Anastasia:
—¿Disculpa? —Pregunto ofendida
—Mi pequeña es un poco tímida —Habla papá en italiano poniendo una mano en mi espalda —Saluda, Cariño
El apretón que me da me pone Tensa y con los dedos me quito los mechones rubios que caen por mi frente
Cuando lo veo, no puedo evitar fijarme en su cabello negro y liso que cae sobre su frente en un ángulo perfecto. Sus ojos azules me impactan, son como dos piscinas de profundidad infinita
Lleva un conjunto negro que resalta su figura imponente. Unos pantalones cargo negros de estilo tactical, con bolsillos laterales y un cinturón negro, que se ajustan perfectamente a sus piernas fuertes.
Una camisa negra de manga corta, con un cuello en V y un diseño minimalista, cubre su torso. Un chaleco negro sin mangas realza sus hombros anchos y su pecho definido.
Sus botas negras de cuero completan el look con un toque rústico y poderoso. Un cinturón negro de cuero con una hebilla negra y un reloj negro de cuero en su muñeca izquierda añaden un toque de elegancia masculina.
Su rostro es una obra de arte: nariz recta, boca sensual y bien definida, barbilla decidida... Cada rasgo es una declaración de confianza y seguridad. Me siento como si estuviera frente a un escultor griego, perfecto y sin defectos.
Hay algo en él que irradia poder y control, algo que me hace sentir pequeña y vulnerable. Tomo una inspiración profunda, en un intento desesperado por calmar el latir desbocado de mi corazón
—Es un placer conocerlo, señor. —Me las arreglo para devolverle la sonrisa al castaño detrás de el
—Aburrida. —inclina su cabeza hacia la izquierda con curiosidad, pero su expresión sigue siendo inescrutable. —Dante, entrégale el informe.
Ordena y me sorprende como todos a su alrededor parecen gatitos asustados esperando que, de una orden para cumplirla, un castaño ojos azules entra en mi campo de visión entregándome un cuaderno totalmente negro
—¿Puedo preguntar qué es? —trato de mantener una expresión casual, pero no estoy segura de lograr lucir despreocupada.
—No, no puedes. —Se encoge de hombros el pelinegro y levanto mis cejas asombrada por su nivel de grosería
—Es un informe de tus nuevas responsabilidades como prometida y esposa de Massimo Lombardi —Me explica Mattia que al parecer es el único amable de todos —Además de las cosas que no le gustan y que no podrás hacer al casarte
Mi vista se posa fugazmente en el reloj de la mano de mi prometido, y la frustración se apodera de mi cuerpo cuando me percato de que solo han pasado diez minutos
—Puedes devolvérselo, voy a ser su esposa, no su esclava. No necesito reglas para saber cómo comportarme. —sonrío, pero no quiero hacerlo en realidad. —Si quería una mujer que se sometiera a sus reglas, debería haberla buscado en otro lugar.
Una sonrisa suave se dibuja en los labios de Matteo y todos se quedan en silencio durante un largo rato en lo que Matteo vuelve a agarrar el cuaderno
—Tienes dos semanas para saber todo lo que ser una esposa conlleva y también...
El ladrido de un perro hace que sonría agachándome para recibir a mi pequeño Yorkshire terrier
—¡Klaus! —Empieza a ladrar a los visitantes y me levanto con él en brazos —Te presento a nuestros nuevos carceleros; él es Mattias alias mi futuro cuñado, también está este señor que parece que tiene hemorroides....
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Bajo tu Dominio
AcakRecuerdo la primera vez que lo vi. Me sentí confundida, porque no era la persona que buscaba. No se parecía en lo absoluto. Pero algo en él me llamó la atención. Su mirada era intensa, como si pudiera ver más allá de mi superficie. Me sentí desnuda...