Capítulo VIII

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Era muy temprano por la mañana, el sol apenas había salido y Daniel se encontraba en un relajante sueño y seguiría así de no ser por el fuerte y constante toque a la puerta de su hogar. Frunció el ceño y a pasos soñolientos salió apurado de su habitación pues no quería que su pequeño se despertara por el constante toque a su puerta.

Cuando abrió la puerta lo primero que vio fue la figura de su cuñado, quien sin esperar más se adentró a su hogar. Parecía alterado.

—¿¡Viste las noticias!?— Chozen le preguntó.

—Buenos días para ti también, Chozen— Daniel dijo mientras se le escapaba un bostezo.

—Lo siento, buenos días Danny— Chozen abrazó rápidamente a Daniel —Ahora sí... ¿¡Viste las noticias!?

—No, ¿Qué tienen las noticias? — Daniel preguntó mientras se lanzaba perezoso a su sofá.

—Daniel, ¡tu rostro está por todo Internet!, todos hablan sobre de la inesperada relación del gran y joven empresario John Lawrence— contó, causando que Daniel se parara de golpe del sofá —¿¡Cuando pensabas contarme que salías con un millonario!?

—¿¡Qué mi rostro que!?

Y Daniel salió disparado hacia su computador. Cuando su jefe le dijo que posiblemente estaría su nombre junto al de él en los titulares de revistas, Vlogs y noticias, no mentía.

En su computador miraba todo tipo de notas hablando sobre la relación del joven empresario y el cómo había mantenido y ocultado su relación con su asistente por varios meses.

Todo su rostro estaba en la zona de espectáculos y sabía que aquello no resultaría nada bueno para él.

Adiós a su calma, paz y tranquilidad.

Leyó un último Vlog de "noticias" pues al parecer esa página solo se daba por subir notas amarillistas o con falta de información. Bufo nuevamente mientras escuchaba parlotear a un animado Chozen por toda la sala.

—¡Soy cuñado de un millonario!

Daniel escuchó decir a Chozen.

...

Al llegar a su trabajo todo pasó tal cual lo había imaginado. Todas las miradas estaban puestas en él y sólo en él, todos murmuraban mientras le miraban de pies a cabeza, unos inclusive decían más de una estupidez.

Y es que la noticia había sido toda una verdadera bomba de chisme tanto como para los empleados y personas del medio. Nadie podía creer en el romance que el omega y el alfa tenían pues la mayoría pensaba que no llegaría el momento en el que el alfa tendría finalmente algo serio, pues los paparazzi siempre captaban al joven empresario con citas casuales y cero formales.

Daniel se encontraba realmente indignado y ofendido, no paraba de leer notas donde la mayoría de comentarios eran sobre que él solo estaba interesado por el dinero del alfa y por ello mantenía una relación con John.

¡Tonterías!

Él no estaba interesado en el dinero de su jefe, ni de nadie. No se había estado matando el lomo estos últimos cinco años de su vida como para que personas ajenas a él lo tacharan de un interesado.

Para su fortuna él sabía muy bien que lo poco o mucho que tenía había salido de su esfuerzo y su dinero.

Nadie más que él sabía las inmensas ganas que tenía de romper la apuesta carita de su jefe a golpes. Pero claro, luego estaba su omega que deseaba que el alfa le llenará de halagos y mimos.

Pero ese era su omega, no él.

Suspiró aliviado al tomar el ascensor y finalmente llegó al solitario pasillo que le llevaba a la oficina de su jefe.

Stupid Boss | LawRusso | AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora