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Abrí mis ojos al sentir besos en mirostro, era una manera genial de despertar, o así lo pensé, hastaque vi a Minwoo entre risas. Empujé su rostro con algo de fastidio,ni siquiera sabía porqué llegué a pensar que ese hubiera sidoTaesan.

—Llegamos, Leehan. — Avisó Minwoo. Seguídurmiendo, más al sentir como me cargaron tal cual princesa abrílos ojos de golpe —

—Minwoo. — Me quejé entre susbrazos. Miré por el rabillo de mi ojo como todos nos miraban, mehacía sonrojar. Sungho tapaba su boca como si aguantara aquellaescena tan cliché, lo miré amenazante para que no dijera nada, leiba a dar un golpe si lo hacía o si se reía —

Minwoo medejó en una silla, mientras mi mirada se perdió en el suelo, con eldorso de mi mano traté de quitar todo rastro de sueño que había enmis ojos.

—Buenas tardes, bebé. — Taesan dejó uninesperado beso en mi mejilla, mucho amor por hoy, era extraño,Taesan últimamente hace mucho esa acción de besarme las mejillas—


Sungho se sentó a mi lado entre risas, sus ojitos enforma de media luna, mostrando su perfecta dentadura.

—¿Quéfue eso? — Solté un pequeño bostezo mientras mis ojos se cerrabanautomáticamente —

—No lo sé, Sungho, déjamedormir.

—¡Hyung! Déjame compartir cabaña contigo. — Meencogí de hombros, ¿Con quién más compartiría cabaña? Óbvioque conmigo — ¡Hyung! No te duermas.

—¡Yo voy conJay! — Notificó con ánimos Jungwon, abrí mis ojos de a poco denuevo, sólo para abrazar a Sungho, sabía lo difícil que era ver lapersona que te gusta con otra, más éste no reaccionó, sólo seconcentró en mi respuesta y las caricias que dejaba en su espalda—

—Nos dividimos de a dos. — Informó Taesan con lasmaletas ya abajo — Yoongi con Jay, Leehan con Sungho, y Samconmigo.


—Falto yo. — Se interpuso Minwoo, y teníarazón, faltaba él — Puedo ir con Leehanie.

—No. —Cortó Taesan de nuevo, rodé los ojos, y ahí comenzaba de nuevo sudiscusión de niños pequeños —

—¿Por qué? Lo veo unaexcelente idea, Yoongi con Jay, sabrán ellos lo que van a hacer, ytú con Sam, después de todo, son pareja, quedaríamos los sinpareja por fuera. A menos que quieras que duerma contigo.

—¡Iuhg!Claro que no, pero-

—¡Caso cerrado! Duermo con Leehan ySungho. — Taesan chasqueó la lengua y no le quedó más nada queaceptar, yo no quería discutir, tenía mucho sueño para hacerlo,así que sólo opté por aceptar —

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—¿Leehante estás maquillando o qué? — Rodé los ojos al escuchar esecomentario de Sungho, quién esperaba a que saliera del baño —¡Vamos Leehan! Todos ya están afuera, ¡Taesan te estáesperando!

—¡Ya! — Abrí la puerta, tapé mi cuerpo conmis manos, mientras Sungho reía al verme semi-desnudo — Me sientodesnudo.

—Se llama traje de baño, ridículo. Así quevamos, te queda bien. — Me coloqué rápido una camisa tratando desentirme más seguro —

—¿De quien fue la idea de salir anadar a las doce de la noche? — Hice una mueca, era una pésimaidea, ¡Podíamos enfermar! —

—De la parejacalentona.

—¿Jay y Yoongi?

—Uhum. — AsintióSungho mientras yo seguía haciendo muecas debido a que la tierraaparte de que estaba húmeda, estaba fría, y no me gustaba andardescalzo —

—¿Quieres que te cargue, Leehan? — PreguntóMinwoo en tono meloso —

—Estoy bien, puedo caminar sólo.— Minwoo hizo un puchero —

Empezamos nuestra caminata a loque había escuchado que iríamos a un lago. Me alcé un poco depuntillas al querer ver a aquella pareja, quién no estaban tomadosde mano, tampoco hablaban, ¿Pasaba algo entre Sam y Taesan? Meencogí de hombros, no iba a pensar en eso.

—Ahg, eshermoso. — Comentó Yoongi con mucho entusiasmo, empezando ya atirar su camisa para quedar sólo en pantalones cortos —

—Totalmentede acuerdo, vamos, hay que disfrutar. — Jay quitó también sucamisa, no pude evitar soltar una sonrisa avergonzada al ver la pieltan cuidada de Jay —

—¡Esperen! — Gritó Sungho, y yolo miré con miedo, ¡Me iba a dejar sólo! ¡Otra vez! ¿De verdadSungho era mi amigo? —

El chico ya mencionado quitó sucamisa y se fue corriendo a meterse en el lago, sin darme pasó areclamar algo. Tomé asiento en la oscura y húmeda tierra, elambiente se encontraba fresco, más la puntas de mis pies meinformaron que el agua estaba helada, mejor me quedaba en la orillaobservando todo.

—¿Quieres entrar? — Preguntó Minwoo, yonegué rápidamente con mi cabeza, el chico no quizo insistir y sólosoltó un pesado suspiro — ¿Y tu Sam?

La chica asintiófrenéticamente para empezar a quitar su ropa, me llegué a sentirhumillado, aquellos dos chicos la miraban tal cual octava maravilladel mundo, esa inseguridad y opresión en el pecho llegando de nuevo.Su cuerpo apenas estaba cubierto por pequeñas prendas de su traje debaño. Posicioné mis rodillas en mi pecho, un puchero tristeformándose en mis labios.

Minwoo y Sam se fuerontrotando al lago, y los únicos que quedábamos era Taesan y yo,quién estabamos en total silencio.

—¿Seguro que no quieresnadar? — Volví a negar en silencio. Taesan soltó un suspiro,quitó su camisa, miré hacia otro lado, era vergonzoso verlo así —Te voy a cargar.

—No lo hagas.

—Te voy a quitar laropa yo mismo.— Mis mejillas se tornarom rojas al escuchar eso,aquel recuerdo de la fiesta llegando a mi mente —

—No.

—Nome retes. — Taesan me levantó de golpe, entré en pánico—

—¡Está bien! ¡Está bien! — Solté un suspiroavergonzado. Miré una vez más el cuerpo de aquella chica en trajede baño, miré el suelo, sin ánimos de querer quitar mi ropa—

—Leehan. — Taesan tomó mi barbilla y la alzó, miréesos oscuros ojos que brillaban como siempre, los cuales merecordaban porqué me gustaba Taesan — Eres hermoso, créeme,muchas te tienen envidia.

Miré el suelo de nuevo, los dedosde mis pies rozandoce con los de Taesan. El chico tomó el borde demi camisa y la empezó a alzar con cuidado, sus fríos dedos rozandocon mi cintura, mis costillas, y por último mis brazos al lograrquitarme la camisa, dejándome sin aliento.

Me tapé conmis brazos, Taesan soltando pequeñas risas.

—Sí, no cabeduda de lo hermoso que eres. — Rozó sus dedos por mis clavículas— Ven, vamos a jugar.

Sí, sí a todo.

TᕮOᖇÍᗩ ᗪᕮᒪ ᗩᗰOᖇ [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora