Capítulo 15

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-Así que.. Eres hijo del socio de mi tío, el señor Paul.

-Sí- tomó un sorbo de su jugo. Parecía bata te sereno.- me llamo Jayn, gusto en conocerte, Ciara.

Este tipo "cree" que me conoce. Ja!

-Igualmente, igualmente -tomo un sorbo largo y divertido.

-Y... Qué te trae por aquí?

-Mi padre es un hombre de negocios así que..

Y habla sin rodeos!

-Vinieron a negociar? -interrumpo.

-No exactamente.

-Me imagino.. Pero, háblame de ti.. Estas aquí por alguna razón en especifico?

-Eso trataba de responderte..

Ups..

-Ahm.. Disculpa. Continúa.

-Estas ansiosa.

Que?!

-Yo? -claro que tu, Ciara- No! Para nada. Por qué habría de estarlo?

-Estoy seguro de que sabes la respuesta- sus ojos comenzaban a tener cierta intensidad.

-No entiendo a que te refieres.

El plan se está desviando!

-Desde mi punto de vista, olvidas rápido.

-Ja! Por qué lo dices?

-Es como si ya... O acaso no recuerdas?

Recordar qué?!

-Odio, odio y odio...- tomó un sorbo muuuuy largo y... elegante.

Me descubrió! O mejor dicho, me estaba siguiendo el juego!
Lo sabia todo, se acuerda de mi perfectamente. Agh! Mi subconsciente grita de rabia.
Quiero gritar muy, muy, pero muy fuerte!

- Sabes que? Me tengo que ir, Adiós.

Y este es el momento en que se supone que me traga la tierra o el piso o lo que sea que esté bajo mis pies, pero no! No sucede ni el más mínimo movimiento.

Me fui de aquel lugar. Mis pasos eran largos, rápidos y flotantes, que confuso! Estaba peleando con mi subconsciente, todo es su culpa!
Como no se me ocurrió que me seguiría el juego?

Llegue hasta donde mis padres, estaban conversando con la tía Marianne, la dulce Marianne.

-Interrumpo? -pregunte interesada.

-Claro que no! Ya te sientes mejor? A donde fuiste? -asegura papá.

-Estaba buscándote, Ciara. Te dije que no te fueras muy lejos..

-Tranquilos, tranquilos. Uno a la vez.
Si estoy bien, papá. Y también Salí al balcón a tomar un poco de aire. Me sentía.. bastante acalorada.

-Bueno, nos vemos en unos instantes. Le mostraré  algo a Ciara.

-Está en el piso de arriba?

-Si, por qué?

-Quiero estar lejos de.. La gente.

-Segura que te sientes bien?

-Oh, si. Claro. Es por.. el calor.

Si, el calor...

Pasamos nuevamente por el montón de gente hasta llegar a las escaleras, subimos y llegamos hasta su habitación. Era tan grande, ordenada,  delicada... Tan ella. Tenía muchos detalles lujosos, pero pequeños, de esos que hacen un lugar especial.
Mientras ella buscaba no sé qué, yo examinaba unos pequeños relojes que estaba en hileras. Era tan mágicos, antiguamentemagicos, indescriptiblemente como ella.

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