𝘌𝘹𝘵𝘳𝘢ñ𝘰 𝘴𝘦𝘯𝘵𝘪𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰...

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𝙁𝙚𝙡𝙞𝙭

Habían pasado varios días, todos lados iguales. Hyunjin seguía usándome como juguete sexual y yo recibía dinero por eso, así que estaba satisfecho, pero al parecer Hyunjin no lo estaba.

La luz me despertó, Hyunjin se había levantado. Si, ahora dormimos juntos, pero solo porque estoy muy cansado para irme cuando terminamos, solo eso…

Yo abrí los ojos y me incorporé en la cama, viendo como el cuerpo de mi jefe se levantaba de la cama. Su cuerpo cubierto de rasguños de mi parte, a él le encanta eso… pero hay algo extraño con él, desde hace unas semanas que me ignora, solo me envía un mensaje cuando quiere acostarse conmigo. Pareciera que estar junto a mí es lo único que quiere, pero no quiere hablar conmigo. Por alguna razón, eso me entristece…

—¿Hyunjin…?— pregunté algo perdido. Estaba extraño.

—No puedo dormir…— Murmuró.

—Bueno… ven aquí y cierra los ojos…— Él me miró durante un rato y luego se acostó junto a mí.

Yo moví mi brazo, permitiendo que se acurruque en mi pecho y el lo hizo. El calor de su respiración y algunas lágrimas cayendo de sus ojos por el cansancio, se veía tan lindo. Y ya no puedo negarlo, estoy completamente enamorado de Hyunjin…

Seguía comportándose extraño conmigo, pero al parecer estaba demasiado cansado como para importarle algo ahora.

Él se quedó dormido primero. Yo acariciaba su cabello suavemente con una sonrisa que demostraba todo lo que sentía por él. Nuestras piernas estaban entrelazadas. No quería soltarlo, nunca quiero soltarlo.

Me quedé dormido.

Al otro día, me desperté y Hyunjin ya no estaba en la cama. Lo busqué por la enorme casa, pero no lo encontré. Me dirigí a la habitación y me encontré con una nota.

¿𝙳𝚎𝚜𝚌𝚊𝚗𝚜𝚊𝚜𝚝𝚎, 𝙻𝚒𝚡𝚒𝚎? 𝙴𝚜𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚚𝚞𝚎 𝚜𝚒. 𝙽𝚘𝚜 𝚟𝚎𝚖𝚘𝚜 𝚎𝚗 𝚎𝚕 𝚝𝚛𝚊𝚋𝚊𝚓𝚘, 𝚝𝚞𝚟𝚎 𝚚𝚞𝚎 𝚒𝚛𝚖𝚎 𝚊𝚗𝚝𝚎𝚜. 𝙲𝚘𝚖𝚎 𝚊𝚕𝚐𝚘 𝚢 𝚝𝚎𝚗 𝚞𝚗 𝚋𝚞𝚎𝚗 𝚍í𝚊. 𝙲𝚘𝚗 𝚊𝚖𝚘𝚛, 𝙷𝚢𝚞𝚗𝚓𝚒𝚗.

Mi corazón latía rápidamente. Ese “Con amor, Hyunjin” rondaba en mi cabeza, dando vueltas y vueltas. Mis mejillas se calentaban lentamente y mis manos temblaban ligeramente.

—Con amor…— Murmuré.

—¡Ah, llegaré tarde!— Dije al ver la hora.

Me vestí, comí algo y salí de la casa de Hyunjin, dirigiéndome al trabajo.

Cuando llegué, un montón de compañeros de trabajo me rodearon, arrinconándome contra la pared. No entendía que estaba pasando.

—¿Q-que sucede…?— Pregunté, algo agobiado por todos los compañeros de trabajo que me rodeaban.

—¿Es verdad que te acostaste con el jefe de la empresa? Wow, que suerte que tiene un novato…— Mi mente se nubló, no sabía que pensar. ¿Cómo se habían enterado? ¿Qué hago ahora…?

𝙃𝙮𝙪𝙣𝙟𝙞𝙣

𝘏𝘰𝘳𝘢𝘴 𝘢𝘯𝘵𝘦𝘴

Veía a Felix descansar plácidamente, la necesidad de hacerlo mío otra vez no desaparecía, pero el pobre tenía el cuerpo adolorido, como siempre. Tal vez soy muy duro con él, pero no puedo resistirlo.

No quería ir a trabajar, quería quedarme con él todo el día, pero no puedo descuidar la empresa, así que me vestí, me preparé y tomé una taza de café.

Aún no paraba de mirar el pequeño cuerpo de Felix acostado en la cama, se veía frágil. Definitivamente el es mi debilidad. Su diminuto cuerpo me atrae como nunca pensé que me atraería alguien.
Su lindo cabello rubio y sus pecas notorias. Sus labios rosados, sus mejillas algo acaloradas y cada pequeño detalle de él me volvía loco.

Aún puedo recordar sus gemidos de la noche anterior, aunque me gustaría que él lo disfrutara un poco más, pero solo lo hace por el dinero.
Las imágenes del día anterior siguen dando vueltas en mi cabeza, como presionaba dentro de él, como mis manos apretaban ligeramente su cadera. Su cuello y torso cubiertos de marcas y mordidas, el cuerpo de Felix ardía ante mi toque, y el no podía negarlo.

Ahora debía irme, pero no quería dejarlo.
Suspiré, dejé una nota y me fui al trabajo.

Al llegar al trabajo, todos me miraban de forma extraña, pero no dije nada y simplemente fui a mi oficina.

Pasaron varias horas hasta que Felix llegó a mi oficina, se veía agitado y preocupado.

—¿Estás bien?— pregunté confundido. No era normal verlo así, no se veía bien, algo lo estaba asustando y alarmando.

—S-señor, digo Hyunjin… se han enterado…— No comprendí de lo que estaba hablando.

—¿Podrías ser más específico? ¿De que se han enterado? Y, ¿Quiénes?— pregunté.

—D-de lo que hacemos… los dos… por el dinero…— Comprendí rápidamente. No era un problema para mi, pero si para él…

—Oh... ya veo...— respondí.

—E-esto no es nada bueno... podrían despedirme...— Murmuró caminando en círculos.

—No van a despedirte...— Respondí yo. Que idiota, ¿Acaso no recordaba que el gerente soy yo?

—¿Por qué está tan seguro...?—

—Porque yo soy tu jefe, y no voy a despedirte—

—Ah... cierto...—

Aún así, parecía muy alarmado, así que me acerqué y lo sujeté de la cintura.

—Oye, Tranquilizate. No hay de que preocuparse...—

—¿Eso cree? Ahora me acosarán en el trabajo. Espero irme pronto...—

—Espera, ¿Que? ¿Como que irte?— No comprendía de que estaba hablando.

—Ya se lo dije, este trabajo es para pagar mi universidad. Tengo otros trabajos para mantenerme...—

—¿Otros trabajos?— En ese momento comprendí que en realidad no sabía nada de él. Creo que últimamente he estado muy perdido con... ese asunto...

—Si... doy tutorias... algunos trabajos de medio tiempo...— Estaba claro que casi no conocía a Felix.

—No... tenía idea... Entonces... ¿Te irás cuando termines de pagar tu universidad...?—

—Si... así que... ¿Que hago ahora? Van a perseguirme con preguntas...— Me senté bruscamente en mi silla y suspiré.

—Vete...—

—¿Q-que?—

—¡Sal de mi oficina!— Y por primera vez, le grité a Felix. Ví su expresión sorprendida, pero sin decir nada, se fue.

El silencio invadió la oficina, mí cabeza daba vueltas. Últimamente he estado muy estresado, pues había algo que le oculté a Felix desde hace unas semanas...

Estoy comprometido...

𝘊𝘰𝘯𝘵𝘪𝘯𝘶𝘢𝘳𝘢...

            ꧁༺𝐃𝐞𝐣𝐞𝐧 𝐬𝐮 𝐯𝐨𝐭𝐨༻꧂

𝘜𝘯 𝘦𝘮𝘱𝘭𝘦𝘰 𝘮𝘢𝘴 𝘭 𝘏𝘺𝘶𝘯𝘭𝘪𝘹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora