Cap 9

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Benditos y maravillosos días que había estado viviendo, por la mañana trabajaba o trabajaba y por la tarde y parte de la noche, en compañía con mi novia, la cual me daba una extraordinaria noche llena de sexo, caricias, besos... Amor

Sin embargo, tenía sus consecuencias

-¿Estás comiendo bien? - Preguntó la Dra Perfuma

-¿Porqué lo dices?

-Estás muy pálida y puedo jurar que has adelgazado, ya te está pegando el trabajo y la escuela ¿Cierto?

-Para nada, me siento de maravilla ¿Por qué lo dices?

-Te acabo de decir... Deberías mejorar tu alimentación o dormir más

¿Dormir? Considerando lo que he estado haciendo - Si, tal vez es eso, consideraré dormir más, gracias

La campana sonó, las clases se habían terminado y mi tiempo con Catra comenzaría pronto. Tomé mis cosas y salí casi corriendo de la escuela, poco me importaban ya los coloridos detalles de la ciudad o los locales, ahora todo giraba alrededor de ella, pero mi celular sonó, el Dr Gómez me necesitaba para una cirugía, acabando con mi alegría y tonando de gris mi tarde

Llegué al hospital de muy mal humor, la nube densa de molestia no me permitía siquiera saludar a quién se me cruzaba, solo entré al vestidor, vestí el uniforme quirúrgico y entré al quirófano murmurando blasfemias pues en mi mente no había más. Maldito doctor, maldita hora en la que este estúpido niño se le ocurrió subir a su bicicleta y saltar una rampa, maldito descuido de su tonta madre 

-Doctora... ¡DOCTORA GRAYSKULL!

-¿Si?

-¿Que le sucede? - Preguntó el malvado Dr Gómez

-Nada... Tengo hambre

-Ya veo... Tenga en cuenta doctora, que ser un médico especialista, no es compatible con una vida en familia, prácticamente nos casamos con la profesión, acostúmbrese

-Mhm - No pude responder más, pues mi humor no permitiría responder con coherencia y amabilidad

Paciente masculino de 16 años, el cual sufre caída de una rampa de alrededor de 4 metros, provocándole fractura de tibia derecha, clavícula izquierda y fisura en húmero derecho, significando que no iré al departamento si no hasta la noche, lamentable

Al rededor de 5 horas después, terminé de colocar las placas al paciente y cerré la incisión, pues como castigo por haberme ido de vacaciones, debía hacer las cirugías de principio a fin, dejándome agotada al final

Me quité el cubrebocas y la bata estéril para ir al vestidor y acostarme en el sofá de los vestidores ignorando a los otros médicos que se vestían e iban, pues mi espalda baja ardía y mis piernas dolían, haciéndome reconsiderar en si esta especialidad era la correcta para mí

Repentinamente un agradable aroma llamó mi atención - ¿Cansada? -La anestesióloga se había quedado hasta el final - Pechuga de pollo rellena de jamón, queso y elote amarillo ¿Gustas?

-No, gracias

-Anda -Lo único en mi estómago había sido un desayuno pobre alto en cafeína, por lo que no pude negarme y comimos ahí - ¿Sabes cuánto va a cobrar el Dr Gómez por esto?

-No tengo idea y la verdad no me quiero enterar, porque me da un coraje, que me provoca gastritis

-Y dígame doctora ¿A caso usted tiene pareja?

-Si, la hay, y es... - Un maravilloso aroma entró en mi estimulando cierto punto bajo mi cintura

La anestesióloga cerró la puerta del vestidor con seguro, habitación donde las cámaras de seguridad no existen - ¿Es serio?

Mi vecina de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora