Un depredador de otro mundo

05 - Muerte sin sentido

/En Venus Garden/

Ya era de noche en el lugar y solo había unas pocas casas con luces prendidas y una de ellas era una especial donde las diosas se reunían para pasar el rato o sus momentos libres. Sin embargo, la verdad es que estaban ahí para desahogar sus penas, estrés y otras cosas similares. Es regular que lo hagan cada vez que sus hijas salen en la caravana pues están preocupadas así como con el ansia de saber que están a salvo como una madre que espere a salvo por el regreso de su hija.

Lo mismo ocurre con las demás ciudades cada vez que sus hijos salen por las caravanas, aunque una que otra solo ve a sus hijos como interés... bueno eso solo se cuestiona en Chaosdeus, pero algunos dioses están poniendo en cuestión esto entre ellos están Freya, Poseidón y otros. Tal parece que la situación actual ha cambiado incluso a los inamovibles dioses y en Venus Garden no fue la excepción.

Actualmente las tres diosas principales se encuentran bebiendo.

Astrea: Chicas creo que deberíamos parar - ya había tomado unos buenos tragos sin excederse, pero faltaba poco para estar borracha, pero su tono era serio.

Artemisa: Vamos Astrea, solo un poco más, síííííí - por su tono ya estaba borracha.

Athena: Artemisa tiene razón Astrea, déjate llevar, yahoo - otra borracha que no se quedaba atrás.

Astrea: S-sí - no estaba muy emocionada pues sabía que esto se saldría de control.

Era natural que bebieran cada noche en cada salida de la caravana. No lo hacían a propósito pues pese a velar por sus hijas y pensar lo mejor por ellas no podían evitar disminuir su preocupación y la bebida ayuda, aunque...

Artemisa: Aun tengo que matar a ese maldito que creí era mi Orion.

... se suelen abrir cicatrices, heridas y remordimientos del pasado.

Astrea: Artemisa, por favor - llevándose la mano a su frente mientras suspira - no empieces.

Atenea: Déjala ser Astrea a mí también me molesta esa escoria pese a que no me gusta mencionarlo ni aquí al menos sirve para sacar el coraje.

A esto Astrea solo rodaba los ojos ya acostumbrada a esto, pero seguía siendo molesto.

Se volvió rutina poco después de la fundación de la ciudad. Al principio pensó que con el tiempo se olvidarían de eso, pero no fue así. Siendo sinceros Astrea tampoco lo olvido pues se sintió estafada de que alguien como Bell haya sido una escoria disfrazada todo este tiempo, pero lo que más le dolía es que haya llegado a sentir algo por él más que solo un amigo solo para desaparecer al instante de la supuesta verdad...

La diferencia entre ella y sus amigas es que supo cómo no estancarse en eso y pese al dolor seguir adelante, pero seguramente jamás volvería a sentir algo igual. Aun así, cada vez que tocaban el tema era como si quisieran abrir o hacer una nueva herida sobre la anterior. No se podía evitar después de todo.

Artemisa había buscado por mucho tiempo a su Orion y cuando creyó encontrarlo fue como si la esperanza la hubiese abandonado. La cosa es que para ella fue muy personal pues encontrar al único hombre digno de ella resulto ser solo una estafa y doble cara a todo lo que representaba bueno.

Athena no fue tan distinto, pero con ella creyó haber encontrado a un buen amigo y compañero donde quizás hubiera habido algo más, pero la cosa no se dio. Aun así, no fue tan apecho con ella la situación, pero varias de sus hijas murieron a causa de las muertes negras y por ende culpo a Bell de ello haya sido directa o indirectamente sabía que tenía algo que ver.

Astrea: Lo mismo de siempre - pensó con indiferencia - bueno al menos está no ha sido la peor velada - recordó haciendo memorias a algunos sucesos que han pasado en la ciudad.