Mi nombre es Mahidevran soy la segunda mujer del príncipe suleyman aquella que fue apodada flor de primavera, soy aquella que tiene el favor de la Kadin Ayşe Hafsa y esta es mi segunda vida.
Mi día cambio después de lo que me dijo la Valide pues, aunque tenía que aparentar felicidad estaba asustada incluso la Valide pidió pasar el resto del día con Mustafá.
Lo cual me limito en muchas posibles excusas pues en Manisa para no ir con el Sultán usaba a Mustafá como escudo.
Pero no importaba tenía que encontrar una forma para evitar ir con el Sultán.
-Mi señora se encuentra bien? -pregunta Gülşah pues nos encontrábamos en mi habitación almorzando.
-Si Gülşah, como han ido las cosas en el harem? -intento cambiar el tema.
-Uy todo un alboroto mi señora-dice con una sonrisa.
- ¿Ah, Por qué?
-Hay mi señora por esa Hatun pelirroja es extremadamente molesta--dice cambiando su tono de voz haciendo notorio su desagrado--el día de hoy ya se ha regado la noticia de que usted irá a los aposentos del sultán ella hizo un escándalo.
-Espera cómo? ¿Como es que la gente sabe que iré con el Sultán? - pregunte algo sorprendida.
-Por la Valide mi Kadin todos saben que usted cuenta con su favor y ella ha pedido que para esta noche se preparen sus bocadillos favoritos para que pase una agradable noche con el Sultán.
-Y eso que tiene que ver con Hurrem?
-Todo mi señora las chicas del Harem le hicieron comentarios sobre que usted era y siempre será la favorita y ella enloqueció.
*Así que eso pasó* pienso la verdad era que desde que llegué no le he prestado la atención que le prestaba antes a la pelirroja se me había olvidado de que ella era como una pequeña llama que con cualquier cosa explotaba.
Después de la charla con Gülşah me había quedado un poco pensativa tenía una idea para evitar mi noche con ese hombre solo deseaba que todo pase como yo deseaba y por supuesto recordaba.
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Llegó mi hora Me dirigí con Gülşah a asearme a los baños del harem y gracias a Allah todo iba como deseaba.
Me preparaba, y di las indicaciones Gülşah rezando que todo saliera bien.
Narrador omnisciente
Mientras la Kadin se dirigía hacia los aposentos del sultán muchas personas las veían pues poco se había visto a la madre del primer hijo del sultán desde que llegó pocas fueron sus visitas al harem.
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Caminaba con gracia y portando un vestido verde que hacía justicia a su apodo de la Kadin más bella del harem.
Todo iba bien según la noche todo se encontraba en calma hasta que cierta mujer hizo su entrada.
-Quítate!!! Tengo que ir con el sultán- decía con cierto enojo una pelirroja a los guardias del harem
-Hurrem por favor cálmate no tienes que molestar al sultán- trataba de calmar la kalfa Firial
