Capítulo 7

46 7 0
                                    

POV KARA

Dejo caer mi mirada hacia la mesa, nerviosa. Trago el bocado de brownie todavía en mi boca, pero la llegada de la nueva tipa hace que se convierta en ceniza. Apareció y rompió la pequeña burbuja que Lena había creado a mi alrededor. Realmente había olvidado dónde estábamos por un momento.

—Vete a la mierda, Verónica— Dice Lena, y me tenso aún más. Lena se mueve más cerca, como si estuviera tratando de protegerme de la tipa. Verónica se ríe de las palabras de Lena, pero algo me dice que a Lena no le parece gracioso.

—El entrenador quiere verte— Le dice a Lena, tratando de desechar su actitud.

—Ocupada— Lena dispara con voz dura. Me pregunto si son amigas. La forma en la que Verónica se sentó, hizo parecer que lo eran al principio, pero Lena parece enojada por su presencia. No es que me importe, porque tampoco la quiero aquí. No con la mirada que me dio cuando se sentó. Era como si fuera una especie de insecto que deseaba estudiar. Como si no perteneciera aquí y quiere averiguar por qué pienso que sí.

—¿Has terminado? — Pregunta Lena a mi lado. Asiento, y miro mientras envuelve el resto del brownie, luego agarra mi mochila y lo mete en el bolsillo delantero. Me lo está guardando para más tarde.

Sintiéndome incomoda e insegura de si estas dos están a punto de tener una pelea o algo así, busco una salida. No quiero estar en medio si sucede, quiero salir de aquí lo más rápido posible.

—Como que al entrenador le importa una mierda que estés aquí tratando de echar un polvo. Mejor...—

Lena golpea con fuerza su mano en la mesa, haciéndome saltar ante el fuerte ruido. Se escucha a través de la habitación, y toda la cafetería se queda en silencio. Me encojo sabiendo que todo el mundo nos está mirando. Dios, desearía poder desaparecer. Esto no está bien.

—Creo que olvidas que la temporada ha terminado, Verónica. Ya no me importa sí recibes un golpe— Su tono es bajo pero mortal y me envía un rayo de miedo. Mi padre puede hacer eso. Cambiar de agradable a no tan agradable, pero normalmente hay alcohol involucrado.

Tomo mi bolso de la mano de Lena y me levanto, casi tropezando con mis propios pies. Ella me atrapa antes de caer de culo y escucho algunas risas, disparando mi ya alto nivel de vergüenza. Esto sigue empeorando.

—Tranquila, cariño— Dice Lena enderezándome, el borde duro de su voz desaparecido.

—Tengo que irme— Empujo las palabras, girándome para salir de la cafetería lo más rápido que puedo. Saco mi horario mientras camino por el pasillo buscando mi próxima clase. Cuando llego a la puerta, veo que Lena me ha seguido unos pasos por detrás. Hacemos contacto visual y se para.

—Espérame después de la clase— Me dice, pero no respondo mientras me meto en el aula y tomo mi asiento. A medida que más estudiantes entran en la habitación tomo unas cuantas respiraciones y me relajo, tratando de calmarme del drama del comedor.

Después de un momento, saco mi bloc de dibujo y empiezo a dibujar mientras espero a que comience la clase. Recuerdo que Lena dijo que teníamos el mismo horario, pero cuando comienza la clase no está en ninguna parte. Aguardo toda la clase esperando verla, pero nunca aparece. Tal vez la malinterpreté antes.

Cuando suena la campana salgo de la habitación mezclándome con los otros estudiantes. No la veo en ninguna parte, y mi mente gira al recordar lo que pasó durante el almuerzo en la cafetería. Pienso en el repentino cambio en Lena, como si hubiera pulsado un interruptor. Qué diferente había sido conmigo. Tal vez ella y Verónica tengan problemas. Debería preocuparme que Lena pudiera ser así conmigo. Parecía tan agradable y perfecta que me hizo sentir especial. Me hizo sentir cómoda en un nuevo lugar, y nunca había sucedido eso antes.

Sabiendo que el último período es en la sala de estudio, decido irme. Puedo volver a la gasolinera en la que paré en esta mañana y donde recogí la solicitud de empleo. No estoy segura de que el horario sea compatible, pero veré si puedo conseguirlo.

—¡Kara, espera! — Grita una voz femenina. Me vuelvo para ver a Andrea corriendo hacia mí, su alta cola de caballo rebotando detrás de ella. Me detengo, los modales sacando lo mejor de mí.

—Oye— Dice sin aliento —Vi lo que pasó en la cafetería— Me encojo de hombros, porque, ¿Qué se supone que debo decir a eso? No estoy segura de lo que pasó allí. Probablemente tiene más idea que yo. Sé que Verónica y Lena son las chicas de las que ella y la pelirroja; Pamela, hablaban esta mañana.

—Quería decirte algo, de chica a chica— Se acerca a mí como si fuera a contarme un secreto —Las futbolistas tienen este juego de tontear con las nuevas— Niega como si no pudiera creer lo inmaduras que son —Tratan de ver quién puede conseguir a la chica nueva primero. Te lo hubiera dicho antes, pero bueno...— Me mira con la misma mirada que Verónica me dio. Como si fuera un insecto extraño —No pensé que lo harían contigo. No eres realmente su tipo—

Auch. El pequeño pedacito de esperanza que había sentido con Lena se escapa. Quema profundamente. Más profundo de lo que debería para alguien a la que solo he conocido por unas horas. Es una pérdida a la que debería estar acostumbrada. Pierdo a todos. Debería estar familiarizada con la sensación, pero este es un peso pesado en mi corazón por alguna razón. Siento una quemadura punzante detrás de mis ojos.

—Sí, gracias por la advertencia— Digo, girándome para irme.

—Las chicas tenemos que estar unidas, ya sabes— Dice detrás de mí, y sigo caminando. No es hasta que estoy fuera que recuerdo que no tengo mi abrigo. Todavía está en el casillero de Lena y no hay manera de que vuelva allí para conseguirlo.

Espero no coincidir con ella en clase mañana.

 ///////////


¿Qué creen que pasará? ¿Se nos vendrá el primer malentendido o lo podrán resolver? Teorías quiero lo qué piensan de lo que va de la historia y de lo que creen que pasará.

Gracias por leer, votar y comentar.

Esperemos que nadie reporte la historia.

Besos y Cuídense mucho. 

Shielding KaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora