Capítulo 6

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Halloween

1

Cuando llegó a su casa esa tarde se alegró demasiado de hacerlo antes que Sora y, posteriormente, intentó evitarla todo lo posible hasta la hora de la cena. Su hermana había regresado cansada de la universidad, con ojeras bajo sus ojos y un dejo intranquilo en el rostro. Hyukjae entendía que estuviera muy preocupada por él y creyera que se hallaba en peligro, pero sinceramente estaba exagerando. Lo que sea que haya hecho Donghae en el pasado, lo remedió en el presente. Él le preguntó si creía en las segundas oportunidades y la respuesta era sí. Todos merecían una segunda oportunidad. No tenía una razón verdadera para abandonarlo.

Cerca de las nueve Hyukjae se despidió de sus padres e intentó retirarse a su habitación, pero cuando estuvo a punto de entrar Sora lo tomó del brazo. Estaban en el pasillo del primer piso, solo ellos mientras sus padres veían televisión abajo. Empujó la puerta y le hizo una seña a su hermana para que entrara. Una vez apartados, Sora se cruzó de brazos y le dirigió una mirada dura, como cuando eran niños y Hyukjae se negaba a comerse las verduras.

—¿Ahora no vas a hablarme? —le preguntó. Hyukjae se encogió de hombros.

—No te hagas ideas. Te vi muy cansada y no quise molestarte.

—Luzco así porque mi hermanito está peligrosamente cerca de un psicópata. La preocupación me carcome ¿no lo entiendes?

Hyukjae se sobresaltó ante la palabra “psicópata”. Después de haber escuchado la historia de Donghae sentía que la sangre le herviría si alguien volvía a llamarlo así, aunque ese alguien fuera su propia hermana.

Abrió la boca, dispuesto a defenderlo ferozmente, pero a tiempo se dio cuenta que no tenía sentido. Podía tratar de explicarle lo mismo que Donghae le explicó. Podía decirle que tuvo una infancia de porquería y que cualquier cosa que hubiera hecho después fue producto de ello, que era tan solo un niño cuando su vida se truncó, que aquel chico Clarence se merecía un poco lo que le pasó, que Donghae estaba arrepentido y curado, que ahora era un hombre dulce y ejemplar, que la gente cambiaba. Sin embargo, guardó silencio. Sora era testaruda. Conocía muy bien a su hermana para saber que no era tan comprensiva como él. Además, lo que vio a los ocho años la dañó irremediablemente, se convirtió en un trauma, e hiciera lo que hiciera no podría sacarle de la cabeza que Donghae era un monstruo. Si peleaba con ella lo más seguro era que corriera a contarle el asunto a sus padres, quienes tampoco se esforzarían por comprender.

Hyukjae siempre fue un chico bueno. No ocasionaba problemas y nunca le había mentido a sus mayores más que un par de veces. Sin embargo, esa noche tomó la decisión: él también podía tener sus propios secretos.

—No tienes qué preocuparte más —le dijo. Sora levantó las cejas—. Donghae pensó que lo mejor para nosotros sería terminar todo. Antes de que yo lo dijera, él intuyó que me habías contado de su problema en la escuela elemental. Las cosas se sintieron raras cuando hablamos esta mañana, así que lo dejamos por la paz. 

Era la mayor mentira que Hyukjae había dicho en su vida, por lo que trató de lucir lo más triste posible, cosa que en realidad no era tan fácil pues sus sentimientos distaban mucho de ello. Había tenido sexo con Donghae por primera vez y eso lo hacía sentir muy suyo, como si fueran uno solo.

—¿En serio? —preguntó Sora. Hyukjae asintió cabizbajo y se sentó en el borde de su cama. Clavó la mirada en el suelo y así se quedó, pues si miraba a su hermana a los ojos temía que descubriera la verdad.

Sora terminó por tragarse la mentira. Se sentó a su lado y le acarició el cabello gentilmente. 

—Oye, lo siento, Hyuk. Sé que te gustaba mucho —le dijo. Él se encogió de hombros, incapaz de hablar por la culpa—. Estás en tu primer semestre de universidad, tienes por delante un montón de experiencias qué vivir. Encontrarás más chicos dispuestos a tratarte como rey. Te aseguro que las cosas mejorarán, aunque ahora se vean un poco oscuras.

Bloody mirage (Haehyuk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora