Una mujer peliblanca a inicios de sus 20 abrio una puerta, dejando ver la azotea del edificio donde estaba, la mujer miró al chico que estaba sentado sobre los muros de seguridad de la azotea.
- ¡Señorita Winter! -El adolescente peliverde dejo de ver por un momento el horizonte y habló con una sonrisa.- ¿Que hace aquí? -
- Eso es lo que yo debería preguntarte, se supone que debes estar en clases Izuku... -Winter regaño seriamente al chico.-
- Clases esto, clases aquello, ¿de que sirve manejar una espada o crear un arma? -Izuku preguntó con aburrimiento y volteaba su mirada al horizonte.- ¡Prefiero ver la nieve! -Izuku declaró con emoción mirando la nieve.-
- Habló de tus clases particulares. -Winter dijo seria y haciendo que Izuku se quedará en silencio.- Me entere que no estuviste yendo últimamente, puedo saber por que? -Winter se paró al lado del chico, mirando al horizonte blanco tambien.- Prontó cumpliras 15 años y estás atrasado en conocimiento comparado a los de tu edad -
- Pero ya se todo lo que debo saber -Izuku se quejó mirando a Winter.- Y si hay algo que no se puedo aprenderlo rápido, ¿no dicen los profesores que soy un genio? -Izuku preguntó mientras pataleaba al aire con aburrimiento.-
- No estoy hablando de lo teórico, me refiero a cómo vivir, ¿Cómo es que quieres vivir? -
- ... -Izuku se quedó en silencio, miro hacia el frente.-
"¿Qué hay más allá de lo que puedo ver?"
- ¡Quiero ser libre! -
- ¡Izuku, no saltes desde aquí! -
Winter abrió los ojos lentamente, dejando de recordar al mirar el blanco paisaje.
