decía calmadamente.
Kurumi: Muy bien, Hiroki, ¿como te va con mi hermana?.
La fémina preguntó con una pequeña intriga.
Hiroki: Pues... Nao y yo, diría que ya no somos nada.
Dije un poco incomodo por lo que estábamos hablando, esa respuesta pareció sorprender a la linda chica, quien dijo.
Kurumi: ¿Que hizo Nao?.
Preguntó con un poco de... ¿furia? Eso me hizo sonreír por los adentros, ella merecía saber lo que hacía esa persona.
Así, le conté resumidamente lo que hizo Nao, no dije la parte de las demás porque no lo veía necesario, al final, no serviría de nada. Por lo menos por ahora.
