Chad bebe un suave néctar claro desde extraño cuenco rojo, su sabor es dulce sin llegar a empalagar, muerde aquel como bollo rosado comparando su sabor con las donas rellenas de la tierra mientras las niñas comen alegremente a su alrededor, y extrañamente él se siente cómodo entre ellas, lleva bastante tiempo ahí e incluso ha oído algunas historias sobre las frutas y demás pero realmente no está muy interesado en oírlo tanto como le agrada escuchar la risa de Tiara
Ella luce muy divertida a su lado, aún si él solo escucha a las menores contarles las cosas, está muy cerca, tanto que percibe ese aroma meloso provenir de ella, algo embelesado se gira a mirarla y esos preciosos ojos aguamarina lo miran directamente, son tan brillantes, grandes y bellos que se siente confundido
No es que le desagraden o algo así, de hecho, se siente fascinado por la mezcla de color en ellos, tan viva y radiante que le acelera el corazón, sin embargo, entre más los mira surge ese deseo, ese anhelo de que fueran más azules, su mente no pasa de eso. Es como un recuerdo de haber visto algo más azul, un hermoso tono marino que sin duda supera el impacto de estos, está totalmente enfocado en mirarla e intentar averiguar porque no puede sacárselo de la cabeza
— Esto si es un banquete — ríe Yon, viniendo del fondo
Él voltea sorprendido, esperando que alguno se le acerque, sin embargo, se levanta rápidamente al ver que falta Uno — ¿Y Ni...? ¿Y Uno? — rectifica rápidamente, notando a las nativas demasiado atentas a ellos
— Se quedaron arreglando algo — responde Yon casi con resignación corriendo a tomar una bola de miel, que aun con su gelatinosa consistencia no se pega en los guantes
Al ver que es seguro la roja lo come, distrayéndose un poco con las pequeñas que van a ella — Enséñales, por favor — piden las nativas a la galáctica, imitando alguna clase de golpe para sus compañeras
Eso parece distraer o animar a la peli violeta, que presume su movimiento contra el aire, pasando del rubio
— Se quedaron a activar la conexión con la Blackout — aclara Ci observando el lugar con cautela
Chad se mantiene expectante al resto de la aldea, notando al capitán venir con extrema lentitud, y al ver que el blanco no lo acompaña sale corriendo a la base, sin pensarlo
— Lo siento ¿tardamos mucho? — comenta Aelo al cruzarse por el camino, pero el rubio ni siquiera trata de detenerse — Tardaran poniendo todo en línea — dice el niño tocando amistosamente su brazo cuando pasa a su lado
Entonces Chad para, sabiendo que ha tocado su placa, extrañado la revisa encendiendo el comunicador de inmediato — ¿Así? — resuena la suave risa de un niño a través del aparato, es Uno, el rubio reconoce su voz, tanto el tono como el abrupto corte de la interferencia lo hacen sentir agitado, demasiado
Corre ignorando el resto de sonidos, estática o voces, tal vez incluso es Ega, no lo sabe, no le importa, va hasta la compuerta apretando el botón desesperado por entrar«»
— Espera, ¿qué pasa? — pregunta una chica llegando tras él
Asustado voltea rápidamente, se ha alterado tanto que no noto si lo seguían, incluso llegó a olvidar sus prioridades «¿Porque está tan inquieto? ¿Por qué oírlo reír así lo ha puesto tan exaltado?» duda sin dejar de sentirse nervioso. La nativa no se va, no parece haber corrido y claramente no es Tiara, además trae un gran tazón lleno de coloridas frutas por lo que él se extraña ¿Ella estaba ahí y no la vió? O...
Apenas si puede pensar mientras trata de respirar en esa alteración — Bien — susurra la voz de Uno, muy suavemente apenas se oye por el comunicador
ESTÁS LEYENDO
Planeta Prohibido
FanficEn un planeta donde no existe la noche, pasan demasiadas cosas oscuras a la vista de todos La selva puede brindar la única protección, pero eso ellos no lo saben... Una pequeña aventura de un equipo de chicos del barrio galácticos que podría interes...