Mi profesor. «Shingeki No Kyojin.»

Capitulo 9.

La noche llegó más rápido de lo que pensaron, Levi se dirigió a casa del castaño.

Cumplió lo que había prometido, toda la noche había leído e investigado cosas relacionadas al sexo entre hombres, quería disfrutar de ese momento pero sin hacerle daño a su pequeño niño.

Por otra parte Eren no había investigado ni leído nada, tenía la sospecha de que si leía algo podría traumarse o arrepentirse, había escuchado que dolía demasiado, pero confiaba en Levi y que esté lo cuidaría.

Escucho el coche estacionandose, bajo rápidamente y abrió antes de que siquiera el mayor tocará el timbre.

Sonrió y beso en la mejilla al menor.-hola. Traje algo para comer... Más tarde.-

-gracias.-

Dejaron las cosas en la cocina y subieron al cuarto, Eren había prendido unas cuantas velas, mismas que iluminaban la habitación.

El profesor vio a su pequeño acercándose, sonrió ampliamente y se acercó para comenzar a besarlo. Eren se dejó llevar, sintió como los besos pasaban de sus labios al cuello, mientras tanto el mayor comenzó a desnudarlo con delicadeza.

Unos cuantos pasos hacia atrás los hicieron llegar a la cama, con delicadeza acostó al menor, quién ahora estaba completamente desnudo, avergonzado intento cubrirse, pero Levi le tomo de las manos y las pego al colchón, teniendo una vista maravillosa de su niño.

-no te cubras, por favor.-hipnotizado, el castaño que quedó quieto. Levi comenzó a quitarse la ropa, provocando un sonrojo notable en el menor, pues el profesor vaya que tenía buen cuerpo.

Sintió las manos de Levi acariciando sus piernas, seguido comenzó a sentir los besos que recorrían las mismas.

Gentilmente separó sus piernas, se colocó entre ellas y con su mano comenzó a estimular al menor, este se estremeció ante el toque del mayor, quién movía ágilmente su mano, logrando llenar de éxtasis al menor.

Sintió como un dedo entraba a su cuerpo, fue incómodo, pero no doloroso, seguido de uno y otro más, cerró los ojos ante el placer que su maestro le daba.

Levi miraba encantado a su pequeño, estaba feliz de tenerlo a su lado, había sufrido tanto al perderlo que ahora estaba dispuesto a no soltarlo.

-¡Ngh!-se quejo Eren al sentir el vacío cuando el mayor retiro sus dedos.

-relajate. Solo confía en mí.-susurro seductor mientras se alineaba entre las piernas del menor.

Comenzó a introducirse suavemente, con una de sus manos sujetaba la cintura del menor, mientras que la otra mano se entrelazaba con la del castaño.

Eren reprimió el quejido que quería soltar, si dolía pero no demasiado, claro que el estímulo de los dedos no era el mismo que el sexo del maestro.

-¿Estás bien?-preguntó limpiando la pequeña lágrima que rodó por su mejilla.

Eren asintió, comenzó a sentir los movimientos del azabache, el dolor fue desapareciendo, el placer era mejor de lo que imaginaba, Levi era demasiado bueno.

Sintió que estaba por terminar, quiso contenerse pero fue imposible, se corrió manchando el pecho de ambos, avergonzado desvío la mirada.

Levi sonrió, aún sin terminar salió del cuerpo del menor, quién lo miro dudoso, pues Levi se acostó a su lado y simplemente lo abrazo, curioso miro el miembro del mayor, y sin pensarlo bajo su mano y comenzó a acariciarlo.

-¡Ngh! ¿Qué haces, mocoso?-

-no me molestes.-se removió un poco incomodo por el dolor de caderas, subió al cuerpo del azabache y comenzó a montarlo sin tener la mínima experiencia.

Levi miraba sorprendido al castaño, jamás imagino verlo en aquel acto, sonrió seductor y disfruto de la vista, el menor era maravilloso, sus movimientos eran exquisitos.

Levi sujeto dulcemente las caderas del menor, se acercó y comenzó a juguetear con sus pezones. El castaño soltó un pequeño gemido, abrazo al azabache y continuo con sus movimientos.

Sabía que estaba por terminar, así que tomo el miembro del ojiverde y comenzó a masturbarlo al mismo ritmo en el que él castaño se movía.

Desesperado, Eren busco los labios del azabache, quién correspondió el beso recibiendo pequeñas mordidas del menor.

-¡Ah!-terminaron al mismo tiempo, Eren cayó sobre el pecho del maestro, y este lo envolvió entre sus brazos con cariño.

Eren sonrió ampliamente, miro al azabache y lo beso, el mayor acepto el gesto, apretó al menor y se separó mirándolo con dulzura, admitía que últimamente mirar al castaño era su pasatiempo favorito.

-¿No me vas a preguntar si estoy bien?-

El mayor frunció el ceño creyendo que todo su esfuerzo e investigación se habían ido a la basura.-¿Qué? ¿Te hice daño?-

-no. Es que siempre lo preguntan en las películas.-

Levi no pudo evitar sonreír, se aferró con fuerza al menor y comenzó a besarlo suavemente por todo el rostro.-¿Estás bien?-

-mejor que nunca.-

★★★

Después de un cálido baño, ambos estaban disfrutando de la cena. Miraban una pelicula entre las cobijas cuando un mal pensamiento invadió al castaño.

Se preguntaba si las cosas siempre serían así, a escondidas. Por un lado estaban sus padres, no sabía cómo tomarían el asunto de que su hijo estuviera con un hombre, y peor aún mayor que él. Por otro lado estaba Mikaza, no quería fracturar aún más la relación que ambos hermanos llevaban.

Sintió el suave roce en su mejilla, curioso volteo hacia el mayor, quién lo miraba preocupado.-¿Qué sucede? ¿Te encuentras bien?-

-no es nada... No importa.-

Levi lo atrajo hasta su pecho, lo envolvió entre sus brazos y beso suavemente su frente.-confia en mi, mocoso. ¿Qué sucede?-

Sus manos se entrelazaron, Eren suspiro y miro hacia la nada.-¿Crees que siempre sea así? A escondidas. Estan mis padres y Mikaza.-

-lo solucionaremos.-

-¿Cómo?-se alejo del mayor y lo miro esperando una respuesta.-tal vez con mis padres no haya problemas, pero con tu hermana... Levi yo no quiero fracturar su relación.-

Sabía que su niño tenía razón, no lo admitía pero ese detalle también lo inquietaba, amaba a su pequeño pero quería estar bien con su hermana.

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