#5: La Gata y La Araña

802 54 8
                                    

—Debo admitir que verte una vez más vestido de negro. Es muy atrayente para mí—escucho la voz apasionada de la mujer, aunque no se notaba por sus lentes observaba ese escote. Había enterrado su rostro en muchas ocasiones allí.

—¿Ahora que estás tramando, Felicia? La última vez que nos habíamos visto habíamos tenido un "compromiso" y después te fuiste sin dejar un solo rastro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Ahora que estás tramando, Felicia? La última vez que nos habíamos visto habíamos tenido un "compromiso" y después te fuiste sin dejar un solo rastro. Más allá de tu pequeño gato—se cruzaba de brazos.

—Oh veo que encontraste al pequeño Walter, no pude llevarlo conmigo. Mis ocupaciones harían que estuviese en peligro, músculos—una ladina sonrisa se plasmó en su rostro—. Puedo escuchar la amargura en tu voz.

—¿Por qué será? Siempre me has hecho lo mismo, desapareces y vuelves una vez más a mí vida. ¿Ahora quieres hacer un atracó? O ¿Tomar un collar de tigre muy especial de una multimillonaria?—inquiere el hombre de las mallas negras.

Black Cat bufó.

—He venido aquí para hacer un trato, músculos. Ahora soy la nueva jefa del crimen—las lentes del arácnido se abrieron.

—¿¡Cómo que eres la nueva jefa!?

—Oh relajado, mí arañita. Simplemente conseguí hacerme de un nombre en los barrios más bajos, una dama debe seguir aspirando a más y no he cometido ningún crimen. Digamos que tienes un poco de protección de mí parte—se acercó a su hombre, menea sus caderas y acaricia el símbolo de la araña.

—¿A qué te refieres, Fel?—preguntaba Spider-Man, confundido.

—Pude convencer algunos villanos para que no te ataquen, o bueno más bien si pelearán contra ti sería bajo su propio riesgo. Puedes ir al bar sin nombre si quieres visitarme para obtener la información que desees—respondió—. Sé que he sido una mala novia, amiga y amante. Siempre andaba usando para mí propio beneficio, he sido egoísta contigo y ahora deseo amarte.

—¿Cómo sé que puedo confiar en ti?

—He sido la tercera mujer que ha tenido tu corazón.

Subiendo la máscara del hombre, sus ojos azules conectan con los castaños. Sus respiraciones entrelazadas, juntándose una vez más en ese beso tan lleno de pasión como amor. Las manos del hombre viajan por el cuerpo de la fémina, esas curvas tan peligrosas como hermosas mientras que sus lenguas bailan queriendo tener el control del otro. Acorraló a la mujer hacia una de las paredes, tomaba la pierna derecha y la sube rozando sus intimidades debido a la falta de oxígeno se alejaban del beso unidos por un hilo de saliva.

—¿No traes calzoncillos? Eres un niño muy malo, músculos. ¿Cómo se te ocurre hacer algo como eso?—regañaba al héroe, ocasionando que sonriera.

—Me gusta ser un chico malo, Fel. Así que no puedes reclamarme por eso, ya que tu también andas sin tus bragas—sus labios devoran el cuello de la felina.

Spider-Man: A Lust Responsability Donde viven las historias. Descúbrelo ahora