¿una vouivre que habla?

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Una rutina, en palabras simples son acciones que realizas por costumbre, un ejemplo es cuando trabajas, la rutina común es levantarse, bañarse, alistarse y después ir a trabar para al terminar sus labores regresar a casa y descansar solo para después realizar lo mismo seis días a la semana o incluso mas.

pero de vez en cuando acontecen cosas que perturban esa rutina que a muchos le agrada y otros la odian, pero en caso de cierto albino, esa rutina le agradaba, después de todo ir a la mazmorra era su pasión.

pero hace unos pocos días habia suscitado una situación que le hizo perturbar su rutina, aunque afortunadamente dicha situación no fue algo malo, la prueba estaba en este mismo momento.

- toma, te prepare este desayuno para iniciar tu día en la mazmorra.

- oh, ¿puedo saber que es?

bell pregunto mirando el tupper.

- solo son zanahorias sazonadas y un emparedado.

- ya veo, entonces me voy yendo ryuu-san.

la elfa sintió mirando al chico retirándose, ella no sabia el por que, pero algo dentro de ella ahora se sentía cálido, como si una carga se hubiera ido... como si una atadura se hubiera desatado y así liberado su alma.

- bueno, necesito volver al trabajo... ¿Qué debería prepárale para esta noche?

se pregunto entrado de nuevo a la anfitriona para poder iniciar sus labores

volviendo con bell, el albino corría por los pasillos del piso 2 de la mazmorra, en sus manos las dagas que sus compañero le habia preparado estaban firmes en su agarre, ya hacia media hora desde que habia entrado a la mazmorra y cada paso que daba, cada vez que bella acaba con un grupo de monstruos se daba un ligero descanso para recoger las piedras que iban cayendo al piso.

pero como eran los pisos iniciantes, bell no se podía permitir recogerlas esto a su bajo valor, no es que bell sea arrogante pero queria guardar espacio en sus bolsas para poder llevar piedras de monstruos mas valiosas y así poder generar un poco mas de dinero.

finalmente cuando llego al piso 12, bell empezó a recoger las piedras de monstruos y empezar a guardarlas, su objetivo era el piso 17 y después regresar, hoy por nada del mundo olvidaría ir a comer la comida que ryuu le habia preparado, después de todo el lo prometió.

llego al piso 17, miro el piso completamente blanco con atención, ¿el podría derrotar solo al Goliath?, si, su plan era solo llegar al piso 17 y después regresar, pero algo le decía que siguiera, no, alguien le pedía que avanzara, lo estaba llamando, le estaba pidiendo ayuda.

el no entendía sus sentimientos, era como aquella vez, cuando lili le pidió ayuda con la simple mirada... aunque después le grito cosas como enemigo de las mujeres y pervertido, pero al final la salvo y esta vez...

- si corro lo suficientemente rápido... puede que lo burle, pero ¿si alguien realmente necesita mi ayuda?, no creo poder llevar la misma velocidad cargando a alguien... no queda de otra.

bell saco sus dagas que habia enfundando con anterioridad y sin decir nada paso la barrera.

al cruzar la barrera, Bell sintió un estremecimiento., las piedras blancas del suelo comenzaron a romperse, revelando al temido Goliath, un ser gigantesco que superaba los siete metros de altura, u grueso cuello y apariencia casi humana contrastaban con su piel café grisácea, que parecía estar hecha de roca, su cabello negro, sucio y largo, llegaba hasta sus hombros, dándole un aire aún más imponente.

Los ojos rojizos de Goliath, del tamaño de la cabeza de una persona, brillaban con ferocidad, Con un rugido ensordecedor y gruñidos que resonaban en el aire, se preparó para el combate, bell, se enfrentó a la bestia con determinación. Sus dagas relucían en sus manos mientras se concentraba en su hechizo, un fuego ardiente que comenzaba a tomar forma.

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