"No hay que tener miedo de lo que se conoce, sino de lo que se ignora."
~ Julio Cortázar"¡Auxilio, por favor!
¿Hay alguien ahí?"Min-Jun
—Llevan dos meses en coma. ¿Crees que vayan a despertar?
—Ojalá. Ella no ha dejado de venir ni un solo día.
—Pobre, ya se comienza a notar.Las personas que estaban a mi alrededor no paran de hablar. Una luz cegante cerca de mis ojos, o eso parecía; el olor a medicina, al que cualquier niño le huye, fue lo que me hizo caer en cuenta de que todavía estaba en el hospital. Fui abriendo mis ojos lentamente, tratando de acostumbrarme a la luz que había en mi habitación. Por lo que oí, llevaba dos meses en coma. ¿Será que mis hermanos están igual que yo? Fue lo primero que llegó a mi mente al recobrar la conciencia.
Mientras recorría lo que debe ser la sala de descanso de mi habitación, la vi... Ella estaba cambiada desde la última vez que cruzamos palabras, su vientre un poco abultado. Me miró y, sin dudarlo ni un segundo, corrió hacia mí. Me abrazó; el olor a vainilla inundó la habitación y, con ella, llegó la alegría y razón de mi vida: mi novia, mi amante, la mujer de mi vida, Eun...
—Al fin despertaste, mi amor. No sabes lo angustiada que estaba.
Las palabras de Eun llenaron mi alma.
—Te amo. —Fue mi declaración.De sus ojos marrones cayeron varias lágrimas, no sé si de alegría. El tiempo que estuve en el submundo no dejé de pensar en ella ni un segundo. Siempre recordaba el momento en el que me dijo que sería padre; fue el día más feliz de mi vida. Cuando le propuse matrimonio, ella no dejaba de preguntarme si estaba soñando, y lo culpable que me sentía al dejarla sola. Saja lo sabía. Nadie me quita de la mente que nos ofreció ese "favor" a nosotros porque no podíamos negarnos. No podíamos negarnos a volver y ella lo sabía muy bien.
Sin darme cuenta, ya me había perdido en los recuerdos y el olor de mi amada; mi mano derecha acariciaba el vientre de Eun, y la izquierda reposaba en su cabello, cuando se escuchó un toque en la puerta.
—¡Buenas, buenas! Llegó por quien lloraban.
Mi hermano menor siempre se hacía notar.
—Wook, deberías estar descansando. —Le dije mirando con disgusto.—¿Qué te digo? Mi querido hermanito, alguien no se preocupó por sus hermanos y pensé que seguías durmiendo como Caperucita Roja.
Wook y sus comentarios fuera de lugar.
—Era la Bella y la Bestia. —Dijo Hyun-Woo mostrando su abundante melena en la puerta; vestía unos pantaloncillos de flores y una camisa holgada.—¡Par de imbéciles! Era la Bella Durmiente. —Respondí y las risas no tardaron en llegar.
—Min-Jun, mi hermoso y precioso hermano, ¿cómo te encuentras hoy en día? —Me pregunta Hyun haciendome ojitos.
—Hyun-Woo, ¿por qué no estás descansando?
—Descansaré cuando esté muerto hermanito. —La vista de Woo se fijó en dirección a Eun, dándose cuenta por primera vez de que estaba presente. Lo noté; podía ver cómo dudaba en hablarle.
—Cuñada, ¡qué hermosa estás! ¿Cómo está mi sobrina o sobrino?Se escuchó un suspiro un poco pesado por parte de Wook.
—El bebé está bien, Hyun-Woo.
Noté un poco de brusquedad en las palabras de Eun. Ella y mis hermanos nunca se han llevado bien. La verdad es que con el que más habla es con Hyung, y solo es para preguntarle por mí.
—Oye, amor, voy a salir a tomar aire un rato. Te dejo para que hables con tus hermanos.—Está bien, ten cuidado. —Fue lo único que respondí. Verla irse me dejó un vacío en el alma; no quería...
—Deja de mirarla así, pareces bobo. Ya tengo suficiente con Hyun viendo a Saja como si fuera la octava maravilla.Las palabras de Wook me sorprendieron. ¿Hyun y Saja?
—¿Te gusta Saja? —le pregunté directamente a Hyun.
—No, no me gusta. ¿Cómo me va a gustar alguien con más de 500 años?Me respondió Hyun, pero desvió la mirada; eso quería decir que estaba... ¿mintiendo?
—Y que no tiene pulso, que no se te olvide.Wook no se pudo ahorrar ese detalle.
—Y que me deben un favor, que no se les olvide.La voz de Saja se escuchó en la habitación.
—¿Pero qué mierda? —escuché decir a Wook.Todos miramos hacia diferentes lugares de la habitación, pero ella no estaba.
—Saja, ¿estás ahí?
—No seas imbécil, Wook. No estamos jugando a la ouija.
—Pero sí estoy hablando de un espíritu o algo así, Hyun.Creo que escuchar la voz de Saja solo fue una mala pasada de nuestras mentes por estar tanto tiempo en ese lugar.
¿Dónde estará ese demonio?
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Los Hermanos Kim: Almas en deuda
Mystery / ThrillerEn un fatídico accidente de tránsito,las almas de los hermanos Kim, quedan atrapadas en el submundo donde no hay registros de su llegada. Ante la desesperación, la enigmática mensajera de las almas les ofrece una segunda oportunidad: volver a su vid...