El villano enfermo solo quiere vivir

18. Examinar

Zhu Tong también se asustó por su movimiento repentino y subconscientemente quería retroceder.

"No te muevas", dijo de repente Shao Ming.

Su voz era muy suave, definitivamente no quería hacerle daño.

Poco a poco, Zhu Tong se relajó, pero todavía estaba en silencio.

Ya no podía moverse, había una pared detrás de él. Shao Ming ya había agarrado su tobillo y lo había movido ligeramente.

Zhu Tong intentó mover las piernas instintivamente, pero la fuerte punzada de dolor le impidió moverse.

Shao Ming hizo una pausa, levantó la cabeza y dijo: "¿Te duele?"

"..."

El adolescente más alto definitivamente estaba tratando de calmarlo pero aún lucía muy intimidante. Mirándolo directamente a los ojos, Zhu Tong se quedó atónito por un momento, luego asintió honestamente: "Duele".

Shao Ming se levantó inmediatamente y dijo: "Vamos al hospital".

Más allá de esta burbuja privada entre estos dos, los demás observaban absortos. Luo Suo observaba estupefacto a Shao Ming agacharse para ver los pies heridos de Zhu Tong.

Fue asombroso, sin duda. Pero al mismo tiempo, ¡le pareció que esa escena era muy hermosa!

-Pero también un poco raro.

Al ver que sus oponentes se pusieron de pie, Luo Suo rápidamente volvió a sus sentidos y dijo apresuradamente: "Ming-ge, ¿qué debemos hacer?"

Shao Ming pareció pensar en algo. Se giró para mirar a Yuan Shaozhou, que estaba siendo ayudado por sus compinches y que en ese momento se estaba arreglando el cabello avergonzado. Sus labios se curvaron en una sonrisa burlona y su voz estaba llena de sarcasmo: "Oh, ¿el joven maestro Yuan está pidiendo otra paliza?"

Yuan Shaozhou: "..."

"Ahora, ahora, ve a ver al jefe y acuerda la indemnización. No es fácil para una pequeña empresa".

-Y la policía vendría pronto.

El dueño del restaurante ya estaba temblando fuera de la sala privada. Al escuchar las palabras justas de Shao Ming, no se conmovió... o más precisamente, estaba demasiado asustado para moverse.

Yuan Shaozhou miró a Shao Ming y sintió la herida en su espalda. Apretando los dientes, gritó: "¡Te arrepentirás de esto!".

Shao Ming le dedicó una sonrisa significativa.

Mientras Shao Ming ayudaba a Zhu Tong a salir del restaurante, miró hacia atrás. Luo Suo dijo que este restaurante era nuevo, ¿verdad? Un local tan recién inaugurado que ya había tenido que sufrir este tipo de desastre.

Ser propietario de un negocio debe ser difícil.

Zhu Tong prometió interiormente pedirle al tío Liu que le diera una compensación al propietario más tarde.

En este sentido, el dueño de la tienda recibió tres compensaciones después de que este asunto terminara. En ese momento, inexplicablemente, se dijo a sí mismo: "¿Estos tipos volverán a pelear? Tal vez debería darles un lugar para que se enfrenten..."

Por supuesto, el joven maestro Zhu no sabría nada de esto.

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Hospital, clínica ortopédica.

Una joven médica que llevaba gafas sostenía en la mano una radiografía "recién horneada" y miraba pensativamente a las dos personas sentadas frente a ella.