Harry y Draco se encontraban en la habitación de San Mungo, en un ambiente tranquilo y lleno de amor, mientras miraban con adoración a la nueva integrante de su familia. La bebé, Adhara, dormía plácidamente en los brazos de su madre, envuelta en una suave mantita. Sus pequeños dedos se movían de vez en cuando, y su respiración era suave y rítmica. Harry no podía dejar de sonreír mientras observaba a su hija, y Draco, a su lado, las miraba con un orgullo inmenso.
—Es perfecta —murmuró Harry, acariciando con delicadeza
—Lo es —coincidió Draco, inclinándose para besar la frente de Harry—. Y tú eres increíble. Gracias mi vida, por darme este regalo.
De repente, un suave golpeteo en la ventana de la habitación llamó su atención. Ambos miraron hacia allí y vieron las caras emocionadas de sus amigos y familiares a través de la ventana, esperando conocer a la pequeña. Draco se levantó con una sonrisa y abrió la puerta, permitiéndoles pasar.
Los primeros en llegar fueron Sirius y Narcisa, seguidos por Hermione, Ron, Theo, Blaise, Enzo, Astoria, Luna, Ginny y Remus. Todos se acercaron con rostros llenos de emoción, felicitando a los nuevos padres. La habitación se llenó de risas y murmullos alegres mientras admiraban a la pequeña.
—¡Felicidades, Harry! —exclamó Hermione, abrazando con cuidado a su amiga—. Es absolutamente preciosa.
—Draco, es una verdadera princesa —dijo Theo con una sonrisa, mientras Blaise y Astoria miraban con ternura a la recién nacida.
—¿Cuál es su nombre? —preguntó Luna, con sus ojos brillando de curiosidad, generando expectación en los demás.
Draco, con una expresión de orgullo, tomó suavemente a la bebé en sus brazos y se volvió hacia todos. —Les presento a nuestra princesa: Adhara Narcisa Malfoy Potter.
Un murmullo de aprobación recorrió la habitación, pero fueron las reacciones de Narcisa y Sirius las que más resaltaron. Narcisa se llevó una mano al corazón, sus ojos brillando con lágrimas de emoción.
—Draco, Harry... Estoy profundamente conmovida. Es un honor que lleve mi nombre —dijo mientras se acercaba con cuidado para acariciar abrazar a su hijo y a su nuera, que gustosamente la entregó a sus brazos para que la tomara.
Sirius, a su lado, sonriendo con alegría, sus ojos llenos de felicidad. —Y "Adhara", como la estrella en la constelación del Can Mayor, igual que "Sirius". Es un hermoso honor
Harry asintió, sonriendo con ternura. —Queríamos que ambos nombres tuvieran un significado especial. Adhara es brillante y pura, como queremos que sea ella, y Narcisa, por todo el amor y apoyo que nos ha dado.
Narcisa no pudo contener las lágrimas y se inclinó para besar la frente de Harry. —Es el mayor honor que podría recibir. Estoy tan orgullosa de ustedes.
Sirius abrazó a Draco y luego a Harry, visiblemente emocionado. —Ella es una estrella que iluminará sus vidas. Estoy tan feliz por ustedes.
-Puedo decir que ha sacado el típico gen Malfoy, lo bueno es que ella es rubia platinada natural, no como el teñido de su padre - comenta con tono burlón Zaza, haciendo reir a todos.
-te he dicho que mi color es natural! - exclama en voz más alta hacia su amigo
-ya ya barbie, no frunzas el ceño sinó te harás más viejo - le intenta calmar
—Miren esos ojos, iguales a los de Harry —dijo Sirius con emoción con Adhara en brazos, mientras todos se acercaban para observar.
—Es una combinación perfecta —comentó Draco, con una sonrisa de orgullo en el rostro—. El cabello de los Malfoy y los ojos de su madre.
Harry emocionada y viendo a su padre con su hija comenta —Es hermosa, la combinación de lo mejor de nosotros.
Todos en la habitación se mostraban fascinados con la bebé, pero también estaban ansiosos por conocer a los padrinos que la pareja había escogido. Hermione, Ron, Theo, Blaise y los demás esperaban con expectación, deseando ser elegidos para ese honor. Draco y Harry intercambiaron una mirada cómplice antes de anunciar la decisión.
—Para Adhara, hemos elegido como padrinos a dos personas muy especiales para nosotros —comenzó Draco, mirando a los presentes—. Hermione Granger y Theodore Nott.
Un murmullo de aprobación recorrió la sala. Hermione, sorprendida y emocionada, se llevó las manos a la boca antes de abrazar a Harry con fuerza.
—¡Gracias, Harry! Es un honor enorme —dijo, con los ojos brillando de felicidad.
Theo sorprendentemente y estrechó la mano de Draco con firmeza antes de abrazarlo. —Prometo ser el mejor padrino posible. Me aseguraré de que tenga buen gusto y amor por el conocimiento, como nosotros.
—Eso espero —respondió Draco con una risa—. Sabemos que con ustedes dos, Adhara estará bien guiada.
Los demás, al ver que no habían sido seleccionados, soltaron un suspiro dramático, pero no tardaron en reír. Blaise, fingiendo un puchero, dijo en tono juguetón: —Bueno, si no soy el padrino ahora, ¡lo seré para el próximo bebé! Yo lo he pedido primero
—Sí, Harry, deberías pensar en eso —añadió Ron con una sonrisa burlona—. Queremos una oportunidad la próxima vez.
Draco, riendo y actuando con dramatismo. —Está bien, está bien. Acepto la noble tarea de procrear otro hijo lo más pronto posible.
Harry, sin embargo, levantó una ceja y lo miró con fingida molestia. —¡Claro, Draco! Pero te recuerdo que el próximo en parir serás tú si piensas que tendremos otro bebé de inmediato.
La habitación se quedó en risas ante la respuesta de Harry, y Draco levantó las manos en señal de rendición, sin poder contener la risa.
—De acuerdo, de acuerdo. Me tomaré mi tiempo —dijo con una sonrisa cariñosa, o queriendo enojar a su esposa.
Con el ambiente lleno de amor y alegría, todos disfrutaron del momento, sabiendo que la pequeña Adhara estaba rodeada de personas que la amarían y cuidarían.
La familia Malfoy-Potter estaba más unida y feliz que nunca desde la llegada de su nueva integrante, Adhara. Draco había decidido pasar más tiempo en Malfoy Manor, dedicándose a ayudar a Harry con la pequeña, disfrutando cada momento que podía con ambas. Cada día era un nuevo descubrimiento, y la conexión que sentía por su familia crecía con cada sonrisa de Adhara. Sin embargo, Draco no estaba presente solo; tanto Narcisa como Sirius no se despegaron del lado de su nieta, llenándola de amor y atención.
Desde el nacimiento de Adhara, la pareja recibió visitas de amigos y familiares que traían regalos. Cada día era una celebración de la vida y la nueva llegada. Incluso Severus Snape, quien sorprendió a todos con su visita, les llevó un regalo cuidadosamente envuelto para Adhara y un obsequio para Harry para ayudarla en su recuperación. La relación entre ellos había cambiado con el tiempo, y Harry se sintió agradecida por el gesto, además de todo el cuidado que él tuvo con ella en su tiempo en Hogwarts.
Los meses siguieron pasando, y aunque Harry se dedicó por completo a cuidar de su hija, ya pensaba en su futuro. Había decidido que, tras seis meses, se sumergiría en su nueva carrera como rompe maldiciones. Sabía que la profesión era fascinante y que podría combinar su pasión por ayudar a los demás con su destreza mágica, pero también estaba decidida a dedicar tiempo a su pequeña.
Con la llegada de la Navidad, la familia se reunió con gran alegría. Malfoy Manor estaba adornada con luces y decoraciones, y el ambiente estaba lleno de risas y música. Los regalos, especialmente para Adhara, se apilaban bajo el árbol. Harry sonrió al ver la felicidad en los rostros de todos mientras compartían la festividad juntos. Esa Navidad, más que nunca, se sintió agradecida por su familia y la vida que habían construido.
Después de las celebraciones navideñas, el Año Nuevo llegó con grandes noticias. Durante una reunión con amigos, Hermione anunció emocionada que se casaría con Ron. La sala estalló en vítores y abrazos, y todos estaban felices por la pareja. Pero eso no fue todo; Theodore, para sorpresa de muchos, reveló que también se casaría, pero con Luna. Lo mismo sucedió con la revelación de compromiso entre Lorenzo y Ginny. La emoción y el asombro llenaron la habitación, y todos comenzaron a felicitar a la pareja.
Zaza, quien siempre tenía un comentario sarcástico a mano, comenzó a molestar a todos diciendo que se estaban amarrando. Se reía de ellos, proclamando que él seguiría siendo un alma libre para conquistar a todas las mujeres. Sin embargo, su broma no fue bien recibida por Astoria, quien, al escuchar eso, le dio una patada en la espinilla y se alejó furiosa. Era evidente que sus sentimientos por Blaise no estaban muy ocultos, y eso sólo intensificó la tensión.
Blaise, preocupado, decidió seguir a Astoria y tratar de entender lo que había sucedido. La encontró en el jardín, tratando de calmarse. Tras un momento de silencio incómodo, Blaise se armó de valor y le confesó.
—Astoria, lo que dije fue solo una broma. No te enojes, estrellita. — la llama Blaise con cariño, haciendo alusión a su nombre.
Astoria se detuvo y lo miró con sorpresa. —No me interesa si es broma, puedes hacer de tu vida lo que sea - dice con los brazos cruzados con intención de irse, pero es jalada suavemente del brazo para caer encima del moreno.
-si no te interesara no estarías así de molesta, mi estrellita - le sonríe pícaramente - me encanta cuando te pones así por mi - nota como el rostro de la chica se calienta en un tono carmín.
-no molestes Zabini - le recrimina e intenta escapar
-me gustas - dice, sintiendo la quietud de la pelicastaña - me gustas desde hace dos años, pero pensé que te gustaba Malfoy y no quería incomodar la situación - le explica serenamente y mirándola a los ojos sin pestañear
-¿de verdad? - le pregunta dudosa- no es una broma, ¿cierto?
-por supuesto que no - le responde algo indignado, pero entendiéndose por su fama de mujeriego - Astoria Greegrass, me harías el honor de ser tu maravilloso y fantástico novio?
Los ojos de Astoria se iluminaron, y una sonrisa tímida apareció en su rostro. —Me gustaría mucho, pero... no me vuelvas a tratar de esa manera.
Blaise asintió, aliviado. —Prometido. Vamos a hablar más de esto. Ya veremos qué pasa.
Así, mientras las parejas comenzaban a formarse, la familia Malfoy-Potter continuó creciendo en amor y alegría. Cada día traía consigo nuevas sorpresas, y todos esperaban con ansias lo que las futuras parejas traerán consigo.
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Cambio mágico (HarryFem x Draco)
FanfictionLa mala suerte Potter siempre será una maldición dentro del linaje de Harry Potter, y vaya que la maldición se ha encariñado él. Su curiosidad pudo más que su instinto de precaución, lo que llevó a que su vida tomara un gran giro de acciones. ¿Podrá...