Secretario.. (Caesar x Lee Won)

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 3.

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Lee Won apenas podía respirar cuando salió del lujoso edificio donde había tenido lugar la entrevista. El aire frío de Moscú lo golpeó como un balde de agua helada, pero ni siquiera eso pudo calmar los latidos frenéticos de su corazón. Era como si su cuerpo aún no hubiese registrado que la entrevista había terminado, que estaba libre... al menos por ahora.

Caminar por las calles, con la nieve bajo sus pies, le daba una sensación surrealista. No podía creer que todo lo que acababa de vivir había sido real. Durante la entrevista, había estado sentado frente a Caesar Sergeyev, el hombre más temido del mundo. Había sentido su mirada fija, como si le estuviera arrancando la piel para ver su interior. Los rumores no le hacían justicia. Caesar no solo era imponente, su presencia llenaba la habitación de una manera que Lee Won nunca había experimentado.

Había entrado en esa oficina lleno de nervios, pero cuando Caesar lo había mirado por primera vez, todos sus miedos pasaron a segundo plano. La intensidad en los ojos de ese hombre lo dejó paralizado. No había sido una entrevista cualquiera. Caesar prácticamente no había hablado, solo lo había observado, como si estuviera estudiándolo. Y no de una manera profesional... no, había algo más detrás de esos ojos azules fríos, algo mucho más perturbador.

Lee Won no sabía qué pensar. ¿Había hecho algo mal? ¿Había dicho algo fuera de lugar? A pesar de que las palabras de Caesar habían sido pocas, el ambiente estaba cargado. Cada segundo que pasó bajo esa mirada lo había hecho sentirse más pequeño, como si estuviera bajo un microscopio, pero al mismo tiempo había sentido una atracción extraña, casi magnética, hacia él.

Suspiró profundamente mientras sus pasos lo llevaban de regreso a su pequeño apartamento. La ciudad seguía siendo un caos de sonidos y personas, pero todo se desvanecía en su mente, que no podía dejar de pensar en la entrevista. ¿Qué era lo que había ocurrido ahí dentro? La forma en que Caesar lo había mirado era como si lo quisiera para algo más que solo un trabajo. Había una intensidad en esos ojos que no podía sacarse de la cabeza, una sensación que aún le recorría la piel.

Pero no podía dejar que su mente vagara hacia conclusiones extrañas. Era un mafioso. Era poderoso, temido, un hombre con el que nadie quería meterse. Y, sin embargo, había algo en él, algo que despertaba una chispa dentro de Lee Won que no podía explicar. Intentó desechar esos pensamientos. No podía permitirse perderse en fantasías. No con un hombre como Caesar.

Entró en su apartamento, cerrando la puerta tras de sí con un alivio que no pudo evitar soltar en forma de un suspiro. Pero el alivio no duró mucho. Tan pronto como se sentó en la cama, el teléfono vibró en su bolsillo. Sacándolo con manos temblorosas, vio un mensaje de un número desconocido.

"Nos vemos mañana a las 9 en mi oficina. Estás contratado."

La simpleza del mensaje no le dio tiempo a procesarlo del todo. Lee Won se quedó mirando la pantalla durante unos segundos, incapaz de creer que lo había logrado. Estaba contratado. Su pecho se llenó de una mezcla de alivio y terror. Pero mientras se dejaba caer en la cama, su mente volvía a la figura de Caesar, a sus ojos que parecían perforar su alma.

Trató de no pensar en lo que vendría después. Trató de convencerse de que esto era solo un trabajo. Pero en el fondo, algo le decía que Caesar Sergeyev no sería un jefe normal. No para él.

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