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8.

RHEA

Quedan diez minutos para dar por comenzada la categoría juvenil masculina del estatal 2024 de Ahiya.

Las palabras suenan del altavoz, entonces, decido levantarme para acercarme a los chicos.

Primero voy a por O, que tiene los auriculares puestos y está sentado en el suelo mientras se estira para llegar a la punta de sus pies. En cuanto llego junto a él, le toco el hombro suavemente, para no asustarle. Se gira y en cuanto me ve se levanta y se quita los auriculares con una sonrisa inmensa.

-Hola Rhea.

-Hola O, solo venía a decirte algo antes de que entres en el agua. – no me contesta, simplemente me dedica otra de sus sonrisas. – Quiero que lo des todo de ti. Sé que siempre lo haces, pero también sé lo mucho que sobrepiensas cada vez que vas a coger una ola. No lo pienses, vívelo. De eso se trata el surf. Eres el mejor. Lo sabes tú y lo sabemos todos. Siendo realistas, Jack era uno de tus mayores adversarios, pero no te confíes por la luxación de rodilla, el resto no son fáciles de ganar. Ajax mismo está dispuesto a hacerlo todo por ganar, como debe ser. Así que quiero que salgas y muestres lo mucho que te has currado el llegar hasta aquí, ¿está claro?

Se limita a asentir, sonreír y darme un abrazo, en el que me susurra un pequeño gracias.

Cuando me suelta, le cocho los cinco como despedida y me dirijo hacia Ajax, que está calentado los tobillos de nuevo.

-Hey. – le saludo. Se da la vuelta para mirarme.

-Rhea, hola. – responde, claramente nervioso.

-¿Qué tal estás?

-Algo nervioso. – contesta. Y la verdad que no necesitaba ni preguntar, ya que sus cortas respuestas lo dicen todo.

-Venía a desearte suerte, aunque la verdad es que no creo que la necesites. – en respuesta, Ajax se limita a mover la cabeza de un lado a otro, en señal de duda. – Lo digo enserio. No te voy a mentir, ambos sabemos que tanto tú cómo los otros cinco surfistas tenéis mucho nivel, pero eso no significa que no tengas posibilidades de quedar en podio. Es más, soy fiel creyente de que vas a llegar muy lejos, pero solo si confías en ti. La mentalidad lo es todo. No existe ganador que no tenga una mentalidad ganadora. Así que quiero que antes de que salgas, te repitas una y otra vez que vas a ganar, ¿entendido? – termino de hablar, seria, pero Ajax me dedica una sonrisa deslumbrante y me responde, firme.

-Entendido. – y levanta la barbilla, haciéndome ver que de verdad lo ha entendido.

-Bien. – entonces me da un abrazo rápido y me tiende su móvil y cascos, para llevarlos de vuelta a la carpa. Los cojo con cuidado y le miro una última vez. – Suerte.

-Gracias. - me responde, esta vez asintiendo con la cabeza.

Una vez me separo de Ajax, vuelvo a dirigirme hacia Oliver para pedirle su móvil y cascos, él me los da y le digo suerte una última vez, no porque creo que la necesite, sino porque sé que hoy tocará el podio.

Cinco minutos para que empiece la primera ronda juvenil masculino. Por favor, que todos los participantes se pongan en la línea de salida. Cuando suene el silbato, el tiempo se dará por comenzado, tienen treinta minutos para adquirir el máximo de puntos posibles. Recordamos a los competidores que cualquiera que pase de la línea de salida antes de que suene el silbato, quedará permanentemente descalificado de la ronda. Mucha suerte a todos.

Mientras suena la advertencia de siempre y un repaso de las reglas por el altavoz, dejo encima de la mesa los móviles de ambos y me siento en la silla entre Dexter y Mer. Ninguno dice una palabra hasta que por fin suena el silbato y los tres nos ponemos de pie. Expectantes.