Tomamos un café?

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SIEMPRE TE AMARÉ...
Escrito por Chus García García
Capítulo 2

Tomamos un café?

París 1957

P. Robert

Llevaba algo más de dos meses en Francia y me encontraba muy a gusto en la Base aérea de Chaumont. Había hecho nuevos amigos, tanto franceses como americanos y veía que mi estancia aquí iba a ser muy divertida pues aparte de la instrucción militar y las clases del Comando estratégico, siempre estábamos de bromas y buen rollo.
Mis amigos más cercanos eran Andrew y Paul de la parte americana pues vinieron a la par que yo y enseguida hicimos conexión, pero también he hecho amigos franceses como Alain, Pierre y Jean, los seis compartimos box y hemos hecho un escuadrón, nos llaman el escuadrón Bombarderos y nos hace mucha gracia a los seis.

En la fiesta de la Embajada tanto Andrew como Paul se dieron cuenta de mi interés por Diana y no paran de burlarse de mí y yo paso! Lo único que quiero es volver a ver a esa morenaza guapísima y no sé cómo ponerme en contacto con ella. El día de la fiesta estuvimos juntos bailando y charlando pero no se me ocurrió pedirle un tfno de contacto hasta que me dí cuenta cuando ya se había ido con su amiga y tres chicas más. Un coche vino a recogerlas y llevarlas a la Residencia de estudiantes.
Lo comenté con mis amigos y Alain se rió...
- No te preocupes amigo, que yo tengo el tfno de allí, mi hermana Edith también se aloja allí, espera que te lo traigo...
En eso que se va y ya siento las risas burlonas de los otros!
- Preston se ha enamorado jaja!
- Ten cuidado que es una trampa!!
- Nenaza!!
Así una detrás de otra hasta que llega Alain con el tfno, me lo da y voy raudo a una cabina que tenemos en los pasillos.
Llamo y pregunto por Diana Winter, si por favor la pueden avisar, cuando me dicen de parte de quien me quedo en blanco y solo se me ocurre decir su hermano...
Al cabo de un rato siento su voz...
- Charly, eres tú? Pasa algo en casa?
- Diana, soy Robert Preston, el teniente, perdona por lo de tu hermano, no se me ocurrió otra cosa para que te avisaran...
- Vaya con el Teniente! Que susto me has dado! Que quieres?
- Verte, quiero verte, la otra noche me supo a poco y quiero conocerte un poquito más...
Siento un silencio que me hiela, espero un poco...
- Ahora estoy con las clases y no puedo...
- Y mañana? Es sábado y tengo el fín de semana libre... POR FAVOR... DÍ QUE SÍ...
Vuelvo a sentir el silencio...
- Está bien... donde quieres ir?
- Dime donde quieres ir tú, tomamos un café?
Oigo como suspira, ahhh es que me la como!
- Conoces el Café Parisien?
- Sí, he ido alguna vez con los compañeros, a que hora quedamos? A las seis te va bien?
- Vale, a las seis, la Residencia la cierran a las nueve y media, así que tenemos tiempo...
- Perfecto! A las seis te espero! Gracias Milady!
- Hasta mañana Teniente...
Cuando colgamos estoy eufórico! Mañana veré a mi Milady! No sé que me pasa con esta chica, lo único que sé es que tengo que ir poco a poco con ella, es distinta a las demás...

Al día siguiente junto a mis amigos cogemos un autocar que nos proporciona la Base y nos vamos a París, una vez allí,  ellos se van por su cuenta y yo me dirijo al Café Parisien.
He llegado pronto lo sé! Pero lo prefiero, así me tranquilizo un poco, parezco un adolescente! Ni me reconozco!
Cuando la veo venir tan puntual y tan bonita mi corazón se acelera...
- Hola Diana, que tal?
- Hola Teniente, ya no soy Milady?
Ambos reímos por la pequeña broma.
- Siempre serás mi Milady... entramos?
Entramos y busco una mesa para dos, nos sentamos...
- Que quieres tomar?
- Un café con leche y un croissant, me encantan! Los has probado? Son mi perdición desde que llegué a París...
- Pediré lo mismo, no he tenido ocasión de probarlos, en la Base nos sirven desayunos americanos y cuando he venido aquí solo tomo café.
- Pues no sabes lo que te pierdes!
Mientras llega nuestro pedido, no hago más que mirarla...
- Que me miras tanto Teniente? Tengo algo en la cara?
- Sí... unos ojos preciosos y la sonrisa más bonita del mundo...
Veo como se ruboriza y sonrío,  hasta para esto es especial...
- Quiero saber todo de tí, lo que te gusta y lo que no, tu música favorita, tu comida favorita... TODO!
- Pides mucho Teniente y a cambio que obtengo?
- Saber todo de mí pero empieza tu primero...

Y así me cuenta que es de Virginia, que le encantan los animales, en especial su caballo Trudy pues le echa de menos, que le encanta el arte y el diseño, que se siente muy bohemia a pesar de su status social, abre su corazón de una manera espontánea que me encanta y no puedo evitar babear...

- Ahora te toca a tí...
Le cuento que soy de New York, concretamente de Manhattan, que me encanta volar y las motos, de hecho tengo una Harley Davison que dentro de unos dias recibiré, pues mis padres me la enviarán por avión para así tener más libertad de movimiento aquí en Francia.
- Vaya! Una Harley Davison nada menos!
- Sí... es mi niña, bonita, pero no tanto como tú... te gustaría montarla conmigo?
- Montar en tu moto? Nunca he montado en una, mis hermanos dicen que eso es cosa de chicos, te lo puedes creer?
- Vaya con tus hermanos! Pues cuando la reciba estás invitada y es más, te enseñaré a conducirla, así se lo restregas en las narices.
- Eso sería genial! A cambio yo puedo llevarte al barrio Bohemio y enseñarte el arte que hay en París...
- Me encanta el plan! Tienes algo que hacer mañana? Puedo llevarte a un sitio que te va a encantar.
- Adonde?
- Fíate de mí, será una sorpresa...
- No sé porqué pues apenas te conozco, pero me fío de tí y estoy muy a gusto contigo...
La miro con profundidad, me ha gustado muchísimo su comentario.
- Yo también estoy muy a gusto contigo Milady...

Como tengo calor, me quito la chaqueta militar, me arremango y disfrutamos de los croissant que por cierto ella tiene razón! Están buenísimos!
Cuando salimos de allí vamos paseando hasta llegar a un parque cercano y  nos sentamos en un banco aprovechando los últimos rayos de sol.
Estamos en silencio hasta que dice que se tiene que ir, que no quiere llegar tarde a la Residencia, nos levantamos y la cojo de la mano...
- Puedo? No quiero soltarte Milady...
- Ni yo tampoco Teniente...
La acerco más a mí...
- Me prometí a mí mismo que iría despacio contigo pero me está resultando difícil, me gustas mucho...
- Tú a mí también...
Me acerco a sus labios y los beso muy dulcemente...
- Me vuelves loco Milady...
- Calla Teniente y bésame...
La vuelvo a besar y cada vez con más pasión, estoy en el PARAISO...

Continuará...

Siempre te amaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora