La vida es cómica. Te avienta de situación en situación, y por más que lo intentes, no puedes escapar de tu destino. Observo la carta en mi escritorio, con el sello de mi familia en el sobre roto a su lado. Wonhee está dormida en mi cama, pero yo todavía no concilio el sueño.
Papá se dignó a escribirnos por primera vez desde no sé cuando, confirmando el compromiso de Wonhee. Uno que ni nos constaba que tenía por seguro, pero por las llamadas perdidas de Gyuri, juzgo que sí. Apenas se gradúe, será una Han. Han Wonhee, vendida como cordero a un ganadero. Si Han Yujin le agradara un poco menos, esto sería una situación incluso aún más complicada, y me consuela saber que por lo menos estará con alguien que se preocupe por ella, y que pase lo que pase, Garam tampoco dejará su lado.
Tampoco lo haría yo, pero no sé lo que papá haría conmigo si no consiguiera mis prácticas con la profesora Bae. ¿Me ofrecería al mejor postor de la misma forma? ¿Todas mis aspiraciones tiradas por la borda? Tal vez mi esposo imaginario no tendría problema con dejarme diseñar y dibujar por horas.
Son las dos de la mañana cuando mi teléfono vibra, es un mensaje de Sullyoon el que ilumina mi pantalla esta vez. "Te extraño. Yuna hace preguntas, tu 'viaje a esquiar' ya se extendió demasiado". Suelto un bufido, y me hago bolita en mi asiento. Veo mi reflejo en el espejo tocador... Okay, definitivamente me he visto mejor.
Van dos semanas desde esa tarde en casa de Sunghoon. De Park Sunghoon, me recuerdo a mí misma. Y dos semanas en las que no he ido a la escuela. Hasta donde sabe Kim Yuna, estoy en St. Moritz con mis primas más cercanas, pero en realidad no he visto a Ella o Anna desde navidad. He bajado incluso aún más puntos en las encuestas para el baile de graduación, y la frustración burbujea latente en mi pecho.
Tomo la libreta que está al lado de mis brochas de maquillaje, y con el lápiz rosa que atoré en el resorte, me dispongo a seguir trabajando en mi diseño del momento: un vestido celeste, largo, lo suficientemente voluminoso para resaltar la silueta, pero no tanto para que sea ostentoso. Cenicienta en Ozempic, le llamó Sunoo cuando comencé a trabajar en él hace un mes, pero sé que le gustó tanto como a mí. Un mes, y apenas encuentro el tiempo para concentrarme en lo que me gusta a mí. No en la pasantía, no en mi título, o la corona de graduación, o cierto tonto de lentes y pelo negro. En mí.
El lápiz se mueve casi solo cuando hago los trazos. Líneas más delgadas marcan los holanes que caen como cascada en la parte de abajo del vestido, y ciño aún más la cintura, tal vez un doblez pequeño le iría bien. Mi teléfono suena de nuevo, otro mensaje de Gyuri que ignoro. Pongo el celular en modo avión antes de botar la libreta de nuevo.
Bien, la verdad es que estoy muy humillada para contestar. A este punto, perderé a Wonhee a las manos de un niño ricachón, la corona de graduación, la pasantía de la profesora Bae y claro, ya perdí a Park Sunghoon. Si es que en algún momento lo tuve. Si Gyuri estuviera aquí, ella nunca hubiera dejado que las cosas llegaran así de lejos. Perdí el control, y si no lo retomo pronto, con el se va la corona Jang.
Vuelvo a mirarme al espejo, las ojeras más terribles que he tenido en meses, y eso que hice un voluntariado el verano pasado. Peso mis opciones, pero el uniforme Decelis colgado en mi clóset ya decidió por mí. Basta de huir.
Estaciono mi auto bajo la sombra de un árbol, a unos ochenta pasos de la entrada a la academia. Claro, a las once de la mañana todos los buenos lotes ya están ocupados. El chófer tiene el día libre hoy, y Wonhee y Garam tienen asuntos en París—o una cita en Hermés—a los que pude haber asistido, pero más allá de mi urgencia por una pashmina de temporada, necesito afrontar mis decisiones. Afrontar siendo llegar tarde a mi primer día de escuela en dos semanas por desayunar en mi restaurante favorito, pero vamos, es empezar con el pie derecho.
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𝐛𝐞𝐠 𝐟𝐨𝐫 𝐲𝐨𝐮 | park sunghoon
Fanfic'( 𝗕𝗘𝗚 𝗙𝗢𝗥 𝗬𝗢𝗨.)' ❛𝘰𝘩! 𝘮𝘺 𝙢𝙞𝙨𝙩𝙖𝙠𝙚❜ ━━ Jang Sera lo tiene todo; un clóset acorde a la temporada, excelencia académica y muy pronto, una pasantía con la magnate Bae Joohyun. Jang Sera lo tenía todo, hasta que Kim Minji entró por la...