boku no héro academia: la leyenda del rey mono

Temporada 2: Capitulo 3

La clase de rescate en el USJ

Aizawa, como era costumbre, entró al aula en silencio, con su usual mirada cansada pero siempre intimidante. Los estudiantes, que ya estaban acostumbrados a sus abruptas apariciones, enderezaron sus posturas. Sin mucho preámbulo, Aizawa comenzó a hablar:

-Mañana será nuestra primera clase de rescate. Nos dirigiremos al USJ, la Unidad de Simulación de Eventos Jamás Esperados. Esta es una instalación diseñada específicamente para situaciones de rescate en entornos simulados. Estaremos acompañados por el héroe Trece y, si el horario lo permite, también por All Might.

Una mezcla de emoción y curiosidad invadió el aula. La mención de All Might siempre tenía ese efecto. Aizawa continuó, ajeno a los murmullos crecientes.

-El objetivo de esta clase es enseñaros cómo actuar ante desastres naturales o ataques a gran escala. Cada uno de ustedes deberá usar sus quirks de manera efectiva y, sobre todo, inteligente. Prepárense. No será una clase fácil.

Bakugo chasqueó la lengua con impaciencia. -Fácil o no, solo tengo que reventar cosas. No es tan difícil, ¿cierto?

-¡Bakugo! -exclamó Iida, levantando la mano como si fuera un reflejo automático-. ¡Por favor, muestra respeto a la instrucción del profesor!

-Cálmate, cuatro ojos, no estaba hablando contigo.

Iida se enderezó y luego miró hacia Aizawa, esperando una reprimenda que nunca llegó. Aizawa solo se frotó los ojos, como si necesitara más sueño.

-Váyanse temprano a casa y descansen -añadió Aizawa-. Partimos a primera hora. No quiero retrasos.

A la mañana siguiente, los estudiantes de la Clase 1-A estaban en el exterior, esperando junto al autobús que los llevaría al USJ. El clima era agradable, con un cielo despejado que contrastaba con la energía nerviosa del grupo. Iida, siempre atento, observó cómo la formación de los estudiantes era desordenada, lo que lo hizo entrar en "modo de líder".

-¡Clase 1-A! -exclamó Iida con seriedad-. ¡Debemos formar filas! Dos filas, para ser exactos. ¡Esto es lo que se espera de futuros héroes, disciplina y orden!

Mineta lo miró con incredulidad, rascándose la cabeza. -¿Por qué tenemos que hacer filas para subir a un autobús?

-Porque es lo correcto -respondió Iida-. La disciplina comienza con los pequeños detalles.

-Eh, esto no es un viaje escolar, Iida -dijo Kaminari, soltando una pequeña risa-. Relájate.

El autobús, lejos de ser un modelo escolar convencional, era más bien un vehículo moderno y espacioso, diseñado para transportar héroes. No había necesidad de formaciones tan estrictas, pero Iida, imperturbable, seguía agitando sus manos en un intento de organizar a todos.

Finalmente, Aizawa, con su siempre presente expresión de agotamiento, les dio la señal para subir al autobús sin mencionar nada sobre la insistencia de Iida. Ya en el autobús, los estudiantes empezaron a tomar asiento.

-Bien, entonces, ¿quién quiere hablar de sus quirks? -preguntó Kirishima, con entusiasmo-. Es un buen momento para conocernos mejor, ¿no?

El ambiente se relajó un poco más. Estar dentro del autobús, rumbo al USJ, hizo que la conversación fluyera con más naturalidad. Todoroki, sentado en silencio junto a la ventana, no mostraba mucho interés en la charla, pero el tema de los quirks siempre llamaba la atención de todos.

-Yo tengo un quirk mixto, calor y frío -explicó Todoroki de manera concisa cuando Kirishima le preguntó-. Puedo congelar con la parte derecha y generar calor con la izquierda.

-¡Eso es increíble! -exclamó Kaminari, mientras Mina asentía vigorosamente-. ¡Parece súper útil en cualquier situación!

Todoroki solo asintió, mirando por la ventana sin mucho entusiasmo.

-Bueno, no me importa lo que puedan hacer los demás -intervino Bakugo, con los brazos cruzados-. Mi explosión es la única que importa aquí. Los demás pueden quedarse atrás.

-Siempre tan humilde, Bakugo -comentó Sero con sarcasmo, provocando risas en el grupo.

Bakugo lanzó una mirada fulminante, pero antes de que pudiera responder, el foco de atención cambió hacia Yaoyorozu.

-Tú también eres increíble, Yaoyorozu -dijo Kirishima-. Tu habilidad de creación es súper versátil. ¡Puedes crear casi cualquier cosa!

Momo, siempre modesta, sonrió y respondió: -Sí, pero depende mucho de mi conocimiento. Tengo que estudiar constantemente para poder utilizar mi quirk de manera eficiente.

-Eso suena agotador -murmuró Mineta-. Yo no podría concentrarme tanto...

-Tampoco es tan fácil como lo imaginas -dijo Yaoyorozu con una pequeña sonrisa-. Es cuestión de disciplina y planificación.

Izuku, que hasta entonces había estado en silencio, fue el siguiente en ser el blanco de las miradas curiosas. Kirishima lo miró con interés.

-¿Y tú, Midoriya? -preguntó-. Todavía no he visto mucho de tu quirk, pero se nota que tienes un gran poder. ¿Qué puedes hacer?

Izuku, siempre un poco nervioso en situaciones sociales, se rascó la nuca, tratando de encontrar una explicación breve y concisa.

-Bueno... Mi poder está basado en un antiguo héroe... puedo utilizar habilidades similares a las de Sun Wukong, el Rey Mono. Principalmente tengo mucha fuerza, velocidad y agilidad, y también puedo invocar una nube para volar.

Los estudiantes lo miraron con asombro, y Mineta, con los ojos brillando de emoción, intervino.

-¡Es como si fueras un personaje de algún manga legendario!

Izuku sonrió tímidamente, pero antes de que pudiera agregar algo más, Iida tomó la palabra.

-Es increíble cuántos quirks únicos y poderosos hay en nuestra clase. Estoy seguro de que, con la guía de nuestros maestros, podremos sacar lo mejor de ellos.

-Bueno, no nos confiemos tanto -intervino Jiro-. Una cosa es tener habilidades, pero otra es saber cómo usarlas correctamente en situaciones de rescate. Eso es lo que realmente importa, ¿no?

Las palabras de Jiro trajeron un aire de seriedad a la conversación. La emoción por la clase de rescate comenzó a mezclarse con una sensación de anticipación nerviosa. Todos sabían que el USJ no sería un simple ejercicio.

-Y por eso vamos a entrenar con héroes experimentados -dijo Todoroki, rompiendo su silencio-. No podemos subestimar la importancia de aprender cómo reaccionar en situaciones extremas.

El autobús siguió su camino mientras la conversación giraba en torno a tácticas y estrategias. Algunos seguían discutiendo sobre sus quirks y sus posibles aplicaciones, mientras otros, como Todoroki, permanecían más reservados. Bakugo, por su parte, seguía siendo arrogante, pero incluso él parecía intrigado por lo que les esperaba.

Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, el autobús llegó a las puertas del USJ. La gran estructura en forma de cúpula se levantaba ante ellos, imponente y misteriosa.

-Bajen del autobús y prepárense -ordenó Aizawa-. La clase está por comenzar.

Izuku, emocionado pero también nervioso, respiró hondo antes de seguir al resto de la clase hacia el interior del USJ. No tenía idea de que, en unas pocas horas, su vida daría otro giro inesperado.