Pasan varios días. Kira está sentada en un sillón mientras mira algunas ideas para la boda. Luna se sienta en un sofá cerca de ella y la observa.
-¿Te ayudo?
-No hace falta, lo tengo controlado.
-Se que no llevas 3 meses saliendo con Jason.
-Sí llevo 3 meses con él.
-Mientes. No solo puedes llevar 3 meses con él y casarte tan pronto.
Kira pone los ojos en blanco y la ignora mientras sigue con lo suyo. Luna sonríe ante la reacción de Kira.
-Ya estás contándomelo todo. Quiero la verdad.
-Eres tan pesada...
Kira deja lo que está haciendo a un lado y mira a su madre.
-¿Qué quieres saber?
-¿Cuánto llevas con Jason?
-Llevamos 1 año y 3 meses.
-Lo sabía. ¿Por que no me lo dijiste antes?
-Porque hace un año no te conocía.
-Buen punto, pero debiste decírmelo antes.
-Lo escondimos por un año por algo, ¿sabes?
Luna ríe y se acomoda un poco en el sofá.
-Eres astuta, cariño.
-Ya lo sé, lo he sacado de ti.
-Entonces, con esta información nueva ya me cuadra todo. Ya decía yo que era muy poco tiempo para poder casarse.
-No se te puede esconder nada.
-Ya me conoces.
Pasan varias semanas y ya van preparándose cosas para la boda. Llega el día de escoger el vestido. Luna acompaña a su hija a la tienda de vestidos.
-Elige uno bonito.
-Elegiré el que me guste, y te aguantas, que para eso me caso yo y no tú.
-No me hables así, sigo siendo tu madre.
-Pues entonces déjame elegir a mi.
-Tu misma. Me voy a meter igualmente y voy a opinar.
Kira se prueba varios vestidos y se decanta por dos. Uno con cola, brillantes y mucho escote, y otro sin cola, más básico y un poco de escote.
-¿Cuál cojo?
-El primero. Me encanta.
-¿No crees que es mucho?
-Puede, pero ¿qué más da?
-Pues para llevarte la contraria me llevo el segundo.
-Tienes muy mal gusto.
-Me da igual lo que digas, me lo voy a llevar. A mi me gusta.
-Tu misma...
Kira se lleva el que ella ha elegido. Al llegar a casa, Kira deja el vestido guardado en un armario apartado para que no se estropee.
-¿Cuánto tiempo falta para tu boda, cariño?
-Dos semanas, mamá.
-¿Tan pronto?
-No es pronto. Ya han pasado 2 meses desde que te lo dijimos.
-Se me ha pasado muy rápido.
-Ya se nota.
Luna y Kira ríen. Oyen como tocan a la puerta y Luna va a abrir. Hay un hombre en la puerta con un aspecto rudo.
-Hola, ¿en qué le puedo ayudar?
-¿Vive aquí Kira Lewis?
-Sí. Ahora le digo que venga a hablar con usted.
Luna le hace una señal a Kira para que se acerque a la puerta. Al acercarse, Kira ve al hombre y se pone tensa.
-Kira, ¿estás bien?
-Sí, sí, tranquila. Deja... deja que hable con este hombre.
Luna se aleja de la puerta y deja que Kira hable con el hombre que está allí. Kira cierra un poco la puerta quedándose fuera con el hombre.
-¿Qué haces aquí? Te dije que no vinieras a mi casa.
-Aún no has cumplido con tu trato, Lewis.
-Estoy en ello, joder. ¿Tanto te cuesta esperar un poco?
-Tienes 4 meses. No te doy más tiempo.
-¿4 meses? No es tan fácil, ¿sabes?
-4 meses. Después de eso ya sabes lo que toca si no cumples.
El hombre toca una pequeña pistola que tiene en su bolsillo. Kira se tensa más que antes.
-Vale, vale. Lo haré.
Kira vuelve a entrar en casa y cierra la puerta. Ella ve como el hombre se marcha con su coche. Kira se asusta al ver a su madre apoyada en el marco del puerta de la cocina.
-Podrías de dejar de darme sustos, mamá.
-No es mi intención. ¿Quién era ese hombre?
-Era... era... un compañero de trabajo...
-Un compañero de trabajo. Parecía muy amable.
-Sí que lo es.
Kira se aleja de la puerta y se dirige a la cocina. Busca en los armarios algo.
-¿Qué buscas?
-Ron. ¿No hay?
-En el último armario al fondo.
Kira encuentra la botella de alcohol y se sirve un trago largo. Luna sigue apoyada en el marco de la puerta.
-Pareces tensa. ¿Qué ha pasado?
-Nada. Una cosa de trabajo.
Kira bebe un poco. Luna saca una copa, se sirve un poco de vino y bebe.
-Voy a preparar la cena.
Luna deja la copa a un lado y saca algunos ingredientes de la nevera. Kira se sienta y se queda mirando a la nada pensando en como solucionar el problema. No sabe como conseguir lo que le han pedido.
Luna sirve la cena y Kira vuelve a la realidad. Luna ha hecho pasta carbonara.
-Gracias. Tenía hambre.
-Sé que es tu favorito. Hay más por si quieres repetir.
Kira come despacio, aún pensando en lo que ha pasado antes. Terminan de comer y recogen la mesa. Kira no ha dicho nada en toda la cena y Luna se preocupa por ella.
-¿De verdad que estás bien, cariño?
-Sí, lo estoy. Me voy a dormir.
Kira se va a su habitación se acuesta a dormir sin ni siquiera cambiarse la ropa. Luna se queda un buen rato viendo un programa en la televisión. Ella va quedándose dormida poco a poco, sin darle la oportunidad si quiera de ir a la cama.

ESTÁS LEYENDO
Una vida (casi) perfecta
AdventureImagina volver a tu casa después de 15 años de haberte perdido de pequeña en el bosque. Empiezan a pasar muchas cosas y no simpre es lo que quieres.