28

2.8K 166 1
                                    

Capítulo 28. Maratón 1/3
{____}
-Amor, iré a comprar algunas cosas. –le comenté mientras él veía tv sentado en el sofá.
-Te acompaño. –dijo levantándose.
-No, en serio, quiero... prefiero ir sola. ¿Te enojas?
-No, claro que no. Pero... en serio no quieres que te acompañe?
-Si, en serio. –sonreí.
Tomé mi bolso y salí. En verdad sí tenía que comprar pero también debía y tenía que despejar mi cabeza y estar un rato sola.
-Perdón... -susurré al chocarme con un chico- Jus... Justin. –lo miré y aclaré mi garganta.
-Hola. –dijo seco mirándome- ¿Necesitas algo? Estoy ocupado.
-Yo...
-No, no importa, me tengo que ir. –pasando por mi lado, continuó su camino. Necesitaba decirle que a él lo necesito, que lo amo, que no he podido olvidarlo. Sí, me estaba delatando a mi misma en mi mente. No podía seguir con toda esta maldita mentira.
-¡Justin! –le grité y corrí hacia él.
-¿Qué ____? –giró para mirarme.
-Perdóname. –Podría haber salido otra palabra mejor, alguna frase o siquiera todo lo que me decía a mí misma.
-¿Perdonarte? JA JA JA. –rió falsamente- ¿Perdonarte de qué? ¿De haberme dejado ahí como un estúpido? ¿Por haberte defendido cuando no querías nada de mí? ¿Por eso? ¿No era que no querías verme más? ¿Por qué nos reencontramos ____? ¿Por qué volviste a Canadá? ¿Por qué te sigo amando como si no hubiera mañana? ¿Por qué me gustas de esta manera? Porque yo soy estúpido. Un estúpido que intento, intento para nada, para conseguir tus rechazos e insultos. ¿Ahora tienes el descaro de venir a pedirme perdón? No quiero tu perdón, ____. Ya no somos nada, y si no somos nada, para que me pides perdón? No tengo nada por lo que perdonarte. Ahora sí, por favor, déjame seguir. Estoy apurado. –sin dejar que yo hablara, siguió su camino.
Lágrimas habían inundado mis ojos. Sus palabras no me podían haber llegado tanto. ¿Él me la había dicho? Le he hecho más mal del que me imaginaba. Él no es el estúpido, soy yo. En primer lugar, yo nunca debí haberlo dejado tres años atrás, nunca debí haber desconfiado de él, pero... eso es pasado, muy pasado y ambos tenemos otra vida. Necesito encontrar una forma para remediar todo... si es que puedo remediarlo.
Había caminado hacia el mercado, ya que debía volver a la casa con bolsas o Edward 'sospecharía' de algo. Agarré una que otra cosa, hice la cola para pagar y mientras salía me encontré con Jessica.
-¡____! –dijo emocionada abrazándome- Perdóname yo....
-Shh... -traté de sonreír- estamos bien, si? No tengo ganas de discutir o de nada.
-¿Qué... que pasa? –hizo puchero haciéndome reír.
-Na... nada. –hice una mueca.
-¿Nada? Seguro, seguro. –me tomó del brazo- Vamos a tomar algo y me cuentas, si? –asentí y juntas caminamos hasta el café más cercano, nos sentamos y pedimos nuestros cafés. Hacía mucho que no nos veíamos después de nuestra pelea, le conté todo lo ocurrido hasta las últimas palabras de Justin hace unas horas.
-¿Él te dijo eso? Yo lo mato, lo mato. –dijo arremangando su chaqueta.
-No, Jessica, me lo merecía.
-Pero ____, ¿tu lo amas?
- Ya está, debo salir de esta mentira.... –suspiré- Lo amo, lo admito. Jamás he podido olvidarlo y todo este tiempo que he tratado de hacerlo, no he podido.
-¿Y por qué no se lo dices?
-Lo lastimé bastante, con estas palabras, ya sé que él dejó de amarme.
-¿Piensas que te puede dejar de amar de un día para el otro? ¿Cómo sabes que ha dejado de hacerlo?
-Yo sé.
-No, tú no sabes nada. ¿Acaso te dijo que no te ama?
-No me lo dijo directamente, pero sus palabras lo decían.
-No es lo mismo, ____. Déjame hablar con él.
-¿Hablar tu con él? Jajajaja. No, no y no.
-Pero ____ tal vez yo...
-Jessica, en serio no. –la miré y di otro sorbo a mi café.
-Está bien –suspiró disconforme.

(...)

{Justin}
Estaba en mi casa viendo TV cuando tocaron el timbre.
-¿Quién carajos es? –suspiré y me paré a abrir- Jessica.
-Hola Bieber, permiso. –pasó adentro-
-Claro, pasa. –dije irónico cerrando la puerta y nos dirigimos hacia el sofá.
-¿Qué es eso de andar insultando por ahí a mi amiga?
-¿Qué?
-Sí, no te hagas el tonto porque no te sale.
-¿____?
-¿Qué otra amiga mía conoces? Piensa Bieber, piensa! –suspiró- Eres más idiota de lo que pensaba.
-Ehhh... -levanté las manos en defensa- si vas a insultarme, te invito a retirarte.
-Si vas a ser tan bobo, te invito a retirarte.
-Es mi casa.
-¿Y a mi qué? –rió- Ya, en serio estoy aquí para darte una buena patada.
-Se lo merecía. –suspiré-
-¿Se lo merecía? ¿Estás loco?
-Por ella. –susurré-
-¡AJÁ! La amas.
-No, nada que ver.
-No puedes dejar de amar a alguien y menos a ____ en dos días.
-Sí que puedo.
-No.
-Sí.
-Estás loco por ella, Bieber. –suspiró contenta.
-Sí, estoy loco por ella y la amo. ¿Eso querías escuchar?
-Siempre obtengo lo que quiero. –dijo victoriosa-
-Pero ella no me ama.
-¡Claro que sí, idiota! Me lo dijo a mí. –se señaló-
-A mi me dijo que no me ama.
-A mi me cuenta TODO y cuando digo TODO es TODO, y me dijo que te ama, así que créeme o créeme, no tienes opción.
-¿Y?
-¿Cómo que y? ¡Ella te ama pedazo de animal! Ve por ella, dile esas cosas tiernas que tú le dices y ella te dirá todo cuando vea que tú la sigues amando y se saque la idea loca de que ya no lo haces.
-¿Amas insultarme, no?
-Lo hago con cariño.
-Seguro, seguro. –reí-
-¿Ves como te ha subido el ánimo?
-¿Ah?
-Sí, desde que dije que ____ te ama. –traté de sonreír pero fue imposible.- Cuando entré estabas decaído y cuando te dije eso, tu ánimo cambió. –sonrió-
-Bueno, es verdad.
-¿Por qué no vas y le dices todo?
-Está con Edward.
-Nop, esta noche saldrán todos pero ___ no quería ir, es más me invito a ver una película pero tengo... otros planes, pero tú puedes ir por mí. –sonrió-
-Gracias. –le dije y la abracé-
-De nada. Ahora arréglate y ve por ella, campeón. –reí- ¿Qué?
-Sonó gracioso.
-¡Ay Dios! –tomó el control y empezó a cambiar de canales- Córrete. –dijo corriéndome para poder acostarse.
-Acuéstate tranquila. –reí y me fui.

La Estudiante de Intercambio Justin Bieber & TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora