Después de ese día que le dije lo de Kelly, se ha convertido en mi sombra, no hay lugar donde no me acompaña, es lindo, pero a la vez me desespero. Puedo imaginarme cómo se siente, yo estaría igual si se tratara de ella, es mi vida y tiene razón, ocultarle que estoy en peligro es meterme más en el.
—Nena, tienes que comer algo— me ordena.
—No tengo hambre. — hago mohín.
—De eso nada, señorita, pediré algo para comer, me he quedado sin pila, ¿Dónde está tu teléfono?
—En mi bolso.
Me doy una ducha rápido y me pongo ropa de algodón. Recuerdo que tengo que llamar a mi madre y a Mani. Al salir de la ducha encuentro aCamila sobre la cama con las manos en la cabeza. Antes de poder preguntarle qué pasa, miro sobre la cama un papel, un folleto. Cierro mis ojos y recuerdo lo que es, el folleto acerca del aborto que llevaba en mi cartera, lo había olvidado por completo. Empieza a acelerarse mi corazón y por primera vez en mi vida, le tengo miedo a Camila, de su reacción y no sé qué decir.
—Camila. — Dios, mi corazón se va a salir de mi pecho, quiero salir corriendo.
—¿Querías matar a nuestros bebés? Mis piernas empiezan a temblar, no tengo nada que decir, la verdad sólo tenía miedo pero no iba a ser capaz de hacer algo como eso, amo a nuestros bebés. No puedo verlo a los ojos ni siquiera puedo acercarme a ella.
—¡Maldita sea! — grita. No puedo hablar, las lágrimas brotan de mis ojos, no puedo enfrentarla, no tengo ninguna explicación, había pensado en terminar mi embarazo, iba a matar a sus bebés, nuestros bebés.
—¡Mírame! ¡Di algo! — grita y me toma el rostro pero cierro mis ojos.
—Lo siento— sollozo. ¿Qué más puedo decir? Soy una estúpida cobarde.
—No puedo creer que seas capaz de siquiera pensar en hacer algo como eso, Lauren. ¿Por qué? No respondo, únicamente tiemblo y lloro.
—¡Responde!
—Esto es...— camina en círculos —demasiado para mí, no puedo verte en estos momentos.
Toma las llaves del auto y sale tirando la puerta detrás de ella, escucho cómo tira la puerta principal y me tumbo en el piso a llorar desconsolada, agarro el folleto y lo hago mil pedazos, me tiro sobre la cama y empiezo a llorar, siento asco de mi misma, empiezo a temblar y tengo nauseas, corro hacia el baño y empiezo a vomitar. Busco mi celular y llamo a Mani.
—Tranquila, voy para allá.
Quince minutos después está tumbada conmigo en la cama consolándome.
—¡Me odia!.
—No te odia, no digas eso.
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QUEDATE CONMIGO SIEMPRE - TERCERA PARTE (TRILOGIA)
FanfictionLauren se ha dado cuenta de su embarazo en el momento más difícil de su vida. Cuando las cosas no podían ir tan mal, el pasado de Camila sigue siendo un obstáculo grande en su amor. Lucha o no, Lauren se encuentra desprotegida sintiéndose más sola q...