Capítulo 8.

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Eren disfrutaba de los besos de Levi, el hecho de que ambos estuvieran sin camisa no le ayudaba mucho. Imaginaba un sinfín de cosas que podían pasar.

Sin pensarlo demasiado acaricio el pecho de Levi y comenzó a bajar su mano lentamente, pero el azabache lo detuvo antes de que la mano ajena ingresará a su pantalón.

-¿Qué haces, mocoso?-

-¿Cómo que que hago?-

-no va a pasar nada.-señalo levantándose de la cama y colocándose la camiseta.

-¿Por qué no? Antes lo entiendo, éramos prácticamente niños, pero ahora somos adultos.-

-¿Somos?-

-Levi por favor.-

-vamonos, será mejor llevarte a casa.-el menor se levantó con un semblante triste, se puso la sudadera que Levi le había prestado y abrió los ventanales.-¿A dónde vas?-

-saldré por dónde entre.-

-saldrás conmigo por la puerta principal, Mikaza ya debe de estar dormida, ayer se desvelo viendo una serie.-

Ambos salieron de la habitación, Eren presto atención a las fotos que colgaban de la pared, en ellas podía verse la familia unida que antes eran, en estás Levi sonreía sutilmente. Fue ahí que Eren recordó como había sido Levi antes, tenía más chispa, era más alegre... Desde su reencuentro no había vuelto a ver esa chispa, llegó a creer que ya no existía.

Antes de que Levi pudiera abrir la puerta, Eren lo tomo del brazo y se abalanzó hacia él para comenzar a besarlo, Levi respondió con desesperación, envolviendo al menor entre sus brazos.

El azabache cargo al menor, y tras un paso en falso, chocaron con una pequeña mesa y tiraron una figura de madera, misma que causó un sonido fuerte.

Ambos se separaron asustados, escucharon una puerta abrirse y luego se oyó la voz de la chica.-¿Levi?-nerviosos miraron hacia las escaleras, donde la azabache los miraba sorprendida.-Eren, ¿qué haces aquí?-

Nerviosa y un poco incómoda, trato de acomodarse un poco la ropa, pues solo llevaba un pequeño short rosado y una playera de tirantes blanca.

-he... Vine a buscarte... Pero Levi me recibió y dijo que... No eran horas de visitarte, así que mejor me voy.-

-¡Espera! Aún esta lloviendo. Entra, prepare algo para tomar.-

-no gracias.-

-insisto. Solo...-

-Mikaza.-grito Levi deteniendo a la chica.-cubrete.-

-claro, ya vuelvo.-la joven subió de nuevo y regreso a su habitación.

El castaño miro con miedo al profesor, este solo levanto la figura de madera y le dio la espalda.-Levi yo...-

-no digas nada. Ella no tardará en bajar.-

★★★

Eren estaba sentado bebiendo un café con leche que Mikaza le había preparado, los tres estaban sentados en la mesa. La joven hablaba, pero Eren solo pensaba en lo molesto que seguramente estaba el azabache.

Por otra parte Levi miraba su taza, si volteaba a ver a los jóvenes la furia se hacía presente, pues Mikaza no escondía para nada su atracción por aquel ojiverde.

Finalmente Eren pudo terminar con la plática, se despidió de Mikaza y salió de la casa junto a Levi, ambos subieron al coche y se mantuvieron bajo un silencio incómodo.

★★★

El coche se detuvo pero Eren no bajo, y Levi no pensaba correrlo.

-¿Del uno al diez que tanto estás molesto?-hablo rompiendo el silencio.

El profesor suspiro pesadamente. -depende. Por el beso en la entrada no te preocupes. Por la actitud de Mikaza... Rebaza el diez.-

El menor sonrió divertido, sujeto la mano del azabache y ambos se miraron. -¿Quieres quedarte conmigo un rato? Mis padres no están.-

-Eren...-

-no pasará nada, ya lo sé. Pero quiero estar contigo Levi, por favor.-Levi sonrió ampliamente, no lo quería admitir, pero amaba con locura a ese adolescente.

-le mandaré un mensaje a Mikaza, le diré que pasaré a ver a Erwin.-

Ambos bajaron y entraron a la casa, subieron las escaleras y fueron directo al cuarto del menor. El profesor se sorprendió, pues a diferencia de lo que creía, aquella habitación estaba bastante limpia y ordenada.

-¿Te parece si vemos una película?-

-la que quieras... Menos de terror.-Eren sonrió divertido, Levi podía parecer imponente, pero en realidad no lo era, o al menos no con él.

Ambos se quitaron las prendas superiores y se acostaron en la cama cubriéndose con las cobijas. Eren disfrutaba de suaves toques sobre su espalda, los mismos que lograban erizarle la piel, provocando un pequeño problema en su pantalón.

Eren le dio la espalda a Levi, la luz estaba apagada, pero la luz de colores proveniente del televisor le permitía ver la espalda y nuca del menor, se acercó y comenzó a besarlo y morderlo ligeramente.

El castaño comenzó a soltar pequeños suspiros, no solo por los besos sobre su nuca, también por las manos del mayor, las cuales recorrieron su cadera, abdomen y pecho.

-no es justo... No quieres que pase nada... Y aún así...-

-no te quejes mocoso, estamos igual.-

-¿Entonces porque no?-

Suspiro y envolvió al menor.-no te quiero lastimar, créeme que está es mi primera vez con un chico, no se que debo hacer.-

-tambien sería mi primera vez, y muero de ganas porque sea contigo.-

-te prometo que me voy a informar, quiero que sea especial, para ambos.-

-investiga está noche. Mis padres no volverán hasta pasado mañana, podríamos...-se quedó callado, enrojeció al darse cuenta de lo que estaba diciendo.

Levi sonrió encantado, le beso la frente y asintió.-bien. Te lo prometo. Mi pequeño travieso.-

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Mi profesor. «Shingeki No Kyojin.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora