norman r. ๑ gangster

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. . . contiene; mención de tratas de personas.

ও one-shot
ও los personajes son mayores de edad.

・:*:・゚'☆


‎ . . . donde Norman queda perdidamente embobado por la dulce Nika.
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Norman Reedus, mano derecha del mafioso más temido en Italia, Jeffrey, se encontraba en una subasta clandestina en un oscuro salón. Aunque nunca había participado en estas compras, siempre acompañaba a su amigo de toda la vida. Esa noche, la atmósfera era eléctrica, llena de murmullos y miradas ansiosas. Sin embargo, la presentación de la próxima chica cambiaría todo.

El presentador, con un tono pomposo, anunció a Nika Hale. Al instante, la atención de todos se centró en ella. Su belleza era cautivadora, pero lo que realmente la hacía especial era su belleza y la chispa de desafío en su mirada. Norman se sintió intrigado de inmediato.

Jeffrey, a su lado, notó el cambio en la expresión de su amigo.

—Te gusta, ¿eh? —dijo con una sonrisa astuta.

Norman desvió la mirada, tratando de disimular su interés, pero era demasiado tarde. Jeffrey, siempre perspicaz, había captado el momento.

—Vamos, Norman. Nunca has comprado a nadie, pero esta chica es diferente —Jeffrey se inclinó hacia él, su voz baja y persuasiva— ¿Qué te detiene?

Norman sintió que su corazón latía más rápido. No era solo su belleza, sino también la forma en que se enfrentaba a la situación. Algo en ella lo atraía de una manera que no podía ignorar.

—No es solo un juguete, Jeffrey —respondió, tratando de mantener la calma— Es una persona.

—Y eso es precisamente lo que la hace interesante —Jeffrey sonrió, casi como si hubiera encontrado un nuevo juego— Imagina lo que podrías hacer con alguien como ella a tu lado.

La subasta continuó, y cada palabra de Jeffrey hacía que la tentación de participar creciera. Nika seguía de pie, observando la sala con un aire desafiante, como si supiera que su vida estaba en juego.

—Mira cómo te mira —dijo Jeffrey, inclinándose hacia él — Ella sabe que hay algo especial en ti.

Norman no pudo evitarlo; miró a Nika nuevamente. Sus ojos se encontraron por un instante, y en ese momento, sintió una conexión. El aire se cargó de promesas no dichas.

—¿Y si no la trato como un objeto? —preguntó, sintiendo que el riesgo lo atraía aún más.

—Eso es lo que la hace un desafío —Jeffrey estaba entusiasmado— No tienes que ser como todos los demás. Muéstrale que eres diferente.

El presentador empezó a abrir la puja, y el precio comenzó a elevarse. Norman, sintiendo que se le escapaba la oportunidad, tomó una decisión.

—Está bien. Voy a hacer una oferta.

Jeffrey sonrió, satisfecho.

—Eso es, amigo. Hazlo por ti, y por ella.

Norman levantó la mano, y un silencio expectante llenó la sala. Nika lo observó con curiosidad, y por un momento, el mundo exterior desapareció. No solo estaba comprando a una mujer; estaba tomando una decisión que podría cambiar su vida para siempre.

— Diez Mil euros —anunció Norman, su voz resonando con firmeza.

La sala estalló en murmullos, pero él solo tenía ojos para Nika. Jeffrey lo miró con aprobación, y Norman sintió que había cruzado una línea que no podía retroceder.

Nika sonrió, y en ese instante, supo que había hecho la elección correcta.

・:*:・゚'☆

— Así que conoces a Jeffrey desde los ocho.

Norman mira Nika — Sí, hemos sido amigos desde pequeños — suspira.

— Eso es muy lindo — sonríe. Ella estaba acostada en el sofá de la oficina de Norman, mientras que el ojiazul se encontraba en su escritorio — Norman...

— ¿Sí, linda? — el mayor mantiene su mirada en lo que escribia en su libreta.

— ¿Por qué...? — suspira — ¿Por qué me compraste? — Norman la mira — Es decir he estado un mes aquí contigo, pero no sé cual es mi rol aquí, se suponía que estaba subastada para... Ya sabes — se avergüenza.

— Yo... — ni él realmente sabía con exactitud porque tiene a Nika — No lo sé, me pareciste linda y me llamaste la atención — vuelve su mirada en lo que estaba escribiendo.

Nika sonríe — Sí, Norman, pero... — sus mejillas se sonrojan — Era una subasta de virgenes, tú sabes la clase de gente que hay allí, mis compañeras y yo nos preparamos mentalmente para eso.

Norman lo entendió, Nika le estaba preguntando porque todo este mes él no ha tenido sexo con ella.

— Nika, yo no te compré para satisfarme, es verdad me llamaste la atención tenía esa necesidad de sacarte de allí.

— ¿No soy lo suficiente hermosa? — preguntó com un puchero. Norman se levantó y se acercó hasta la hermosa chica.

— Hey, nena — su voz se escuchaba relajada — Mírame — se sienta a lado de Nika — No vuelvas a decir algo como eso, tú eres la chica más hermosa que han visto mis ojos — el corazón de Nika al escuchar esas palabras, laten sin parar una sensación hermosa e inexplicable para ella se llenó en su cuerpo.

— Es que... Como tú... No quieres.

Norman la interrumpe — Lo sé, nena. Pero tú también eres una persona, no te usaré como un juguete sexual — toca la mejilla de ella.

—Yo fui criada para eso Norman — murmura.

— Hey, no. Desde que te ví y este mes que te he conocido me haz demostrado que eres una persona inteligente, fuerte, carismatica y muy ruda — ríen ambos con lo último — No te permito que vuelvas a decir que tú solo sirves para sexo.

Cada palabra que Norman decía, Nika se sentía morir. Ella era afortunada de que su comprador haya sido un hombre como él, sus compañeras lo más probable es que esten ahora satisfaciendo a sus compradores, pero ella no ahora estaba junto a Norman leyendo un libro mientras él sin darse cuenta le daba mimos, ella eran tan afortunada de terminar esta manera. Se abrazó más al pecho del mayor para continuar la lectura. Terminando durmiendose en el pecho de este.

Norman al darse cuenta que Nika quedo rendida. Toma de ella y la lleva al cuarto de ambos, ya que los dos dormían juntos a pesar de no haber nada.

— Mientras este yo nunca te pasará nada — susurra y besa su frente con un pequeño beso.

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n/a: soy re mala con los titulos, pero mas que nada es para organizar las historias o ubicarlas :p





େ  ۫  ۪ one shot  𐙚  daryl dixon & norman reedus Donde viven las historias. Descúbrelo ahora