𝑩𝑹𝑶𝑲𝑬𝑵| " Cuando se acaba la confianza, se acaba todo, Kaan "
( ᴋᴀʀᴅᴇsʟᴇʀɪᴍ ғᴀɴғɪᴄᴛɪᴏɴ )
𝑫𝑶𝑵𝑫𝑬 Ayla juntos a sus hermanos gemelos
entran a una nueva escuela después de la muerte
de sus padres, así mismo durante el...
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❁˚ও
El sonido de los casilleros abriéndose y cerrándose llenaba el pasillo mientras caminaba junto a mi hermana. Pensé que al llegar a la escuela, algo que me ayudara a sentirme normal después de la noche anterior, pero los idiotas esos habían bajado totalmente mi energía, además, mi mente seguía atrapada en lo que había pasado entre Kaan y yo. El remordimiento pesaba en mi pecho. Había pasado toda la noche sin dormir, preocupada por lo que había dicho, o más bien por lo que no había dicho.
Asiye hablaba a mi lado, pero sus palabras apenas me alcanzaban. No podía concentrarme. Sabía que Kaan estaría aquí en algún momento, y necesitaba hablar con él. Tenía que disculparme. No podía dejar las cosas así.
Entonces lo vi parado junto a su casillero, sus hombros algo caídos mientras sacaba sus libros. Todo dentro de mí se tensa. Asiye se dio cuenta de que me detuve, mira a Kaan y luego a mí. No dijo nada, solo me dio una pequeña palmada en el brazo antes de continuar su camino, dándome el espacio que necesitaba.
Me acerqué despacio, cada paso un poco más pesado que el anterior. Kaan no me vio de inmediato, y cuando finalmente lo hizo, sus ojos se encontraron con los míos de una manera que hizo que mi estómago diera vueltas. Había dolor en su mirada, pero también algo de distancia, como si ya estuviera preparándose para lo peor.
—Kaan —hablé en un susurro, deteniéndome a su lado. Mi corazón latía con fuerza, y la culpa me apretaba la garganta— Quiero hablar contigo.
Él cierra la puerta del casillero y se queda en silencio, esperando. No parecía enfadado, pero había algo en su postura que me deja claro cuánto lo había herido la noche anterior.
—Lo siento tanto por anoche —me disculpe, mi voz apenas saliendo de mis labios— No debí irme así. Sé que te dejé en medio de todo sin darte una explicación, y eso no estuvo bien.
Kaan me mira, sus ojos buscando los míos como si estuviera tratando de entender si lo que decía era sincero. Y lo era. Estaba arrepentida, de verdad lo estaba.
—No quería lastimarte, y temo que lo hice —continué, sintiendo cómo las palabras salían más rápido de lo que podía detenerlas— Solo... me sentí abrumada. Todo lo que descubrí, lo que pasó, no sabía cómo manejarlo, y pensé que si me quedaba, terminaría diciendo algo que no debía. No quería herirte con mis palabras, no a tí.
Kaan se mantuvo en silencio por un momento, sus ojos estudiando mi rostro. Finalmente, deja escapar un suspiro, el tipo de suspiro que parecía haber estado conteniendo durante horas.
—Ayla, sé que esto es difícil para ti. Y no te culpo por sentirte así. Solo... me preocupaba que te alejaras de mí —exclama suavemente —Me duele, pero también sé que te duele a ti.
Asentí lentamente, sintiendo que la tensión en mi pecho empezaba a aflojarse un poco.
—No quiero alejarme de ti, Kaan — mis palabras eran firmes esta vez—. Solo... necesito tiempo para procesar todo, pero no quiero que esto nos destruya.
