La Búsqueda de la Inmortalidad

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La bruma matutina cubría Liyue, y la luz del sol apenas comenzaba a filtrarse a través de las nubes. En el interior del Jardín Bólido, Baizhu se encontraba rodeado de frascos y libros, sumergido en la investigación de las propiedades curativas de las plantas. Sin embargo, su mente estaba dividida. Los pensamientos de Il Dottore y su ambición por la inmortalidad lo inquietaban.

Aquella tarde, Il Dottore llegó al jardín con una actitud diferente, cargando un voluminoso libro de notas. Su rostro mostraba la emoción de un científico que ha hecho un descubrimiento significativo.

—Baizhu, he estado trabajando en un nuevo enfoque sobre la inmortalidad —dijo, su voz llena de entusiasmo.

Baizhu se giró, sus ojos iluminándose ante la pasión de Il Dottore.

—¿Inmortalidad? —preguntó, con un tono que denotaba tanto interés como preocupación—. ¿Qué has encontrado?

Il Dottore abrió el libro y comenzó a explicar su investigación.

—He estado estudiando la naturaleza de la vida y la muerte, y creo que hay un modo de retrasar el envejecimiento celular utilizando una combinación de hierbas raras y tecnología de alquimia avanzada. La clave podría estar en la regeneración celular.

Baizhu frunció el ceño, recordando las implicaciones morales de jugar con la vida.

—Eso es increíble, pero también peligroso. La inmortalidad puede parecer atractiva, pero ¿a qué costo?

Il Dottore, sin embargo, estaba decidido.

—Es precisamente esa pregunta lo que me ha llevado a seguir investigando. Imagina un mundo donde la enfermedad y la muerte ya no existan. Podríamos salvar vidas.

—O condenarlas —interrumpió Baizhu, su tono serio—. La naturaleza tiene su ciclo por una razón. No podemos simplemente ignorarlo.

Il Dottore se quedó en silencio, comprendiendo la lucha interna que se libraba en su compañero. Sin embargo, su deseo por el conocimiento era más fuerte.

—Sé que mis métodos son controvertidos, pero creo que debemos explorar esta posibilidad.

Baizhu suspiró, la tensión entre ellos palpable.

—¿Qué necesitas de mí?

Il Dottore sonrió, agradecido por la disposición de Baizhu a colaborar.

—Necesito tus conocimientos sobre hierbas medicinales. Hay una planta que se dice que puede potenciar la regeneración celular. Se llama "Cielo Verdoso", y solo crece en lo profundo de las Montañas de Liyue.

—Entonces, vamos a buscarla —respondió Baizhu, sintiendo una mezcla de temor y emoción. Sabía que esta aventura los acercaría, pero también podría llevarlos a caminos oscuros.

Al día siguiente, ambos partieron hacia las montañas. El sendero serpenteante estaba cubierto de vegetación, y el aire fresco llenaba sus pulmones. Mientras caminaban, el silencio se convirtió en una conversación fluida, compartiendo historias de su infancia y anécdotas sobre sus trabajos.

—A veces, siento que mis experimentos me han alejado de lo que realmente importa —admitió Il Dottore, mirando hacia el horizonte—. Pero al mismo tiempo, me siento más vivo que nunca al descubrir cosas nuevas.

—La curiosidad es fundamental —respondió Baizhu—. Pero nunca olvides que hay vida más allá de los laboratorios y las fórmulas.

Finalmente, llegaron a un claro rodeado de árboles gigantescos. En el centro, resplandecía una planta que brillaba con un verde luminoso.

—Ahí está —dijo Il Dottore, su voz llena de asombro.

Baizhu se acercó cautelosamente, observando la planta con admiración. La energía que emanaba era palpable, y entendía por qué era tan valorada.

—¿Vas a recolectarla? —preguntó, aunque su instinto le decía que no todo lo que brilla es oro.

—Sí, pero necesito tu ayuda para asegurarme de que lo hacemos de manera correcta —respondió Il Dottore, sacando un frasco del bolsillo.

Mientras comenzaban a recolectar la planta, un viento frío se levantó, trayendo consigo un susurro que parecía advertirles. Baizhu sintió un escalofrío recorrer su espalda.

—¿Estás seguro de que esto es lo correcto? —dijo, aunque continuaba ayudando.

Il Dottore, absorto en su tarea, no respondió. Para él, el objetivo de la inmortalidad era más grande que cualquier advertencia.

Al regresar al jardín, el peso del frasco lleno de "Cielo Verdoso" parecía más pesado de lo que había imaginado. Il Dottore se puso a trabajar inmediatamente, mientras Baizhu lo observaba, una preocupación creciente en su corazón.

—¿No crees que deberíamos analizar sus propiedades antes de proceder? —preguntó Baizhu.

—No hay tiempo que perder —respondió Il Dottore, ya sumido en sus notas—. La oportunidad es ahora.

Baizhu lo miró, sintiendo que la ambición de Il Dottore comenzaba a consumirlo. Era un impulso que podía llevar a la locura.

—Il Dottore, entiendo tu deseo de descubrir, pero hay un límite. La vida no se trata solo de avanzar, sino también de entender y respetar el ciclo.

—Si no arriesgamos, nunca progresaremos —respondió Il Dottore, su mirada ardiente—. La inmortalidad es una oportunidad para trascender nuestras limitaciones.

Al escuchar eso, Baizhu sintió una punzada de miedo. Sabía que su amigo estaba al borde de una línea peligrosa, una que podría cambiar no solo sus vidas, sino también la de muchos otros.

—¿Qué pasará si tus experimentos fallan? —preguntó, tratando de hacerle ver las consecuencias.

Il Dottore se detuvo, la tensión en el aire palpable.

—No puedo permitir que el miedo me detenga. La ciencia no avanza sin sacrificios.

Baizhu dio un paso atrás, sintiendo que la distancia entre ellos crecía. La pasión de Il Dottore era contagiosa, pero también era un fuego que podía consumirlo todo.

—Debo advertirte, Il Dottore, que no todo avance es bueno. La inmortalidad podría traer más sufrimiento del que imaginas.

—A veces, hay que enfrentar el sufrimiento para alcanzar la grandeza.

Las palabras de Il Dottore resonaron en el corazón de Baizhu. ¿Podría ser que su ambición lo llevara a cruzar una línea que jamás debería ser cruzada?

Mientras la noche caía sobre Liyue, Baizhu observó a Il Dottore sumido en su trabajo, temiendo que, en su búsqueda de lo eterno, pudieran perderse a sí mismos. El camino hacia la inmortalidad estaba lleno de sombras, y se preguntó si podrían encontrar la luz juntos antes de que fuera demasiado tarde.

Entre Venenos y Curaciones [Baizhu x Il Dottore]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora