Lua se encontraba cada vez más cerca de sus amigos. Avanza con paso firme y, a medida que avanza, piensa en el enfrentamiento con Resto para liberar a sus amigos. Nada puede salir mal. Lua fija la mirada en lo que parece una construcción a lo lejos, de momento solo puede ver lo que ella cree que es un tejado. A la vez que se acerca la imagen cobra más nitidez y, es en ese momento cuando logra identificar la camioneta morada con esa enorme jaula en la parte de atrás. Enseguida, se le acerca Resto.
Lua, con su sonrisa radiante, se sitúa frente a Resto, cuyos ojos reflejan una mezcla de sorpresa y desconcierto. Con paciencia, Lua le explica las experiencias vividas en su viaje. Describe cómo cruzó el vasto desierto de la pena, donde aprendió a enfrentar la tristeza y a encontrar consuelo en la compañía y el tiempo. Luego, compartió la historia de su travesía a través del volcán del enfado, donde descubrió la liberación que viene al expresar y comprender la ira de manera constructiva.
A Resto nadie le había explicado nunca nada positivo de la rabia o de la pena. Es más, estaba preparado para cualquier tipo de conflicto, se quedó sin reacción para las palabras de la pequeña. Resto, asombrado por la sabiduría de Lua, se da cuenta de que sus acciones estaban motivadas por la falta de comprensión de sus propias emociones.
Conmovido, Resto libera a los niños y Lua los reúne con un fuerte abrazo. Juntos, regresan a Cielisia, donde Lua comparte sus enseñanzas con la comunidad. A medida que las personas absorben la sabiduría de Lua, la aldea se transforma en un lugar donde se celebra la diversidad emocional. Lua muestra a todos que la verdadera felicidad no reside en la ausencia de emociones difíciles, sino en la capacidad de abrazarlas y aprender de cada una.
De esta manera, Lua se convierte en la nueva luz de Cielisia. No dejó de sonreír nunca, no. Sin embargo, Lua sabia cuando necesitaba poner en erupción su volcán interior de una manera calmada y sin hacer daño a su alrededor y cuando necesitaba hacer llover en su desierto para florecer las flores más bonitas de su alma.
Y, finalmente, Lua sonríe de nuevo.
No porqué siempre está feliz, si no porqué, ahora, es una chica más fuerte.
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LA BRILLANTE AVENTURA DE LUA
FantasyEn el pequeño pueblo de Cielisa, donde cada sonrisa brillaba como una estrella en el vasto cielo nocturno, vivía una niña llamada Nausilia, conocida por todos como Lua. Su figura pequeña y su largo cabello negro parecían guardar un misterio, pero er...