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Corazón roto

Iris Cley

Asentí, sintiendo la presión en mi pecho. Sabía que esto era solo el principio de algo mucho más complicado, pero estaba decidida a estar ahí para Azier, incluso si él nunca llegaba a entender lo que había hecho por él.Miré a Azier, su rostro tranquilo mientras dormía, y sentí un profundo conflicto en mi interior. Sabía que no podía quedarme ahí por más tiempo, especialmente si él realmente amaba a Emma.

—Creo que debería irme —anuncié, intentando sonar decidida, pero mi voz temblaba un poco.

Sus padres se miraron preocupados. La madre de Azier se acercó, sosteniendo mi brazo con ternura.

—Es de noche, y no queremos que salgas sola. ¿No puedes quedarte un poco más? —su tono era amable, pero había un atisbo de urgencia en su mirada.

—Lo siento, pero necesito irme. No sé cómo volverá a ser nuestra relación después de lo que pasó. Además, él… él ama a Emma —dije, sintiendo el nudo en mi estómago volverse más pesado.

El padre de Azier se acercó, hablando con una voz suave pero firme.

—Iris, lo que pasó esta noche no define lo que él siente. Él necesita ayuda, y tú has hecho más de lo que podrías imaginar. Si decides irte ahora, podrías sentirte culpable más tarde.

Asentí, pero mi mente seguía insistiendo en que mi presencia podría complicar aún más las cosas. Miré a Azier una vez más, su expresión serena contrastaba con el caos de mi corazón.

—No sé si él querrá verme cuando despierte —susurré, intentando contener las lágrimas.

—No lo sabemos hasta que despierte —respondió su madre, dándome una sonrisa alentadora—. Quedarte un poco más podría ayudarlo.

Suspiré, luchando con mis emociones.

—Está bien, solo un rato más —accedí finalmente, sintiendo que era lo correcto. Ellos se retiraron y me quedé observando a Azier.

—¿Qué ocurre?¿donde estoy?,—Pregunta adolorido

—Se lo que te diré es algo que no podrás superar pero tendrás que hacerlo,Emma ella...—Suspiré antes de volver a hablar Azier me miró con las cejas fruncidas—Te abusó

Parpadea una y otra vez cómo si lo que dijera recién no lo aceptaba,y me lo hizo saber con sus siguiente palabras,

—Ella no es así,no haría tal cosa,yo se que ella me ama y tú....tú eres una completa mentirosa Emma siempre ha sido una excelente mujer,—Sacude su cabeza mientras se sienta en el borde de la cama observándome con seriedad y indiferencia

El era la razón de mi dolor de cabeza el único que puede herir mi corazón con sólo palabras y gestos.

—Que sea la última vez que hables de esa manera hacia Emma,eres sólo una becada sin futuro la que ni siquiera tiene padres,¿quién eres para hablar así de ella?,—Se levanta cómo puede y se acerca intimidandome

—Yo...

—¿Yo?,—Suelta una carcajada estando en esa condición es cruel—Dos falta más y haré lo posible para que te echen de Arcadia,—Sus ojos se oscurecen se queda quieto para mirarme esperando alguna respuesta por parte mía

—Sólo quería ayudarte,pero siempre pasa que al ayudar me pagan de la peor manera

—No necesito la ayuda de nadie y mucho menos la tuya,—Sus venas sobresaltan está llegando a su punto máximo de maldad

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