Capitulo 6

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—¿Que se proponen hacer? —Dijo Fushiguro, notando que todos lo miraban fijamente.

—¡Espera! —Dijo Tomioka —Por favor, ten paciencia, el Patrón llegará pronto.

Para Fushiguro esas eran palabras vacías, no le creía nada.

—He sido paciente, más de lo que estoy acostumbrado. No cumpliste con tu parte, y no estoy dispuesto a esperar más.

¡Te pagaré! —Dijo, escupiendo algo de sangre por el estado en el que estaba —¡Solo espera un poco más!

Fushiguro bostezo.

—Te dije que no, enano. Tu y ese mocoso ya se han burlado suficiente de mi, voy a saldar su deuda con su vida. Como soy alguien que no va más allá de los negocios, no le haré nada a tus compañeros. Deberías agradecerme, tenía algunas ganas de matar al K-poper —Señaló a Sanemi.

-(¿Como salgo de esta?) Pensó el azabache. No tenía posibilidades de mantener una lucha ahora mismo. Sus compañeros por otra parte solamente morirían. -(¿Que hice? ¿Que estaba pensando) Pensó. Sus planes de hacerlo aliado de la cofradía habían fracasado, y de paso puso en riesgo a sus compañeros. Si ellos morían toda la cofradía corría peligro de colapsar.

—Esto termina aquí —Dijo Fushiguro, acercándose al azabache con intenciones asesinas.

—Danza del ciempiés... Zigzag de las cien patas —Recitó alguien, alguien que Fushiguro no alcanzó a ver.

En un movimiento rápido la mujer que hasta ese entonces le había parecido inofensiva a Toji, se colocó detrás de él con facilidad.

El instinto de Fushiguro le avisaba que sería atacado por tal dirección, sus sentidos la habían localizado a pesar de la velocidad que tenía ella. Aunque no era peligrosa, era molesta.

—Idiota —Susurro. Fushiguro ya había deducido fácilmente por donde atacaría la Ojipurpura, solo la estaba esperando.

Los movimientos de la mujer eran extraordinarios, era casi imposible de predecir su próximo movimiento. No solamente por la velocidad, si no que la forma en la que lo hacía.

—¡Te tengo! —Grito Fushiguro, al sentir que la mujer se aproximaba por la espalda. Pero todo fue falso. El objetivo de la técnica de la Ojipurpura se trataba de regatear y confundir al enemigo. Con el fin de hacerle bajar la guardia, provocando que un golpe de su espada atraviese el cuello de su oponente.

-(¿Que?) Pensó Fushiguro. Al darse cuenta que su presentimiento había fallado. La mujer no atacó por la espalda. Ella estaba delante suyo, deslizando su katana hacia su cuello.

Esa mujer era impresionante.

—¡Desgraciada! —Dijo Fushiguro. Esquivando por centímetros el ataque, pero había notado algo en ese momento.

Ella no tenía fuerza.

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Toji en Kimetsu no Yaiba [Toji x Demon Slayer]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora